APÓSTOLES DEL CARPINTERO JESÚS
DE NAZARETH EN MALLORCA
Muy poco
tiempo después de la muerte del obrero carpintero Jesús de Nazareth, el Cristo,
llegaron a Mallorca algunos familiares y amigos de Jesús, o sea, apóstoles,
conocidos como “los nazarenos”, años más tarde llamados “cristianos”. Se
trataba de unos pocos, que formaban parte de un grupo más numeroso de judíos
seguidores de la religión de Moisés. En nuestra familia hemos seguido el
mensaje de Jesús, somos pues, cristianos. Con la llamada “conquista” del rey
Jaime I, que vino a Mallorca con la ayuda de la iglesia católica, y después con
la Inquisición, obligaron a todos los nativos o habitantes de Mallorca a ser
bautizados, por la fuerza, en esta llamada “iglesia católica”, y algunos,
fueron encarcelados por negarse, y otros fueron quemados vivos en un terraplén
que estaba cerca del Castillo de
Bellver, en Palma, hoy conocido como la Plaza Gomila. A los israelitas que
quedaron vivos, que consintieron en ser bautizados, esta iglesia católica les
puso el mote de “xuetas”, utilizado como desprecio y burla que se hacía hasta
hace muy pocos años a los israelitas seguidores de Moisés, y a nosotros, los
seguidores de Jesús, el Cristo, o sea, la iglesia pobre, y claro está, que la
iglesia rica que empezó muchísimos años después de morir Jesús, en Roma, con el
llamado “Vaticano”, y después el protestantismo, que salió de ellos mismos por
obra de un sacerdotes católico llamado Martín Lutero, en Alemania, no son el
cristianismo de Jesús, y no tienen nada que ver con su iglesia pobre, que en la
actualidad formamos en Mallorca, y en otros lugares del mundo, seamos
descendientes o no de la familia y amigos de Jesús, y la formamos como obreros
y obreras, siendo el único y verdadero cristianismo en el mundo. Tanto mi
familia, como unas pocas familias que he conocido, seguidores del mensaje de
Jesús desde la llegada de nuestros antepasados a Mallorca, siempre hemos
procurado trabajar para comer, y vivir al Cristo en nosotros mismos. No se nos
tiene que confundir con los seguidores de la religión de Moisés, quienes
siempre han ido más al negocio; pero aquí no se trata de juzgar a nadie, y al
referirnos a la iglesia rica, tampoco los juzgamos, ni a sus jerarquías,
sacerdotes, creyentes, etc. Yo mismo he conocido católicos y protestantes,
gente trabajadora, obreros, muy buenas personas, que han tratado, y tratan de
vivir al Cristo, y claro está, que estos forman parte, con nosotros, del
verdadero cristianismo de Jesús de Nazareth, o sea, de su iglesia pobre, y se
comprende muy bien, que no tienen ninguna necesidad de pertenecer a la iglesia
rica. Nosotros no tratamos de imponer ideas a nadie, pero tenemos el derecho, y
el deber, de predicar el verdadero y único cristianismo de Jesús de Nazareth.
Obreros y obreras de todo el mundo, tened presente que el reino de Dios es de
los pobres, y que nadie es cristiano, si no vive al Cristo en sí mismo. Cristo
es Paz, Justicia, Bondad, y cualquier familia de obreros, aunque sean dos o
tres personas, si viven al Cristo,
forman la verdadera iglesia de Jesús de Nazareth, y si los ricos quieren ser,
de verdad, cristianos, ya saben lo que Jesús les dice: “No se puede servir a Dios y al dinero”. Nosotros, los obreros y
obreras que formamos la iglesia pobre, tenemos el derecho y el deber de decir a
toda la humanidad, y sobre todo, a la iglesia rica, tales como el catolicismo,
el protestantismo, etc. que si quieren ser, de verdad, cristianos, que busquen
a Cristo, cada uno en sí mismo, pero si no les interesa, que no hablen más de
Jesús de Nazareth, que no se burlen de Dios, y de nosotros, los pobres que
tratamos de vivir de verdad al Cristo. Un fraternal saludo de nosotros, los que
formamos la iglesia pobre, apóstoles de Jesús, el Cristo, y sacerdotes de Dios,
cada uno en nuestra propia vida. Animos amigos, buscad a Cristo. Así sea. Amén.
CRISTO ES EL BUEN PASTOR Y
REÚNE A TODAS SUS OVEJAS
En la Biblia
podemos leer lo siguiente: “Yo soy el
buen pastor, el buen pastor da su vida por sus ovejas, el asalariado, ve venir
el lobo y deja las ovejas y huye y el lobo arrebata y dispersa las ovejas,
porque es asalariado y no le da cuidado de las ovejas. Yo soy el buen pastor y
conozco a las mías y las mías me conocen a mi, como el padre me conoce y yo
conozco al Padre y pongo mi vida por las ovejas. Tengo otras ovejas que no son
de este aprisco, y es preciso que yo las traiga y oirán mi voz y habrá un solo
rebaño y un solo pastor”, Juan 10 11-16. Por que donde están dos o tres
congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos, Mateo 18, 20. El reino de Dios es de los pobres, Lucas,
6, 20. Los obreros y obreras que formamos la iglesia pobre somos el verdadero y
único cristianismo del obrero carpintero
Jesús de Nazareth el Cristo. Alguno de nosotros somos descendientes de los
primeros israelitas cristianos que llegaron a Mallorca poco tiempo después de
la muerte de Jesús. Ya hemos dicho en muchas ocasiones que el cristianismo, no
es simplemente una creencia, o practicar ritos, ceremonias, etc. el
cristianismo es vida espiritual, sin Cristo en si mismo nadie es cristiano.
Cristo es el espíritu de Dios, Maestro y Pastor de los seres humanos que siguen
el verdadero pastor, como hacemos nosotros los obreros y obreras de la iglesia
pobre, somos pues apóstoles de Cristo y sacerdotes de Dios, pero está al
alcance de toda la humanidad si se busca el verdadero pastor y estas son las otras ovejas a que se refiere
Cristo cuando dice que tiene otras ovejas que no son de su aprisco, en la
iglesia rica, catolicismo, protestantismo, etc. Los creyentes estás divididos
en ricos y pobres, seguramente hay personas que tratan de vivir el verdadero
cristianismo. Nosotros les aconsejamos que si quieren seguir al verdadero
pastor, se aparten de toda religión o iglesia organizada por los hombres, que
son pastores asalariados. Cuando Cristo nos dice que donde están dos o tres
personas reunidas en su nombre, en
nombre de Dios, este está presente, esta es la verdadera iglesia de Jesús y con
otras personas o familia formamos el
verdadero rebaño de ovejas espirituales y nuestro pastor claro está es Cristo.
Y cuando leemos el en el Evangelio de Juan que Jesús dice al apóstol Pedro:
apacienta mis ovejas, se ve claramente que es un añadido de la iglesia rica.
Jesús no nombró a ningún pastor asalariado y vemos que el apóstol Pedro,
después de la resurrección de Jesús, seguía trabajando, su oficio era de
pescador. Los creyentes católicos y protestantes, ya lo saben si quieren ser
cristianos de verdad, que busquen al verdadero Pastor y Maestro que es Cristo y
formarán como nosotros, la iglesia pobre, en cualquier lugar del mundo, porque
lo importante no es que nosotros como ovejas, nos conozcamos personalmente y
nos agrupemos por miles y millones, porque Cristo, el buen pastor, saber
cuantos somos en el mundo y dice: “Por
sus frutos los conoceréis” Y los frutos son: Paz, Justicia, Bondad. Este es
el verdadero y único cristianismo. Ánimos amigo, buscad al buen pastor que es
Cristo. Así sea amén.
CRISTO ES EL MAESTRO Y PASTOR
EN EL INFINITO UNIVERSO
Soy un obrero
yesero ya jubilado, y no soy católico, ni protestante; mi cristianismo ha
llegado hasta mí de forma oral, de padres a hijos, por se descendiente de los
apóstoles israelitas que llegaron a Mallorca poco tiempo después de la muerte
del obrero carpintero Jesús de Nazareth. Pero lo más importante es mi propia
experiencia con Cristo, o sea, el Espíritu de Dios. Cristo es el verdadero
Maestro y Pastor que enseña y guía a todos los seres humanos, los seres
vivientes que viven en los mundos y en el cielo del infinito Universo. La
verdadera religión de Dios es la que enseña el Maestro, o sea, el Cristo que
está presente en todas partes, por ejemplo, en nuestro mundo Tierra, en cada
ser humano, si lo busca, cada uno en sí mismo, no en las religiones organizadas
por los hombres, que en nuestro mundo siempre han hecho mucho más mal, que
bien, organizando y apoyando guerras y fanatismos, como la misma Inquisición.
De no ser por esta parte dramática de la historia humana, sería cómico,
infantil, y de verdadera ignorancia de estos seres humanos que con estudios de
seminarios, y ridículos títulos, paga mensual, etc. se presenten como
“maestros” de algo que ignoran, y no comprenden, es decir, lo que llamamos
Cristo, o sea, Dios mismo, que es la Justicia, la Paz, y la Bondad, que son la
Sabiduría de Dios. Esto es lo que se vive en los mundos más adelantados del
infinito Universo, así como también en el mismo cielo. Y cuando hablo de
“mundos adelantados”, no me refiero a nada físico, como son las máquinas, los
aparatos de toda clase, etc. sino que se trata del espíritu, que adelanta,
progresa, va creciendo, enseñado y dirigido por Cristo. En los mundos en los
que los seres vivientes están más adelantados espiritualmente, no hay
fronteras, ni países, no hay ejércitos, no hay ninguna clase de religión,
porque estos seres viven lo que podemos llamar la verdadera Justicia, Paz y
Bondad. Y se ve muy claramente que en nuestro mundo al que llamamos “Tierra”,
la mayoría de los seres vivientes están muy atrasados, viven en la ignorancia,
porque la humanidad está dividida en ricos y pobres, y en todo el mundo hay
muchas religiones, con sus sacerdotes, templos, etc. pero sin Dios. Sin
embargo, al mismo tiempo, en nuestro mundo hay muchos espíritus, o sea, seres
humanos muy avanzados, y ya Jesús mismo nos dice: “Por sus frutos los conoceréis”. La Bondad es la que demuestra
claramente que estos seres humanos que viven esta experiencia, esta Bondad, son
los verdaderos apóstoles y representantes de Dios, y esto es lo que se vive en
los mundos más avanzados del infinito Universo. Y el Cristo, que es el Maestro,
te enseña y te deja ver, espiritualmente hablando, el cielo, que no es un lugar
determinado, sino que es todo el infinito Universo, porque Dios no tiene
límites, y El es, y está, en todas partes, y allí donde está Dios, está el
cielo; es pues, un estado espiritual, por lo tanto, nada de castigos, ni de
muerte eterna; todo es vida, los mundos, estrellas, galaxias, seres a los que
llamamos “humanos”, animales, árboles, plantas, etc. Todo es vida, todo se
transforma, pero nada muere, porque todo es Dios, y Dios, que es el Creador y
Padre de todos, y de todo, es eterno. Este mensaje, que presento siendo yo un
obrero ya jubilado, es para toda la humanidad, y sobre todo, para los ignorantes
que se presentan al mundo como jefes religiosos o políticos, y para los que
acaparan riquezas materiales. Ánimos amigos, ricos y pobres, buscad al
verdadero Maestro, al que llamamos Cristo. Así, sea. Amén.
DIOS CREA EL FUTURO Y NO
CONDENA A NADIE
Podemos leer
en la Biblia lo siguiente: “Vinieron un
día los hijos de Dios a presentarse delante de Yavé y vino también entre ellos
Satán, a quién pregunto Yavé: “¿De dónde vienes?” Respondió Satán: “Vengo de
dar una vuelta a la Tierra y pasearme por ella... Job 1, 6; ”Yo soy Yavé, no
hay ningún otro. Yo formo la luz y creo las tinieblas, yo doy la paz, yo creo
la desdicha; soy yo Yavé, quien hace todo esto” Isaías, 45, 7); “El que creyere y fuere bautizado se
salvará, mas el que no creyere, se condenará” Marcos 16, 16. Y Jesús,
refiriéndose a acontecimientos del futuro, nos dice: “De aquél día y de aquella hora nadie lo sabe, sólo Dios” Mateo 24,
36. Según lo que leemos en la Biblia, Dios crea el futuro, por lo tanto, lo
sabe todo; y si Jesús nos habla de salvación o condenación, se comprende muy
bien que Jesús no podía decir tal cosa, y que esto es un añadido de los que
compusieron el llamado Nuevo Testamento en el Vaticano con cartas de los
apóstoles. Cuando Dios crea espíritus, almas, etc. el nombre es lo de menos; El
ya sabe si escogeremos el bien o el mal, ya que por mucha libertad que nos de,
Dios sabe nuestra elección final. Es imposible pues, creer que Dios forma
espíritus para una condenación eterna, porque El crea el futuro. La mente del
ser humano que piensa, que medita estas cosas, no puede admitir a un Dios malo,
caprichoso, etc. porque Dios es infinita Sabiduría, Justicia, Paz, Bondad, etc.
Nosotros, los obreros y obreras que formamos la iglesia pobre, comprendemos muy
bien que la religión de los ricos, tales como el judaísmo, catolicismo,
protestantismo, etc. de las sencillas enseñanzas de los profetas, escritas
después en este libro que llamamos Biblia, han sembrado tal confusión, que una
mente sencilla no puede admitirla, y todo esto es producto de las jerarquías y
sacerdotes de estas religiones. Comprendemos muy bien que todo esto procede de
la ignorancia, ya que estos seres humanos, para poder tener poder político y
llenarse de riquezas materiales, se valen de Dios, o lo que llamamos Dios, el creador
y recreador del infinito Universo. En la historia de estas religiones vemos con
tristeza que han armado o apoyado guerras, la Inquisición, etc. pero insistimos
en que todo esto es ignorancia por parte de estos seres humanos. Jesús de
Nazareth y sus amigos, a los que llamamos apóstoles, son la iglesia pobre, y en
la actualidad somos nosotros, los obreros y obreras que formamos esta iglesia,
la iglesia de Jesús, o sea, la iglesia pobre. Aconsejamos a las jeraquías y
sacerdotes que se fundan en la Biblia que sean sinceros, y que si quieren
seguir en esta línea de poder político y acumular dinero, que no pongan a Dios
por en medio, y mucho menos a nuestro amigo, Jesús de Nazareth. Si quieren ser
cristianos de verdad, que sean como nosotros los pobres, trabajando para comer
y predicando a Cristo, viviendo la Paz, la Justicia, la Bondad, que son la
Sabiduría de Dios. Ánimos amigos, ricos y pobres buscad a Cristo, y saldréis de
la ignorancia que domina a muchos seres humanos en las cosas de Dios. Ánimos
amigos, buscad a Cristo. Así sea. Amén. (Abril).
EL APÓSTOL PEDRO ERA UN OBRERO,
ERA POBRE
Soy descendiente de los primeros israelitas cristianos que
llegaron a Mallorca, poco tiempo después de la muerte del obrero carpintero
Jesús de Nazareth, el Cristo, cuyo sencillo mensaje ha llegado hasta nosotros
de forma oral, de padres a hijos, y con otros obreros y obreras, descendientes
y no, formamos la iglesia pobre. La iglesia rica, tales como el catolicismo, el
protestantismo, etc. no son la iglesia de Jesús de Nazareth. El llamado
“Vaticano”, de Roma, fue organizado muchos años después de la muerte de Jesús;
se formó una jerarquía, y unos sacerdotes con estudios de seminario y paga
mensual, con títulos que se han aplicado a ellos mismos, como el de “papa”, del
cual dicen que es el sucesor del apóstol Pedro. Pero el apóstol Simón, más
tarde llamado Pedro, era un obrero, de oficio pescador, por lo tanto, era
pobre, como todos los demás apóstoles, hombres y mujeres, amigos de Jesús. En
la historia de los papas, siempre se ha visto lo mismo, que están en la parte
rica, pues nunca hemos visto a ninguno que fuera obrero, pescador, albañil,
carpintero, barrendero, etc. Nosotros preguntamos: “Si estos papas dicen ser
sucesores del apóstol Pedro, ¿Por qué no actúan y hacen lo mismo que Pedro, que
después de la muerte y supuesta resurrección de Jesús, siguió trabajando como
todos los demás apóstoles?” Estas cosas, además de saberlas nosotros por
tradición, lo confirman los evangelistas, sobre todo Juan, al final de su Evangelio:
“Simón Pedro dijo: “Voy a pescar”, y los
otros le dijeron: “Nosotros también vamos contigo” Juan 21, 3; y Pedro le dijo
al tullido: “No tengo oro, ni plata...” . Hechos 3, 6, “Viendo la entereza de Pedro y Juan, y considerando que eran hombres
sin letras y del vulgo, se maravillaban...” Hechos 4, 13; “Cuando los apóstoles, que estaban en
Jerusalén, oyeron como había recibido Samaria la palabra de Dios, enviaron allí
a Pedro y a Juan” Hechos 8, 14. Los apóstoles envían a Pedro; está, pues,
claro que era un apóstol más, no era jefe, o papa de nadie. Los apóstoles, en
tiempos de Jesús, eran personas sin estudios de ninguna clase, pero tenían en
ellos mismos al Cristo, o sea, al Espíritu de Dios, y desde Jesús, hasta
nosotros, en la actualidad, los pobres, hombres y mujeres que hemos procurado
ser cristianos, hemos buscado a Cristo en nosotros mismos. Cristo, o sea Dios,
es Paz, Justicia y Bondad. Estos sentimientos son para vivirlos, no son
creencias. Cuando se vive en y con Cristo, se produce la verdadera comunión con
Dios. Sobran pues toda clase de jerarquías y sacerdotes asalariados, ya que el
verdadero cristiano es un verdadero apóstol y sacerdote de Dios. Nosotros, los
que formamos la iglesia pobre actual, hacemos un sincero llamamiento a las
jerarquías y sacerdotes de la iglesia rica, tales como el catolicismo, el
protestantismo, etc. y sobre todo, al Vaticano católico de Roma, que si quieren
ser cristianos de verdad, busquen a Cristo, cada uno en sí mismo, y podrán
predicarlo con propiedad a todos los habitantes de este mundo, pero primero
tienen que dejar las riquezas materiales que poseen, y nosotros con nuestra
oración a Dios, le pedimos que con su Espíritu, que es Cristo, os ilumine, y
que también lo haga a todos los millones de seres humanos que os siguen, y
decimos: “Dios Creador y Recreador del infinito Universo, ilumina y guía a toda
la humanidad de nuestro mundo. Así sea. Amén.
EL INFINITO UNIVERSO ES LA CASA
DE DIOS
En la Biblia
podemos leer lo siguiente: “El colgó la
Tierra sobre el vacío”, Job 26, 7; “Yo
dije: “Sois dioses, todos vosotros sois hijos del altísimo”, Salmos 82, 6. “En la casa de mi Padre hay muchas moradas,
si así no fuera, os lo diría, porque voy a prepararos el lugar, de nuevo
volveré y os tomaré conmigo, para que donde yo estoy, estéis también vosotros”,
Juan 14, 2. Yo soy un obrero yesero ya jubilado descendiente de los
primeros israelitas cristianos que llegaron a Mallorca poco tiempo después de
la muerte del obrero carpintero Jesús de Nazareth, llamado el Cristo. Su sencillo
mensaje ha llegado hasta nosotros de forma oral de padres a hijos. He conocido
también unas pocas familias que pueden decir lo mismo que nosotros. Desde muy
joven he tenido siempre sueños, muchos de ellos producidos por mi mismo, a
voluntad; a esto le llaman “viaje astral”. Desde niño, he procurado siempre
tener en mí mismo al Espíritu de Dios, al que llamamos Cristo, o Espíritu
Santo, y me he dejado guiar siempre por El, y me ha mostrado muchos mundos y
galaxias, del infinito Universo. De esta forma he podido comprender que la
llamada “resurrección”, de la que nos habla Jesús de Nazareth, es del espíritu.
Ya, Jesús mismo, nos dice: “Las palabras
que yo os hablo son Verdad y Espíritu, la carne para nada aprovecha”; y
cuando algunos le preguntaron sobre la resurrección, le presentaron este
ejemplo: “Hubo una mujer que tuvo siete
maridos; en la resurrección, ¿quién será su marido?” y Jesús les dice: “No
entendéis nada, en la resurrección no se casan, ni se dan en casamiento, son
espíritus, son ángeles”. Seguramente estos que habían preguntado estas
cosas a Jesús, eran religiosos, o sea, sacerdotes. Yo mismo, el obrero yesero
ya jubilado, les digo a las jerarquías y sacerdotes de la iglesia rica, tales
como el catolicismo, el protestantismo, etc. que no entienden nada sobre la
resurrección de Jesús de Nazareth, y continuamente están sembrando la confusión
a sus seguidores, o sea, a los creyentes de esta iglesia, que se autotitula
“cristiana”. El apóstol Pablo dice: ”No
vivo yo solamente, es Cristo el que vive
en mi”. Jesús mismo nos dice: “Donde
están reunidas dos o tres personas en mi nombre, allí estoy yo”. Es Cristo,
el Espíritu, el que está presente y nos dice estas cosas, por boca de Jesús,
entonces, el obrero carpintero Jesús de Nazareth no puede estar dentro del
apóstol Pablo, ni dentro de nadie, ni estar presente donde están personas
reunidas en su nombre, y al mismo tiempo, este ser humano llamado Jesús, estar
sentado al lado de Dios. Todo esto nos demuestra claramente que dirigentes y
dirigidos de la religión o iglesia rica no entienden nada, es normal pues, que
vayan siempre al poder político y al dinero, pero en las cosas espirituales son
completamente ignorantes, porque en el infinito Universo hay muchos mundos,
seguramente el número es infinito, habitados por seres humanos. Si Jesús es el
único hijo de Dios, cada mundo tiene que tener a un Jesús humano, que muere y
que resucita para salvar a sus habitantes, pero esto no puede ser así. El que
vive en y con todos es el Espíritu de Dios, al que en nuestro mundo llamamos
“Cristo”. Esperemos que estas personas que dirigen la iglesia rica comprendan
estas cosas. Así sea. Amén.
EL VERDADERO MAESTRO ESPIRITUAL
ES CRISTO
Jesús de
Nazareth dice: “Porque uno es vuestro
Maestro, el Cristo, y todos vosotros sois hermanos”; “El reino de Dios es de
los pobres”, Lucas 6,20. Yo soy un obrero yesero ya jubilado, descendiente
de los primeros israelitas cristianos que llegaron a Mallorca poco tiempo
después de la muerte del obrero carpintero Jesús de Nazareth., cuyo sencillo
mensaje ha llegado hasta nosotros, a nuestra familia, de forma oral de padres a
hijos. He conocido a unas pocas familias que también recibieron el mensaje de
Jesús. Nuestro cristianismo, pues, no tiene nada que ver con la iglesia rica,
tales como el catolicismo, el protestantismo, etc. Recuerdo que yo era un niño,
y mi abuelo me decía: “Procura estar bien siempre con Dios, con la oración
íntima, y para eso no necesitas sacerdotes de ninguna religión organizada por
los hombres”. Nací en Inca, pero siempre he residido en Palma. Recuerdo que
vivíamos en una pequeña casa de la calle San Miguel. Yo tenía unos 13 ó 14
años, y mi abuelo y yo hacíamos reuniones con algunos amigos, hablando de las
cosas de Jesús. Pero algunos sacerdotes católicos venían a casa y me ofrecían
pagarme los estudios de seminario para hacerme sacerdote, y un poco más
adelante me ofrecieron lo mismo los pastores protestantes, y los rabinos de
Israel, pero a todos les dije que no. En la actualidad tengo 86 años, y estoy
muy satisfecho de haber dicho que no al capitalismo, porque he procurado tener
siempre en mi mismo al verdadero Maestro y Pastor, que es Cristo, el cual
siempre me ha dictado: “Tienes que trabajar para comer, y ayudar a la familia,
y hacer la oración íntima, espiritual; ya que es el verdadero lenguaje que más
nos acerca a vivir la verdadera comunión con Dios”. Con otros obreros y
obreras, formamos la iglesia pobre de Jesús de Nazareth, sin templos, ni
pastores asalariados. Esto es el verdadero cristianismo. Aconsejamos a las
jerarquías, sacerdotes y creyentes, ricos y pobres, de la iglesia rica, tales
como el catolicismo, el protestantismo, etc. que practiquen este modo de vida
No se trata, pues, de estar encerrado en un convento, monasterio, etc. por la
sencilla razón de que, materialmente hablando, sería imposible para toda la
humanidad hacer lo mismo, sin embargo, tener la iglesia de Jesús en casa, y
vivir en y con Cristo, está al alcance de todos los seres humanos. Jesús de
Nazareth dice: “Aprended de mi”, y él
trabajaba para comer, y predicaba sin pedir dinero a nadie, y nos dice que “el
verdadero Maestro es Cristo, es el Espíritu Santo de Dios y todos los seres
humanos somos hermanos”. Está claro, pues, que siendo todos hermanos, es un
absurdo creer que unos hermanos tienen que enseñar a otros, porque el verdadero
Maestro es Cristo, es el Espíritu de nuestro Padre Dios, Creador y Recreador
del infinito Universo. Hacemos un fraternal llamamiento a los sacerdotes o
rabinos de la religión judía, a la jerarquía de la religión católica del
Vaticano, y a toda la jerarquía y pastores del protestantismo, para que busquen al verdadero Maestro, que es
Cristo, que es el Mesías. Esto también sirve para todas las religiones del
mundo, aunque le den nombres diferentes al Espíritu de Dios. Esta es la
solución al verdadero problema de la humanidad, s queremos vivir en un mundo de
Paz, Justicia y Bondad. Ánimos a todos, amigos. Buscad a Cristo. Así sea. Amén.
ENCONTRAR A CRISTO EN TI MISMO
TE HACE CRISTIANO
Soy
descendiente de los primeros israelitas cristianos que llegaron a Mallorca poco
tiempo después de la muerte del obrero carpintero Jesús de Nazareth, cuyo
mensaje ha llegado hasta nosotros de forma oral, de padres a hijos. Esta es la
parte teórica del mensaje, pero lo más importante de todo es encontrar al
Espíritu de Dios, al que llamamos “Cristo”, en uno mismo, en la propia vida. La
oración no debe ser solamente de labios, sino también de la mente, así te
acerca a Dios y empiezas a sentir en ti mismo al Cristo, y te das cuenta de
ello porque empiezas a sentir la verdadera Paz, Justicia, Bondad, o sea, la
Sabiduría de Dios. Con Cristo en ti mismo es fácil apartar de tu mente todas
las ideas negativas como son la maldad, envidia, odio, egoísmo, etc. y empiezas
a sentir la verdadera vida como ser humano, y no tan animal. Cristo te enseña y
te guía continuamente por los caminos de la vida. Cristo es Luz, y cuando hay
Luz, se ven las cosas claras. El cristiano de Cristo rechaza toda clase de
títulos, como son los de “papa”, “cardenal”, “obispo”, “conde”; “marqués”,
“príncipe”, etc. El cristiano de Cristo no se mete en ninguna clase de partidos
políticos, ni de religiones, todo ello organizado por los hombres. El cristiano
vive la verdadera vida que Dios nos da a todos, y que muy pocos entienden,
porque les domina la vanidad, y sobre todo, el egoísmo. Los sacerdotes de la
religión judía, los de la iglesia católica, los de las iglesias protestantes,
etc. no entienden, o no quieren entender, que Cristo siempre está presente para
todo aquél ser humano que lo busca de verdad en sí mismo. Los profetas de
Israel tenían en ellos mismos al Cristo, y con propiedad, lo predicaban; esto
es el Mesías. Los sacerdotes de Israel, o sea, el judaísmo, siempre están
esperando al Mesías. Los sacerdotes católicos y protestantes dicen que Jesús de
Nazareth era el Mesías, pero que tiene que volver, otra vez, para implantar su
reino. El resultado es que las jerarquías y sacerdotes judíos, católicos y
protestantes predican las cosas de Dios, pero no viven al Cristo, y se puede
decir aquello de que “entre unos y otros, la casa se queda sin barrer”. El
resultado de todo esto es muy triste, muy dramático: intrigas políticas,
siempre acaparando dinero, apoyando y armando guerras, y millones de seres
humanos engañados, cumpliéndose lo que Jesús nos dice: “Si un ciego guía a otro ciego, ambos se caen”. Los obreros y
obreras que formamos la iglesia pobre, comprendemos que en estas llamadas
“iglesias” o “religiones”, hay personas de buena fe que buscan a Cristo, y
seguramente lo viven, pero no tienen ninguna necesidad de pertenecer, como
creyentes, a ellas, pues en realidad son partidos políticos que no buscan nada
más que el poder político y el dinero. Pero los cristianos de Cristo que en
este mundo formamos la iglesia pobre de Jesús, y que vivimos al Cristo sin
haber organizado nada como secta, religión, etc. al vivir al Cristo, podemos
decir, con propiedad, a las jerarquías y sacerdotes de estas religiones o
iglesias, que busquen a Cristo, cada uno en sí mismo, en su propia vida, y este
llamamiento también lo hacemos a todos los pobres del mundo, para que no
ambicionen hacerse ricos, sino que busquen al Cristo. A los ricos les
aconsejamos lo que les dice Jesús: “Devuelve
las riquezas acumuladas, y que sirvan para el bienestar de todos”. En una
palabra, que todos los seres humanos de este mundo busquen al Cristo, que es
Paz, Justicia, Bondad, Sabiduría de Dios; esto es el Mesías. No se trata, pues,
de hablar de Cristo, o de creer en Cristo, se trata de vivir al Cristo; que es
la verdadera comunión con Dios. Ánimos amigos. Así sea. Amén. (Marzo).
JESÚS DE NAZARETH EL CRISTO Y
SU IGLESIA POBRE
Los que
formamos la iglesia pobre somos obreros y obreras. Algunos somos descendientes
de los apóstoles y familiares de Jesús de Nazareth, que llegaron a Mallorca
poco tiempo después de la muerte del obrero carpintero, Jesús, el Cristo, cuyo
mensaje ha llegado hasta nosotros de forma oral, de padres a hijos. En este
mensaje, podemos decir con propiedad por con las experiencias propias del
Cristo, que somos, como iglesia pobre, el verdadero y único cristianismo en el
mundo. La iglesia rica, tales como el catolicismo, el protestantismo, etc. no
son, ni han sido nunca, la iglesia pobre de Jesús. Además, esta iglesia rica
está dividida en ricos y pobres, y lo más triste es que las jerarquías y
sacerdotes, están en la parte rica. En estas organizaciones hay creyentes
pobres, y seguramente los hay de buena fe que tratan de vivir al Cristo. A
estos les aconsejamos que piensen bien todo esto, que si viven al Cristo en
ellos mismos, no tienen ninguna necesidad de pertenecer como creyentes, como
miembros, a la iglesia rica. Siendo nosotros la iglesia pobre de Jesús, tenemos
el derecho y el deber de decir a toda la humanidad, que si quieren ser cristianos
de verdad, busquen a Cristo, cada uno en sí mismo, porque sin Cristo, nadie es
cristiano. Jesús mismo da las gracias a Dios porque que las cosas espirituales
las esconde a los llamados sabios y entendidos de este mundo y las rebela a la
gente sencilla, gente pobre, que aunque no tenga estudios de seminario,
teológicos, filosóficos, etc. vive la verdadera Paz, Justicia y Bondad, y esto
es Sabiduría de Dios, esto es el Cristo. Pobres del mundo, si vivís estos
sentimientos, sois como nosotros, apóstoles de Cristo y sacerdotes de Dios. Si
los ricos quieren ser cristianos, ya saben lo que les dice Jesús: “No se puede servir a Dios y al dinero”. Nosotros,
como verdaderos apóstoles de Cristo, somos sucesores de los primeros seguidores
de Jesús, y claro está, incluyendo al mismo apóstol Pedro, y aconsejamos a las
jerarquías y sacerdotes de la iglesia rica, que busquen a Cristo, cada uno en
sí mismo, y si no les interesa seguir las sencillas enseñanzas de Jesús, que
declaren públicamente lo que son, y siempre han sido, un partido político que
no tiene nada que ver con Jesús y su iglesia pobre, y mucho menos con Dios. Que
no se burlen más de Dios, ni de nosotros, la iglesia pobre, pero si hay alguna
persona de buena fe, aunque sean sacerdotes, pastores, cardenales, o hasta el
mismo Papa, que quieran ser, de verdad, cristianos, que busquen a Cristo, cada
uno en sí mismo, y si no saben hacerlo, que acudan a alguno de nosotros,
obreros y obreras que formamos la iglesia pobre en Mallorca, en España mismo, y
en otros lugares del mundo. Yo mismo soy un obrero ya jubilado que he trabajado
toda mi vida de yesero; soy uno de los descendientes de los familiares y amigos
de Jesús, y sin ninguna clase de orgullo y vanidad, pero sí con la fuerza del
Espíritu, que es el Cristo que vive en mí mismo, tengo el derecho y el deber de
decir a todas las jerarquías y sacerdotes de la iglesia rica que cuenten
conmigo si no saben como buscar al Cristo, o sea, al Espíritu de Dios, porque
comprendo muy bien que sus riquezas materiales y sus estudios de seminario son
para ellos el gran impedimento, o sea, el velo que les impide ver la Verdad de
Dios. Ánimos amigos, buscad a Cristo, y con nuestra sincera oración a Dios, le
pedimos que lo encontréis. Así sea. Amén.
LA BONDAD ES LA BASE DE LA
IGLESIA POBRE DE CRISTO
Jesús de
Nazareth dice: “El verdadero Maestro y
Pastor es Cristo”, Mateo 23, 8 y Juan 10, 11. Los obreros y obreras que
formamos la iglesia pobre en Mallorca, y en otras partes del mundo, algunos
somos descendientes de los primeros israelitas cristianos que llegaron a
Mallorca poco tiempo después de la muerte de Jesús de Nazareth, o sea, amigos y
apóstoles de Jesús, cuyas enseñanzas han llegado hasta nosotros de forma oral,
de padres a hijos.. Este mensaje o evangelio, y nuestras propias experiencias
nos dan a comprender que la Bondad es la base de la iglesia de Cristo, o sea,
del verdadero cristianismo. La iglesia rica, es decir, el catolicismo, el
protestantismo, etc. se basan en pastores asalariados, o sea, seres humanos con estudios de seminario,
títulos, paga mensual, y se presentan como “maestros y pastores”, y claro está,
que no son el cristianismo de Cristo. Nosotros, la iglesia pobre, Procuramos
siempre, obedecer al verdadero Maestro y seguir al Buen Pastor, que es Cristo,
y no obedecemos, ni seguimos, a ningún ser humano que vive y muere como los
demás, sino que siempre seguimos a Cristo, el cual está presente y resucita en
cada ser humano que lo busca de verdad en sí mismo. Nosotros somos verdaderos
cristianos, no seguimos a ningún “maestro” o “pastor” que se muere, y se tiene
que nombrar a otro. Jesús de Nazareth nos dice: “Aprended de mí”, “Comprended que si un ciego guía a otro ciego ambos
se caen”, “Donde estén dos o tres personas reunidas en el nombre de Cristo, El está
presente”; y se comprende, pues, que estando una familia reunida en su
casa, o simplemente amigos reunidos, son la iglesia de Cristo, que es el
Espíritu de Dios, así pues, reunidos, pensando en Dios, rezando o hablando de
lo espiritual, sobran toda clase de “maestros” o “pastores” asalariados, y si
esta llamada “iglesia” del Vaticano tiene un “pastor” al que le llaman “papa”,
y se presenta como sucesor del apóstol Pedro, allá ellos si así lo entienden en
base a las palabras de Jesús: “Tú eres
Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi iglesia”, pero en los evangelios
también se puede leer que el apóstol Pedro dijo a Jesús: “No consientas que te maten”, y Jesús les respondió a Pedro” Apártate
de mí, Satanás, no comprendes las cosas de Dios”, y habiendo sido detenido
Jesús, Pedro negó a Jesús diciendo: “No
lo conozco”, por lo tanto, está claro que todo cuanto Jesús le decía a
Pedro no era para fundar una nueva iglesia sobre un ser humano. Jesús de
Nazareth se enfrentó a los sacerdotes y al sumo pontífice de la religión judía
porque tenía en sí mismo al Espíritu de Dios, al que llamamos Cristo. Jesús de
Nazareth no vino a este mundo para fundar una nueva religión, ya que su mensaje
está claro y nos dice a todos los seres humanos: “Buscad el reino de Dios”, o sea, a Cristo, cada uno en sí mismo,.
La iglesia rica, empezando por el Vaticano, el protestantismo con tantos grupos
diferentes llamados “iglesias”, la religión judía, todos ellos tienen millones
de seguidores, y si añadimos las demás religiones de este mundo, nos
encontraremos con que, en la práctica, hay muchísimos millones de creyentes,
pero sin Dios. Repetimos, pues, que la Bondad es la base del cristianismo
verdadero, y si una familia, o un grupo de personas reunidas, viven esta
Bondad, son la verdadera iglesia pobre de Cristo. Y si los ricos quieren ser
cristianos, que tengan presente lo que Jesús les dice: “No se puede servir a Dios y al dinero”. Animos amigos, buscad a
Cristo, o sea, a Dios, cada uno en sí mismo, y seréis como nosotros, apóstoles
de Cristo y sacerdotes de Dios. Así sea. Amén.
LA RESURRECCIÓN ÉS ESPIRITUAL
En los
Evangelios podemos leer lo siguiente: “Jesús
dijo a sus apóstoles: “Seré entregado a los sacerdotes y a los escribas, que me
azotarán y me crucificarán, pero al tercer día resucitaré”, Mateo 20, 17; “En la resurrección ni se casarán, ni se
darán en casamiento, sino que serán como ángeles en el cielo”, Mateo 22,
30; “Pero después de resucitado os
precederé a Galilea”, Mateo 26, 32; “Se
abrieron los monumentos, y muchos cuerpos de santos que habían muerto
resucitaron”, Mateo 27 51; “Jesús les
dijo a sus discípulos: “Yo estaré con vosotros hasta la consumación del mundo”,
Mateo 28, 20. Podemos leer más datos sobre la resurrección en Marcos 12, 18-27;
Marcos 14, 26-30, Marcos 16, 1-20. Jesús le dijo al que estaba crucificado a su
lado: “En verdad te digo, hoy estarás
conmigo en el paraíso”, Lucas 23, 43. “Puesto
con ellos a la mesa, tomó el pan, lo bendijo, lo partió y se lo dio; se les
abrieron los ojos y le reconocieron, y desapareció de su presencia”, Lucas
24, 30; “Y mientras los bendecía se
alejaba de ellos, y era llevado al cielo”, Lucas 24, 51; y también se habla
de la resurrección en Lucas 20, 27-40. “Díjole
Jesús: “¡María!”, y ella, volviéndose, le dijo: “¡Maestro!”, y Jesús le dijo:
“Deja ya de tocarme, porque aún no he subido al Padre”, Juan 20, 11-18; “Estaban los apóstoles reunidos con las
puertas cerradas por temor de los judíos, y Jesús se les apareció”, Juan
20, 19-21; “Jesús estaba con unas brasas
encendidas, y les dijo a sus discípulos: “Traed de los peces que habéis cogido
ahora”, Juan 21, 9-10. Los obreros y obreras que formamos la iglesia pobre
comprendemos que la resurrección de Jesús de Nazareth es espiritual, y que el
cuerpo físico nada tiene que ver en esto. No se trata, pues, de ir en contra de
la resurrección, pero sí de entenderla. El apóstol Pablo dice lo siguiente: “Ya no vivo yo, es Cristo que vive en mí”, Gálatas
2, 20; “Donde están dos o tres
congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos”, Mateo 18, 20.
Siendo descendiente de los primeros amigos y seguidores de Jesús de Nazareth
que llegaron a Mallorca poco después de la muerte de Jesús, puedo decir, con
propiedad, que la resurrección de Jesús es espiritual; es un absurdo creer que
un cuerpo físico esté sentado “al lado” de Dios, o que atraviese puertas, o que
desaparezca de la vista de la gente. Jesús mismo lo dice muy claramente: “Somos ángeles, o sea, espíritus”. Si la
iglesia rica, tales como el catolicismo, el protestantismo, etc. lo entiende de
otra manera, allá ellos. Pero si la iglesia rica, sus dirigentes, tienen
derecho a opinar, nosotros mucho más, porque somos el verdadero cristianismo, o
sea, la única y verdadera iglesia de Jesús de Nazareth, el Cristo. No se trata,
pues, de creer o no creer, sino que es cuestión de vivir en y con Cristo en uno
mismo, ya que él es el único y verdadero Maestro y Pastor que nos enseña y nos
guía en la vida y nos dicta estas cosas, y por eso, con propiedad, podemos
decir a toda la humanidad que la verdadera resurrección es espiritual, no
física; y que Cristo, que nos enseña estas cosas, está al alcance de todo ser
humano. Ánimos amigos. Así sea. Amén.
LA VERDADERA HISTORIA DE JESÚS
En muchas ocasiones ya he dicho, que Jesús de Nazareth nació, vivió y murió como los demás seres humanos. El trabajaba para comer, su oficio era de carpintero, conoció a una mujer llamada María Magdalena, o Miriam de Magdalá; se casaron y tuvieron un hijo. Pero lo importante es saber que cuando Jesús de Nazareth empezó a predicar, en Israel estaban, el Sumo Pontífice, el Sanedrín, los sacerdotes rabinos, etc. los cuales formaban la jerarquía y los sacerdotes de su tiempo, pero Jesús, en lugar de predicar de parte de ellos, estuvo en la parte pobre, porque él era pobre, era un trabajador, y desde esta parte pobre, predicaba frente a los sacerdotes y el Sanedrín. Jesús era, pues, un sencillo obrero, un trabajador, y claro está, que para poder predicar después con el ejemplo, no podía ser un personaje rico. Jesús era como nosotros, y cuando se dice que “resucitó”, se trata del espíritu; el cuerpo físico no tiene nada que ver en esto. Jesús mismo lo decía: “Las palabras que yo os hablo son Espíritu, la carne no tiene nada que ver, además, en la resurrección son espíritus, son ángeles”. Se ha ido formando un enorme montaje sobre este personaje tan sencillo, y lo ha hecho la iglesia rica, o sea, el catolicismo, el protestantismo, etc. A Jesús lo han hecho “hijo especial de Dios”, a su madre la han hecho “madre de Dios”, pero todo ese montaje no tiene nada que ver con la figura sencilla del obrero carpintero Jesús de Nazareth, que llevaba en sí mismo a Cristo, al Espíritu de Dios, pues era uno como nosotros, como tú, como yo, como aquél, era un ser humano, y punto. La iglesia rica ha hecho todo ese barullo, ese montaje de que un ser humano sea Dios, pero todo esto sólo ha sido para buscar el poder político y el dinero. Hay que ver cuanta gente hay, católica y protestante, que no se dan cuenta del sencillo y profundo detalle de que cuando Jesús predicaba lo hacía desde el lado suyo, del lado pobre, de los pobres. La religión o iglesia rica siempre lo ha hecho desde el lado de los ricos. Las jerarquías y sacerdotes nunca trabajan, y tienen la comida, la ropa que llevan encima, y la casa, todo lo tienen asegurado, y nunca van al paro y nunca trabajan, y cada mes tienen su salario, y los demás “ya se arreglarán”. Bueno, que hagan lo que quieran, pero que no hablen de Jesús, que no insulten a Jesús, ni a nosotros, su iglesia pobre. Pero repito, la vida de Jesús era sencilla, él trabajaba, era bajito, más bien feo, con la barba y el pelo dejados, estaba un poco encorvado, cojeaba un poco del pie derecho, y punto; murió en la cruz, lo enterraron, y después se ha hecho todo ese montaje de que si no estaba en la tumba, de que si la piedra estaba movida, que si esto o que si lo otro, pero no había nada más que lo dicho. Se dice que “subió al cielo y está sentado al lado de Dios, a la diestra del Padre”, pero esto demuestra claramente la gran ignorancia de los que han escrito estas cosas, o sea, la religión rica, el Vaticano, porque ¿cómo podría estar un cuerpo físico sentado al lado de Dios?, si Dios es el Espíritu Universal que está en todas partes, no tiene lado, y un cuerpo físico no puede estar en el lugar donde está el Espíritu, es decir, en todas partes. Pero Jesús mismo nos lo ha dicho tantas veces: “Las palabras que yo os hablo son verdad y Espíritu la carne no tiene nada que ver en esto”. Pero dejando todo esto, vayamos a la cosa sencilla; Jesús de Nazareth era un ser humano como los demás, pero sí que vivía en y con el Espíritu de Dios, al que llamamos “Cristo”, al que también se le llama “Espíritu Santo, Buda, Mente Universal”, lo que sea, el nombre es lo de menos, pero su espíritu vivió siempre en comunión con Dios, la cual es la verdadera comunión, y esto está al alcance de todos los seres humanos. Cuando Jesús nos dice: “Aprended de mí”, es porque tenía la idea clara, de que nos hablaba de que aprendiéramos de él como ser humano, si hubiera sido Dios encarnado, ¿como podríamos aprender nosotros de él? Pero Jesús no era Dios, sino que él era un espíritu de Dios, como yo, como todos, que estamos unidos al Padre, tal como él mismo lo ha dicho en oración: “Padre, así como tú y yo somos uno, que estos entiendan que todos somos uno”. Repito, Jesús de Nazareth era, sencillamente, un obrero, pero eso sí, llevaba el Espíritu de Dios, al Cristo, pero eso está al alcance de todos los seres humanos, así como de todos los seres que viven, o sea, plantas, animales de todas clases, porque todos tienen vida, como tienen vida los soles, los mundos, etc. ¡Vida! todos tenemos vida, por lo tanto, todos somos Dios en potencia. En cuanto a la parte física, hay hombres, mujeres, blancos, negros, y todas las variedades que se quiera, sin embargo el Espíritu es uno, es Dios mismo, es la vida misma. No nos preocupemos tanto de cómo era Jesús, y de la vida de Jesús. ¡Preocúpate de tu vida, yo de mi vida, de la vida del Cristo que vive en y con nosotros! y el que no tiene al Espíritu, al Cristo, no vive la vida verdadera, vegeta, y a veces, este vegetar es peor que muchos animales, que viven la verdadera vida, porque cuando el ser humano vive al Cristo, no engaña, no roba, no acumula dinero para enriquecerse, no explota a nadie, en una palabra, cumple la ley de Dios. Cuando el ser humano vive al Cristo, no comete robos, ni asesinatos, no quiere el mal para nadie, no odia a nadie, por eso Jesús nos dice: “Los dos principales mandamientos son: “Ama a Dios sobre todas las cosas, y al prójimo como a ti mismo”, y esto es lo importante, tratar de vivir la Paz, la Justicia, la Bondad en uno mismo, y no enredarnos y perder el tiempo con que si Jesús era así, o era asa. Es el Cristo lo que nos interesa; él mismo lo ha dicho: “Buscad primero el reino de Dios, que es Cristo, y hay que buscarlo dentro de un mismo, no dentro de las religiones, y a nadie llaméis Maestro, porque uno es el Maestro: Cristo, el Espíritu, Dios mismo, que es el verdadero Maestro y Pastor que nos enseña y nos guía”. Procurad vivir al Cristo, no tanto perder el tiempo con que si “Dios es redondo o cuadrado”, con que si Jesús era así, o era asa ¡Vive! continuamente el mensaje que dio Jesús, el carpintero: “Ama a tu prójimo, ama a Dios, procura mejorar tu vida cada día, ¡tu verdadera vida como espíritu! no como un animal que acapara como lo hacen miles y miles de seres humanos, que acapararan riquezas materiales a costa de los demás, explotando, armando guerras, pero estos son animales que vegetan, que no viven y si quieres vivir, tienes que tener al Cristo en ti mismo, que es la verdadera vida”. Está bien hablar de Jesús, copiar a Jesús, pero no pierdas el tiempo, en si Jesús era así o asa. Su mensaje es lo que importa. Esto de si se desciende de la casa del rey David es perder el tiempo, o si se desciende de estos o de los otros. Yo mismo, durante toda mi vida he procurado dar siempre el mensaje, pero saber si mis antepasados tenían un negocio o no, o si tenían esto o lo otro, o si eran carpinteros o albañiles, o si a uno le gustaba leer o pintar, no sirve de nada. ¿Tú que haces en la vida? esto es lo importante. ¡Vive la vida, no la ensucies! Y con tu hablar, y sobre todo, con tu modo de obrar, te convertirás en verdadero representante de Dios en la Tierra, no por tus estudios, sino por tu modo de vivir, de ser; por eso es que Jesús nos dice: “Por sus frutos los conoceréis”. Ánimos.
MENSAJE DE UN
POBRE A TODOS LOS POBRES DEL MUNDO
Soy un obrero yesero ya jubilado. Tengo 87 años. Soy descendiente de los
primeros israelitas cristianos que llegaron a Mallorca muy poco tiempo después
de la muerte del obrero carpintero Jesús de Nazareth, los cuales eran
familiares y amigos suyos, eran pues, apóstoles de Jesús. El mensaje de Jesús
ha llegado hasta nosotros, de forma oral, de padres a hijos, y junto a otros
obreros y obreras, descendientes o no, somos la iglesia pobre, y no tenemos
nada que ver con la iglesia rica, tales como el catolicismo, el protestantismo,
etc. Hace 2.000 años, el profeta Juan, llamado “el Bautista”, le preparó el
camino a Jesús de Nazareth. En la actualidad, estando en este tercer milenio,
yo mismo, como un nuevo “Juan”, simbólicamente hablando, tengo el derecho y el
deber de decir a todos los pobres del mundo, que si buscan al espíritu de Dios,
al que llamamos “Cristo”, cada uno en sí mismo, se convertirán en verdaderos
apóstoles y sacerdotes de Dios, sin ninguna necesidad de pertenecer a la
iglesia rica, la cual no tiene nada que ver con Cristo, o sea, con Dios. Y si
en la iglesia rica hay algunos creyentes
que viven al Cristo, no tienen necesidad de ser miembros de una iglesia
o religión, llámese como se llame, la cual no tiene nada que ver con Dios.
Jesús de Nazareth dice: “Donde están dos
o tres personas reunidas en el nombre de Cristo, o sea, el Espíritu de Dios, El
está presente”. Cualquier familia, aunque sean dos o tres personas, o
aunque se junten personas que no sean familiares, forman la verdadera iglesia,
o sea, forman parte de la verdadera religión universal de Dios. Sobran pues, y
no se necesitan para nada, cualquier clase de sacerdotes asalariados con
estudios de seminario, y con ridículos títulos, pues los seres humanos reunidos
en el nombre de Dios, son los verdaderos apóstoles de Cristo y sacerdotes de
Dios, y esto también está al alcance de todo ser humano, aunque esté solo, pero
que con su íntima y sincera oración viva la verdadera comunión con Dios. Pero
Jesús nos dice: “No se puede servir a
Dios y al dinero”, por lo tanto, eso de estar reunidos en nombre de Dios y
formar iglesia, es cosa de los pobres que no ambicionan hacerse ricos, y viven
la Paz, la Justicia y la Bondad, y esto es Sabiduría de Dios. Y si los ricos
quieren ser cristianos de verdad, que abandonen sus riquezas materiales, las
cuales han acumulado a costa del trabajo del prójimo, y después busquen, cada
uno en sí mismo, a Cristo. Se comprende muy bien que de esta manera el mensaje
de Jesús de Nazareth queda muy claro, y nos da a entender que cualquier ser
humano que vive en sí mismo al Cristo, al Espíritu Santo, el nombre que le
demos es lo de menos, si este ser humano vive al Espíritu de Dios, el cual se
puede resumir en una sola palabra: Bondad, ya sea este ser humano, joven o
anciano, hombre o mujer, blanco o negro, creyente o ateo, es un verdadero
representante de Dios en este mundo en el que vivimos, al que llamamos “la
Tierra”, porque si vive la Bondad, vive el infinito Amor de Dios, al que de
forma sencilla lo llamamos Padre Nuestro. Ánimos amigos, procurad tener las
ideas claras, y no os dejéis engañar por nadie. Un fraternal saludo de la
iglesia pobre en Mallorca. Salud y Paz.
RICOS Y POBRES, DOS MUNDOS
DIFERENTES SIN PAZ
En la Biblia
podemos leer lo siguiente: “La Paz os
dejo, mi Paz os doy, no como el mundo la da, os la doy yo”, Juan 14, 27; “Buscad primero el reino de Dios y su
Justicia”, Mateo 6, 33; “A nadie
llaméis maestro, porque solamente hay un Maestro, que es Cristo, y todos
vosotros sois hermanos”, Mateo 23, 8; “El
reino de Dios es de los pobres”, Lucas 6, 20. Jesús de Nazareth, el Cristo,
nos dice todo esto, y nosotros, los obreros y obreras que formamos la iglesia
pobre, lo comprendemos muy bien. Vivir en paz, ricos y pobres en este mundo, es
imposible. Los ricos, o sea, el capitalismo, lo tienen todo, minas de todas
clases, pozos de petróleo, el oro, las tierras, los palacios, las fábricas de
armas de todas clases, y sobre todo, la bomba atómica, y dominan y guían los
partidos políticos, y todas las religiones. Sin embargo, nosotros, los pobres,
no tenemos nada; y gracias si tenemos trabajo, o una casa para vivir. Esta
injusticia social produce continuamente una “paz” armada que no tiene nada que
ver con Dios, ni con esta palabra tan pisoteada: “Civilización”. La solución a
este grave problema es Cristo, si todos los pobres del mundo buscan a Cristo, o
sea, al Espíritu de Dios, cada uno en sí mismo, el nombre que le demos es lo de
menos, lo importante es dejarnos guiar por Dios, que nos da Luz para ver las
cosas claras. Nosotros, la iglesia pobre, aconsejamos a todos los pobres del
mundo, lo que estamos repitiendo continuamente: Apartaos de toda clase de
partidos políticos, no votéis a nadie, si estáis metidos en alguna religión,
daos de baja, y sobre todo, procurad no traer muchos hijos al mundo; no
aumentemos el número de obreros en paro, de gente que pasa hambre, de jóvenes o
niños que son explotados, el número de soldados para las guerras que organizan
los ricos, en una palabra, seamos buenos, pero no tontos. Y si hay pobres a los
que les domina el egoísmo y quieren hacerse ricos, allá ellos. Pero nosotros
nos dirigimos a todos los pobres del mundo, víctimas del capitalismo, político
y religioso, brutal y salvaje, que domina en este mundo al que llamamos
“Tierra”. No perdamos el tiempo en pensar, o discutir la forma que deberían
hacer las cosas los ricos para vivir en “paz”, ricos y pobres en este mundo,
porque Jesús mismo nos dice: “No se puede
servir a Dios y al dinero”. En la práctica, es imposible vivir en “paz”,
ricos y pobres, mientras no exista la verdadera Justicia de Dios. Todos los
pobres del mundo, procuremos no traer muchos hijos, o mejor no traer ninguno.
Así como vemos que los ricos, todos juntos defienden sus intereses, así
también, defendamos los nuestros, todos los pobres del mundo, con el verdadero
Maestro, que es Cristo, el cual nos dicta lo que es la Justicia de Dios, la
verdadera Paz, y la Bondad. Los obreros y obreras que formamos la iglesia
pobre, la del obrero carpintero Jesús de Nazareth, no decimos estas cosas con
odio a nadie, pero sí con Bondad, porque tenemos el derecho y el deber de
hacerlo, como lo tienen todos los pobres del mundo que viven al Cristo en ellos
mismos, ya que somos los verdaderos representantes de Dios en la Tierra, no los
ricos, por muchos estudios o títulos creados por ellos mismos que tengan.
Amigos ricos del mundo, políticos y religiosos, buscad a Cristo, y mientras no
exista la verdadera Paz, la de Cristo, procurad no traer muchos hijos al mundo,
o mejor ninguno. Que Dios Creador y Recreador del infinito Universo, nos
ilumine y nos guíe a todos. Ánimos amigos. Así sea. Amén.
TODOS LOS SERES
HUMANOS SOMOS HIJOS DE DIOS
En la Biblia se puede leer lo siguiente: “Y con todo, oh Yavé, tú eres nuestro Padre” Isaías 64, 8; y Jesús
de Nazareth nos dice: “Así, pues,
oraréis: “Padre nuestro que estás en los cielos…” Mateo 6, 9; “El reino de Dios es de los pobres” Lucas
6, 20. Los obreros y obreras que formamos la iglesia pobre comprendemos lo que
nos dicen Isaías y Jesús de Nazareth, y seguramente que muchas personas de este
mundo estarán de acuerdo con nosotros en que el Creador y Recreador del
infinito Universo, y por lo tanto, Creador de la humanidad, al que llamamos
“Dios”, es nuestro Padre, y como consecuencia, todos somos hermanos, o sea,
hijos de Dios. Pero esta humanidad, además de estar dividida en ricos y pobres,
también está dividida entre hermanos mayores y hermanos menores, y tenemos que
comprender que los seres humanos, vamos creciendo, físicamente hablando, porque
comemos para alimentarnos y mantener nuestra vida, y asimismo, siendo, pues,
todos los seres humanos, cada uno de nosotros, parte universal del Espíritu al
que llamamos “Dios”, tenemos que crecer para llegar a ser hermanos mayores,
pero para eso tenemos que alimentarnos. Cuando Jesús de Nazareth les dice a los
apóstoles: “Comed de este pan, y bebed de
este vino”, es porque habla del cuerpo de Cristo, es para que nos
“alimentemos” espiritualmente, pero esto no es una creencia, ni un rito, ni una
ceremonia, etc. Cuando el Espíritu crece, es porque vive la Paz, La Justicia,
la Bondad, y se convierte en Hermano Mayor. La gran confusión que han sembrado
todas las religiones del mundo, es hacer creer a la gente que el hermano mayor
es el que ha estudiado en el seminario y lleva absurdos títulos diciendo que
son los representantes de Dios. Jesús de Nazareth nos dice: “Dios revela, estas sus cosas, a la gente
sencilla, bondadosa, no a los estudiosos de ninguna clase”; y mucha gente
se queda sorprendida y se siente engañada cuando ve o descubre que hay
jerarquías y sacerdotes de cualquier religión que se portan mal; y esto les
pasa a estos nuestros hermanos, porque en lugar de poner toda su fe y esperanza
en Dios, la han puesto sobre otros seres humanos, hermanos nuestros, pero
menores. Cualquier ser humano, hombre o mujer, blando o negro, cuando vive la
Bondad es porque es un Hermano Mayor. Cualquier ser humano, al dirigirse a sus
padres, para hablar con ellos, no necesita de ninguna otra persona, no necesita
a nadie, y tanto los hijos mayores, como los menores, hablan de forma directa
con su padre y con su madre, sin intermediarios de ninguna clase, y por eso es
que Jesús nos dice que tenemos que rezar de forma directa a Dios, en silencio,
cada uno en sí mismo. La oración, pues, es el verdadero y único lenguaje para
poder hablar con Dios, y se convierte en la verdadera y única comunión con
nuestro Padre Dios. Ya es hora de que los creyentes de la iglesia rica, tales
como el catolicismo, el protestantismo, etc. Comprendan estas cosas. Todos los
seres humanos somos hermanos, y nadie tiene el derecho de presentarse en este
mundo, como “representante de Dios”, de nuestro Padre, ya que los seres humanos
que “representan” de verdad a Dios, son los que viven la Bondad, y lo curioso
es que el que vive la Bondad, no se presenta a los demás como “representante de
Dios”, y es por eso que Jesús nos dice: “Por
sus frutos los conoceréis, comprendiendo muy bien que no se les reconocerá, por
lo tanto, por sus estudios de seminario”. Ánimos amigos, buscad a Dios,
cada uno en sí mismo, ya que El es nuestro Padre, y es el único que nos enseña
y nos guía.
EL CRISTIANO
POBRE ES APÓSTOL DE CRISTO
Jesús de Nazareth dice: “El reino de
Dios es de los pobres” Lucas 6, 20; “A
nadie llaméis maestro, porque uno sólo es vuestro Maestro, el Cristo” Mateo
23, 9-10. Soy un obrero yesero ya jubilado, uno de los pocos descendientes de
los primeros israelitas cristianos que llegaron a Mallorca muy poco tiempo
después de la muerte del obrero carpintero Jesús de Nazareth, cuyas sencillas
enseñanzas han llegado hasta nosotros de forma orla, de padres a hijos; pero lo
más importante es que desde niño, hasta la actualidad, que tengo 86 años de
edad, he procurado tener como Maestro a Cristo, en mí mismo. En nuestro mundo,
llamamos “Cristo” al Espíritu de Dios, aunque otros lo llaman de otra manera,
el nombre es lo de menos. Cristo, o sea, el verdadero Maestro, enseña de forma
directa al espíritu del ser humano, lo que es la verdadera Paz, Justicia,
Sabiduría, Bondad, de Dios, claro está, que no tiene nada que ver con lo que
enseña la jerarquía y sacerdotes de la religión rica, ya que la religión
compuesta por los hombres, llámese como se llame, es religión muerta, nunca
tiene vida al faltarle Cristo. Comprendemos que en todas las religiones hay
personas de buena fe que buscan en ellos mismos a Dios, pero al vivir en y con
Cristo, con Dios, sobran todas las religiones organizadas. La humanidad está
dividida en ricos y pobres; por ejemplo, en las iglesias que se autotitulan
“cristianas”, tales como el catolicismo, el protestantismo, etc. Hay creyentes
ricos y creyentes pobres, y las jerarquías y los sacerdotes están en la parte
rica. Pero este mensaje no es solamente para hacer crítica, sino que es para
dar la idea clara de que todos los obreros y obreras, o sea, los pobres del
mundo, si buscan al Cristo, cada uno en sí mismo, en su propia vida, si viven
la gran Verdad de Dios en sus propias vidas, pueden decir a los demás, con
propiedad, que también busquen a Cristo. Todos los pobres del mundo, si tenemos
a Cristo, somos la iglesia o sinagoga pobre de Jesús de Nazareth y sus amigos.
Y claro está que cuando el cristiano tiene a Cristo, no necesita ninguna clase
de sacerdotes con estudios de seminario, sueldo mensual, etc. Porque cuando se
vive al Cristo, o sea, a Dios en uno mismo, el ser humano vive la verdadera
comunión con Dios, y todo lo demás sobra. Yo mismo, como apóstol de Cristo,
aconsejo a todos los pobres del mundo, que busquen a Cristo, cada uno en sí
mismo, y que se den de baja de toda religión, llámese como se llame, que se
aparten de partidos políticos, del militarismo, etc. Y que procuren no traer
muchos hijos al mundo para no aumentar más el número de pobres, de obreros en
paro, de soldados para las guerras que organizan los ricos. Y si los ricos
quieren ser cristianos, ya lo saben, Jesús dice: “No se puede servir a Dios y al dinero”. Animos amigo, buscad a
Cristo, y formaréis parte de la iglesia pobre, que es el único y verdadero
cristianismo en ele mundo. Ánimos amigos. Así sea. Amén.
AMIGO, SI NO
CAMBIAS TU NO CAMBIA NADA
Jesús de Nazareth, el Cristo, nos dice: “El
reino de Dios es de los pobres”; “A nadie llaméis “maestro”, porque el
verdadero Maestro es Cristo”; “Buscad, pues, el reino de Dios, cada uno en sí
mismo”. Yo soy un obrero yesero ya jubilado, descendiente de los primeros
apóstoles de Jesús que llegaron a Mallorca poco tiempo después de la muerte del
obrero carpintero Jesús de Nazareth, cuyo sencillo mensaje ha llegado hasta mi,
de forma oral, de padres a hijos. Se comprende muy bien que no basta con ser
pobre para tener el reino de Dios, porque sin Cristo, cada uno en sí mismo,
nadie es cristiano. Cristo es Paz, Justicia, Bondad, y estas cosas no son
creencias, son sentimientos que se viven. Cuando vives al Espíritu Santo, o
sea, al Cristo, que es el que nos enseña, y como verdadero Pastor nos guía,
entonces podemos decir, con propiedad: “Si no cambias tú, no cambia nada”.
Jesús de Nazareth nos dice: “Donde están
dos o tres personas reunidas en mi nombre, yo estoy presente”, y entendemos
que se refiere al Cristo, o sea, al Espíritu de Dios; esta es, pues, la
verdadera iglesia de Cristo. Se comprende muy bien que las creencias, dogmas,
ritos, ceremonias, etc. no son el verdadero cristianismo, porque lo importante
es vivir en y con Cristo, con la oración íntima dirigida a Dios; esta es la
verdadera comunión con el Creador del infinito Universo al que llamamos “Dios”.
Podemos decir con propiedad: “Si no cambias tú, no cambia nada”; no se trata,
pues, de pertenecer a tal o cual religión, o partido político, sino que lo
importante es crecer espiritualmente, y esto solamente se consigue si vives la
experiencia del Cristo, o sea, de Dios, en ti mismo, y claro está, que esto
sirve tanto para hombres, como para mujeres de todas las edades y razas del
mundo. Lo importante, pues, es que cambies tú, transformar tu propia vida y ser
cada día más humano, y menos bestia o animal. Durante toda mi vida siempre he
procurado aprovechar el tiempo con la oración y con pensamientos hacia Dios, y
no perder el tiempo en pensar, o decir, que es lo que las religiones o los
partidos políticos tienen que hacer. La humanidad está dividida en ricos y
pobres, y la riqueza material, las armas, el poder político, las religiones,
están en manos de los ricos, pero nosotros, los pobres, tenemos lo más
importante de la vida, que es el Reino de Dios, o sea, el Cristo, o espíritu
Santo, si lo buscamos, cada uno en sí mismo, y este es el gran cambio que todo
ser humano debe hacer si quiere vivir la verdadera vida. Repito: “Si no cambias
tú, no cambia nada”. Yo me siento apóstol de Cristo y sacerdote de Dios, y
puedo decir, con propiedad, a las jerarquías, sacerdotes y creyentes ricos y
pobres: “Si no cambias tú, no cambia nada”, por mucha riqueza material que
tengas acumulada, por muchos estudios teológicos, por muchos títulos que hayas
adoptado, pues todo esto demuestra claramente que el que vive estas cosas, no
tiene al espíritu de Dios en sí mismo. Cuando cada ser humano procure cambiar
hacia el Bien, la Justicia, la Paz, o sea, la Bondad, nuestro mundo será un paraíso.
Hay que repetirlo, amigos: “No esperes que los demás cambien, porque si no
cambias tú, no cambia nada”. A mis 87 años de edad, puedo decir a todos los
pobres del mundo, que para vivir la verdadera vida, busquen al Espíritu de Dios
que nos ha creado, cada uno en sí mismo, y si los ricos quieren hacer lo mismo,
ya lo saben, no se puede servir a Dios y al dinero. Ánimos amigos, y que Dios
nos bendiga y nos guíe a todos. Así sea. Amén.
LO QUE DICE JESÚS DE NAZARETH,
EL OBRERO CARPINTERO
En este
mensaje está lo que dijo Jesús de Nazareth, y que nosotros, como iglesia pobre,
hemos copiado de los cuatro Evangelios del llamado “Nuevo Testamento”. En
Mateo, Jesús dice: “No solo de pan vive
el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios”; “Al Señor, tu
Dios, adorarás, y a El sólo darás culto”; “Bienaventurados los pobres, los que
tienen sed de Justicia, los limpios de corazón, los pacíficos”; “Vosotros sois
la sal de la Tierra, la Luz del mundo”; “Amad a vuestros enemigos”; “Tú, cuando
ores, entra en tu habitación, y cerrada la puerta, ora a tu Padre que está en
lo secreto”; “No juntéis tesoros en la Tierra, atesorad tesoros en el cielo”;
“No podéis servir a Dios y a las riquezas”; “Buscad, pues, el reino y su
Justicia”; “Lo que no quieras para ti, no lo quieras para los demás”; “El hijo
del hombre no tiene donde reclinar su cabeza”; “Gratis lo recibisteis, dadlo
gratis”; “Sed prudentes como serpientes, y sencillos como palomas”; “Los pobres
son evangelizados”; “Gracias Padre, porque ocultaste estas cosas a los “sabios
y entendidos”, y las rebelaste a la gente sencilla”; “Aprended de mi”; “Dios
dice: “Honra a tu padre y a tu madre”; “Donde están dos o tres congregados en
mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos”; “Es mas fácil que un camello entre
por el ojo de una aguja, que entre un rico en el cielo”; “En la resurrección
son como ángeles en el cielo”; “Uno sólo es el Maestro: Cristo”; “Jesús le
dijo: “Vuelve tu espada a su vaina, porque quien a espada mata, a espada
morirá”; “Yo estaré con vosotros siempre, hasta la consumación del mundo”.
En Marcos
podemos leer: “Y de los que oyen la
palabra, algunos se quedan fascinados por las riquezas y las demás codicias”;
“Jesús dice al rico: “Una cosa te falta, devuelve las riquezas que has
acumulado, toma tu cruz, y sígueme”; “Ama a Dios sobre todas las cosas, y al
prójimo como a ti mismo”.
En Lucas Jesús
dice: “Bienaventurados los pobres, porque
vuestro es el reino de Dios”. “Hay de vosotros ricos, porque habéis recibido
vuestro consuelo”; “El hombre bueno, del buen tesoro de su corazón saca cosas
buenas”; “Hay de vosotros, fariseos, que descuidáis la Justicia y el Amor de
Dios”; “El que se ensalza será humillado, y el que se humilla será ensalzado”;
“Así pues, cualquiera de vosotros que no renuncie a todos sus bienes, no puede
ser mi discípulo”; “El reino de Dios está dentro de vosotros”.
En Juan dice: “Yo soy el buen Pastor, y el buen Pastor da
su vida por las ovejas, más el asalariado, cuando hay peligro, huye”; “El que
me ama a mi, será amado de mi Padre”; “Ya no os llamo siervos, sino amigos”;
“Para que el Amor con que tú me has amado, esté entre ellos, y yo en ellos”.
Nosotros, como iglesia pobre, aconsejamos a
toda la humanidad, que si quieren ser cristianos de Cristo, empiecen por leer
el Nuevo Testamento, y que cada uno busque en sí mismo al Espíritu de Dios al
que llamamos “Cristo”. La humanidad está dividida en ricos y pobres, y las
jerarquías y sacerdotes de la iglesia rica forman parte del capitalismo que
domina el mundo; nos referimos, claro está, al catolicismo, al protestantismo,
etc. y a sus creyentes ricos. Aconsejamos, pues, a todos los pobres del mundo,
que busquen a Cristo, cada uno en sí mismo. No se trata de seguir a ningún ser
humano, por muchos títulos que tenga. Y si las jerarquías y sacerdotes de la
iglesia rica quieren ser cristianos, ya lo saben, tienen que desprenderse de
sus riquezas materiales y buscar a Cristo; muy claro lo dice Cristo: “No se puede servir a Dios y al dinero”. Animos
amigos, buscad a Cristo, si queréis ser cristianos. Así sea. Amén.
JESÚS DE NAZARETH Y SUS
PARÁBOLAS
En
el evangelio podemos leer lo siguiente: “Había
un hombre rico que vestía de púrpura y lino y celebraba cada día espléndidos
banquetes. Un pobre, de nombre Lázaro, estaba echado en su portal, cubierto de
úlceras, y deseaba hartarse de lo que caía de la mesa del rico, y hasta los
perros iban a lamerle las úlceras. Sucedió, pues, que murió el pobre y fue
llevado por los ángeles al seno de Abraham; y murió también el rico, y fue
sepultado. En el infierno, en medio de los tormentos, levantó sus ojos y vió a
Abraham desde lejos y a Lázaro en su seno, y gritando dijo: “Padre Abraham, ten
piedad de mí y envía a Lázaro para que, con la punta del dedo mojada en agua,
refresque mi lengua, porque estoy atormentado en estas llamas”, y Abraham le
dijo: “Hijo, acuérdate de que ya recibiste tus bienes en vida y Lázaro recibió
males, y ahora él es aquí consolado, y tú eres atormentado. Además, que entre
nosotros y vosotros hay un gran abismo, de manera que los que quieran atravesar
de aquí a vosotros, no pueden, ni tampoco pasar de allí a nosotros”, y el rico
le contestó: “Te ruego, Padre, que siquiera le envíes a casa de mi padre,
porque tengo cinco hermanos, para que les advierta, a fin de que no vengan
también ellos a este lugar de tormento”, y dijo Abraham: “Tienen a Moisés y a
los profetas, que los escuchen”, y el rico respondió: “No, Padre Abraham, pero
si alguno de los muertos fuese a ellos, harían penitencia”, y Abraham le dijo:
“Si no oyen a Moisés y los profetas, tampoco se dejarán persuadir si un muerto
resucita” Lucas 16, 19-31.
Esta es una de
las parábolas del obrero carpintero Jesús de Nazareth, y el diccionario nos
dice acerca de la palabra “parábola”: “Narración
alegórica que encierra una enseñanza moral”. Nosotros, los obreros y
obreras que formamos la iglesia pobre, comprendemos muy bien que es necesario
que los obreros y obreras, o sea, los pobres del mundo no traigan tantos hijos,
no aumentemos más el número de obreros en paro, de mano de obra barata, de
soldados para las guerras que organizan los ricos, en una palabra, que no
esperemos más las migajas o limosnas de los ricos, pidamos Justicia, y si cada
día nacen menos pobres en el mundo, los pobres empezaremos a vivir un poco el
cielo en esta tierra, y los ricos, también empezarán a vivir el infierno que
les espera. Seamos buenos, pero no tontos; aconsejemos a todos los pobres del
mundo que busquen a Cristo, cada uno en sí mismo. La verdadera revolución
contra los ricos no se hace con armas o “derribándoles la mesa” de la que habla
la parábola, se trata de tener Sabiduría de Dios y su Justicia, la cual nos
dice claramente que no nazcan tantos hijos pobres, y si es necesario, que se
acuda al aborto. Si los ricos se encuentran con que cada día nacen menos pobres
en el mundo, por necesidad y por su propio egoísmo nos pedirán que nos sentemos
a “la mesa donde comen todos los ricos”, y se acabará eso de dar las migajas a
los pobres. Ámigos pobres del mundo, busquemos a Cristo, o sea, al Espíritu de
Dios, y tendremos la Justicia verdadera en este mundo. Así sea. Amén. (Abril 2005).
LA IGLESIA POBRE ES EL
CRISTIANISMO DE CRISTO
Alguno de
nosotros somos descendientes de los primeros israelitas cristianos que llegaron
a Mallorca poco tiempo después de la muerte de nuestro rabí, el obrero
carpintero Jesús de Nazareth, el Cristo, cuyas sencillas enseñanzas han llegado
hasta nosotros de forma oral de padres a hijos, y con nuestras propias
experiencias espirituales, junto con otros obreros y obreras, descendientes o
no, hemos restaurado la iglesia primitiva, la iglesia pobre, que nos fue
arrebatada hace siglos por gente rica con poder político, después de perseguir
y matar muchos cristianos. Esta gente rica creó el Vaticano, con su jerarquía,
papa, cardenales, etc. más tarde, de este llamado “catolicismo”, salió el
protestantismo de Martín Lutero, y claro está, que tanto uno como otro, no son
el cristianismo de Cristo, porque estas organizaciones están compuestas de
ricos y pobres, o sea, explotados y explotadores, unos creyentes que se hacen
ricos a costa de otros creyentes, y a veces, a costa de sus vidas en las
guerras de los ricos, y de esta forma, todos se burlan de Dios y del prójimo,
pues Dios dice: “Ama a tu prójimo como a
ti mismo”. Jesús de Nazareth dice: “El
reino de Dios es de los pobres”; “No se puede servir a Dios y al dinero”; “Es
más fácil pasar un camello por el ojo de una aguja, que entrar un rico en el
cielo”; “Aprended de mi”, y él era un obrero, trabajaba de carpintero, no
era un rico, ni un sacerdote a sueldo, no era un conde, ni un marqués, ni un
rey, etc. era un obrero que trabajaba para comer y predicaba el evangelio de
Cristo, que es muy sencillo, es vivir en y con Dios, o sea, el Amor de Dios
personificado en el ser humano. Sobran pues, todas las religiones, en
particular las que se autotitulan cristianas, como son el catolicismo, el
protestantismo, etc. El cristianismo es vida, y la vida se vive, no es una
creencia o asunto para discutir. Sobran pues, las jerarquías, los sacerdotes a
sueldo, los estudios de seminarios, etc. Sobran pues, los templos, catedrales,
monasterios, locales de reunión, etc. ya que es suficiente la casa donde se
vive, ya que donde están dos personas reunidas en el nombre de Cristo, allí
está Cristo presente, si se vive en y con Cristo, con Dios. Queda pues muy
claro que nadie es cristiano sin Cristo en su propia vida. Todos los pobres del
mundo, o sea, los obreros y obreras, si buscan a Cristo, cada uno en si mismo,
en su propia vida, se convierte en un verdadero apóstol de Cristo y sacerdote
de Dios. Este es el único y verdadero cristianismo de Cristo, esto es la
iglesia pobre. Animos amigos, buscad a Cristo. Así sea. Amén. Y si los ricos
quieren ser cristianos, que abandonen sus riquezas materiales, tal como Cristo
dice: “No se puede servir a Dios y al
dinero”. (Mayo 2005).
SOLO LOS POBRES PUEDEN SER
SUCESORES DE LOS APÓSTOLES
En el Nuevo
Testamento de la Biblia, se puede leer lo siguiente: “Jesús dijo a sus apóstoles: “Recibid el Espíritu Santo; a quien
perdonáreis los pecados, les serán perdonados, y a quien se los retuviereis,
les serán retenidos”, Juan 20, 22-23; “Yo
te digo a ti que tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi iglesia”
Mateo 16, 18; “Vosotros, como piedras
vivas, sois edificados en casa espiritual y sacerdocio santo” I Pedro, 1,
4; “El reino de Dios es de los pobres”
Lucas 6, 20; “Caminando, pues, junto al
mar de Galilea, vio a dos hermanos, Simón, que se llama Pedro, y Andrés, su
hermano, los cuales echaban la red en el mar, pues eran pescadores, y les dijo:
“Venid en pos de mí, y os haré pescadores de hombres”. Ellos dejaron al
instante las redes, y le siguieron. Pasando más adelante vió a otros dos
hermanos, Santiago, el de Zebedeo, y Juan,. Su hermano, que en la barca, con su
padre Zebedeo, componían las redes, y los llamó, y ellos, dejando luego la
barca, y a su padre, le siguieron” Mateo 4, 18-22; “Jesús se apareció en el Mar de Tiberiades, y estaban juntos, Simón
Pedro, Tomas, y cinco discípulos más, que iban a pescar” Juan 21, 1-3.
Soy un obrero
yesero, ya jubilado, descendiente de los primeros israelitas amigos y apóstoles
de Jesús que llegaron a Mallorca poco tiempo después de la muerte del obrero
carpintero Jesús, el Cristo, cuyo sencillo mensaje ha llegado hasta nosotros de
forma oral, de padres a hijos, y junto a otros obreros y obreras, descendientes
o no, somos la iglesia pobre de Jesús de Nazareth. Somos, pues, los verdaderos
sucesores de los apóstoles, y claro está, incluyendo a Simón Pedro. Jesús de
Nazareth nos dice que el verdadero Maestro y Pastor es Cristo. Y hay que
buscarlo cada uno en sí mismo, en su propia vida. Cristo es Paz, Justicia,
Bondad, esto es Sabiduría de Dios, y estas cosas no son creencias, ni dogmas,
son sentimientos que se viven, y así, con propiedad, se puede decir a los demás
seres humanos que hagan lo mismo, que busquen a Cristo. La iglesia rica, tales
como el catolicismo, el protestantismo, etc. no son y nunca han sido la
sencilla iglesia pobre de Jesús de Nazareth. Los verdaderos apóstoles de Jesús,
en los tiempos en los que Jesús vivía en este mundo, y ahora en la actualidad,
no necesitaron, ni necesitamos estudios de seminario, títulos ostentosos, paga
mensual, etc. Los apóstoles de ayer y de hoy predicamos lo mismo, o sea, que si
los seres humanos quieren ser cristianos de verdad, tienen que buscar a Cristo,
cada uno en sí mismo. No estamos en contra de la iglesia rica, pero tenemos el
derecho y el deber de decir a las jerarquías, sacerdotes y creyentes, que si
quieren ser cristianos, y ser, de verdad, apóstoles de Cristo, que tengan
presente lo que les dice Jesús: “No se
puede servir a Dios y al dinero”. La humanidad no necesita católicos del
papa, ni protestantes de Lucero, lo que necesitan todos los seres humanos son
cristianos de Cristo, y repetimos, que ser cristiano es vivir la Paz, Justicia
y Bondad de Dios, y esto es lo que necesitamos en este mundo, no tantas
religiones dirigidas por seres humanos egoístas que con sus predicaciones
confunden y dividen a la humanidad y están haciendo un gran mal, en lugar de
predicar la Bondad con su propia vida, Ánimos, dirigentes de la iglesia rica,
del Vaticano católico, y de los “vaticanos” protestantes, buscad a Cristo,
amigos; este es el gran mensaje que os damos, como iglesia pobre, el verdadero
cristianismo de Cristo, la verdadera religión de Dios, que es, sencillamente,
vivir la Bondad. Ánimos amigos, buscad a Cristo. Así sea. Amén.
JESÚS DE
NAZARETH Y SUS APÓSTOLES ERAN POBRES
Soy un obrero yesero ya jubilado, uno más de la iglesia pobre. El mensaje
de Jesús de Nazareth ha llegado hasta nosotros, en Mallorca, de forma oral, de
padres a hijos. Los obreros y obreras que formamos la iglesia pobre,
descendientes o no de amigos y familiares de Jesús, al vivir el Cristo, cada
uno en sí mismo, éste nos enseña y nos guía. No necesitamos, pues, sacerdotes
asalariados, de ninguna clase. Con la experiencia propia, y con lo que leemos
en el llamado “Nuevo Testamento”, que encaja con lo que nos dicta el Cristo,
vemos que es la Verdad Universal. Jesús de Nazareth dice: “No se puede servir a Dios y al dinero”; “Es más fácil pasar un camello
por el ojo de una aguja, que entrar un rico en el cielo”; “Las aves del cielo
tienen nidos, pero el hijo del hombre no tiene donde recostar su cabeza”; “No
os hagáis tesoros en la Tierra”. Jesús dice al joven rico, a los ricos: “Si quieres seguirme, devuelve las riquezas
acumuladas”; y Jesús nos dice a todos: “Aprended
de mí”. En Israel, la gente conocía a Jesús por “el carpintero que predica”. Jesús escogió a gente obrera, gente pobre,
para ser sus apóstoles. La mayoría tenían el oficio de pescador. Esto es el
verdadero cristianismo, que a través de los siglos han vivido, y vivimos,
algunos pobres, que siempre han buscado a Cristo, cada uno en sí mismo. La
iglesia rica, tales como el catolicismo, el protestantismo, etc. nunca han sido, ni son, la iglesia pobre de
Jesús de Nazareth, porque esta iglesia pobre de Jesús de Nazareth, la formamos
obreros y obreras, en Mallorca, en España, en otros lugares del mundo, aunque
no todos nos conocemos, porque seguramente que hay gente pobre que vive al
Cristo sin saber nada de nosotros, pero estamos seguros de que en la iglesia
pobre de Jesús de Nazareth, en cualquier lugar del mundo, no hay papas,
cardenales, obispos, sacerdotes, etc. no hay reyes, ni príncipes, no hay
condes, marqueses, duques, etc. no hay
comerciantes, industriales, empresarios, banqueros, etc. pero si alguno de
estos, quiere hacerse cristiano de verdad, seguro que se apartará de sus riquezas
materiales. Repetimos lo que nos dice Jesús de Nazareth: “Ningún ser humano puede ser cristiano, si trata de servir a Dios y al
dinero”. Tanto Jesús, como nosotros, no estamos contra los ricos, pero
comprendemos que trabajando, nadie se hace rico, el que se hace rico es a costa
del trabajo de los demás, y esto es explotación. El trabajo produce riqueza,
pero esta riqueza se la quedan unos cuantos y se hacen ricos, y por eso tenemos
a esta humanidad dividida en ricos y pobres, y esto es una gran burla que los
ricos hacen a Dios y a los pobres. Yo mismo, de forma particular, y con
propiedad porque vivo al Cristo, puedo aconsejar a la igle4sia rica que si de
verdad quieren ser cristianos, que busquen a Cristo, cada uno en sí mismo, pero
si no les interesa y quieren seguir siendo un partido político, están en su
derecho, pero que no se burlen más de nuestro amigo el obrero carpintero Jesús
de Nazareth, y su iglesia pobre, que en la actualidad somos nosotros. Aconsejo
también, a todos los pobres del mundo, que tengan presente que Jesús de Nazareth
nos dice: “El reino de Dios es de los
pobres”; por lo tanto, pobres del mundo, procurad tener las ideas claras,
apartad de vuestra mente toda clase de egoísmo, procurad no traer muchos hijos
al mundo, mientras no exista le verdadera Justicia en este mundo, no aumentemos
más el número de obreros en paro, de gente que pasa hambre, de soldados para
las guerras que organizan los ricos, seamos buenos, pero no tontos. No se trata
de odiar a los ricos, pero es cuestión de que todos los pobres del mundo comprendan
que todos los que vivimos al Cristo, somos los verdaderos apóstoles, somos la
iglesia de Cristo, o sea, la iglesia pobrete Jesús de Nazareth. Animos amigos,
que todo ser humano pobre que vive al Cristo, puede aconsejar a toda la
humanidad, y sobre todo a los ricos, que busquen a Cristo, si quieren ser
cristianos. Así sea. Amén.
LOS RICOS Y LA IGLESIA POBRE DE
JESÚS DE NAZARETH
Algunos de los
obreros y obreras que formamos la iglesia pobre en Mallorca somos descendientes
de los apóstoles y familiares de Jesús que llegaron a Mallorca poco tiempo
después de la muerte del obrero carpintero Jesús de Nazareth. Su sencillo
homenaje ha llegado hasta nosotros de forma oral de padres a hijos. Esta
tradición y la experiencia propia de cada uno de nosotros con el espíritu de
Dios, que llamamos Cristo, en la práctica también nos hace apóstoles y sin
necesidad de estudios de seminario y somos en la actualidad el verdadero
cristianismo que siempre ha existido desde Jesús de Nazareth, somos pues su
iglesia pobre. La iglesia rica, catolicismo, catolicismo, protestantismo, etc.
nunca han sido, ni tampoco son la iglesia pobre de Jesús de Nazareth. La
iglesia rica forma parte del capitalismo, que domina el mundo, como también
todos los partidos políticos, tanto de izquierda, como de derechas, etc. Al no
vivir el Espíritu de Dios que llamamos Cristo han hecho posible que la
humanidad esté dividida en ricos y pobres.
El espíritu de Dios que los cristianos llamamos Cristo nos inspira la
verdadera la verdadera Paz, Justicia, Bondad. , esto está al alcance de todos
los seres humanos. Nosotros los obreros y obreras que formamos la iglesia
pobre, al vivir el Cristo que es el verdadero Maestro y Pastor, nos enseña y
nos guía y con propiedad podemos decir a toda la humanidad que hagan lo mismo y
sobre todo a los pobres. Buscad a Cristo, cada uno en si mismo. Si queréis ser
cristianos de verdad, y si los ricos quieren ser cristianos de Cristo, que
hagan lo mismo y que todos tengamos siempre presente lo que dijo Jesús de
Nazareth: “No se puede servir a Dios y al
dinero”. Mientras exista el egoísmo y domine a estos seres humanos
dirigentes de partidos políticos y de religiones, nunca podremos vivir en Paz y
en armonía en este mundo, por faltar la verdadera justicia. La verdadera vida
de todo ser humano es vivir la justicia, la paz, la bondad y claro está que al
vivir estas cosas que son sentimientos, que es Cristo, nadie procura hacerse
rico, porque trabajando nadie puede acaparar riquezas materiales, pero si
explotando al prójimo. El trabajo produce riqueza, esta se la quedan nos
cuantos, pisoteando, burlándose de lo que dice Dios: “Ama a tu prójimo como a ti mismo”, no dice explótalo para hacerse
rico. Pobres del mundo, tratad de comprended lo que os dice este obrero yesero
ya jubilado, en este mensaje: “Sed buenos pero no tontos, no os dejéis engañar,
por ningún partido político o religioso. En este mundo siempre está presente
gran engaño de la llamada democracia, pero siempre mandan los mismos, los
ricos, religiosos o laicos, yo os aconsejo siempre: procurad no traer muchos
hijos al mundo, no aumentemos más el número de obreros en paro, de pobres que
pasan hambre, o de soldados para las guerras que organizan los ricos. La
solución está en Cristo, buscadlo amigos, cada uno en si mismo, procuremos
todos tener ideas propias y no nos dejemos engañar por nadie. Cuando vives al
Cristo que es la verdadera comunión con Dios, no necesitas partidos políticos,
ni pertenecer a ninguna religión organizada por los hombres. Esto es la
sencilla iglesia pobre, la de Jesús de Nazareth, que vivimos y decimos unos
cuantos obreros y obreras en Mallorca, en algunos lugares de España y también
en todo el mundo. No tratamos de hacer socios, pero si de ayudar a todos los
seres humanos y en particular a todos los pobres del mundo. Buscada a Dios cada
uno en si mismo, procurad vivir la Bondad, aunque seáis ateos, que también
podéis leer este mensaje. Ánimos amigos, un fraternal saludo de la iglesia
pobre de Jesús de Nazareth en Mallorca.
PARTIDOS
POLÍTICOS, RELIGIONES Y DIOS
Para los que no me conocen, les diré que soy un obrero yesero ya jubilado,
mallorquín. Las sencillas enseñanzas o mensajes de Jesús de Nazareth, han
llegado hasta mí de forma oral, de padres a hijos, porque mi familia, y unas
pocas más, somos descendientes de los apóstoles de Jesús que llegaron a
Mallorca poco tiempo después de la muerte del obrero carpintero Jesús de
Nazareth. La iglesia rica, tales como el catolicismo, el protestantismo, etc.
dicen que se basan en las enseñanzas de Jesús, pero no es así, porque estas
organizaciones religiosas siempre han ido a lo mismo, al poder político, y al
dinero. La humanidad está dividida en ricos y pobres, y las jerarquías,
sacerdotes y creyentes ricos forman un grupo, y los creyentes pobres forman otro,
y a esto lo llaman “iglesia cristiana”, pero esto es burlarse de Dios y de los
pobres. Dios es el Creador y Recreador del infinito Universo, y el Universo es
infinito porque Dios, que es Espíritu, nunca empezó, por lo tanto, nunca
terminará. Los científicos, como por ejemplo Albert Einstein, los astrónomos,
como por ejemplo Stephen Hawkins, están de acuerdo conmigo, y con todos los
seres humanos que piensan, y comprenden esta cosa infinita, a la que llamamos
“Dios”. Einstein nos habla de los átomos, electrones, etc. y Hawkins reconoce
que el Universo es infinito. Cuando yo digo que la humanidad está dividida en
ricos y pobres, no solamente me refiero a esta gran injusticia social, sino que
veo de forma muy clara que todo esto es producto de la ignorancia. El
capitalismo brutal y salvaje que esclaviza a los pobres, domina este mundo
desde hace muchos siglos, y para disfrazar un poco esta maldad organizada, han
creado los partidos políticos, que siempre les defienden sus intereses, con
etiquetas diferentes, empleando este montaje teatral de las elecciones, votando
a unos o a otros, pero quien siempre manda es el capitalismo, y todas las
religiones bendicen esta injusticia, y la disfrazan con las enseñanzas que van
impartiendo a toda la humanidad, sobre todo a los pobres. El llamado
“cristianismo”, tal como el catolicismo, el protestantismo, etc. de un hombre
pobre, Jesús de Nazareth, el carpintero, han hecho “Dios”, y a su madre, María,
la han hecho la “madre de Dios”, burlándose así de Dios, y sobre todo, de los
pobres. El mensaje de Jesús es sencillo: “Buscar a Cristo”, o sea, a Dios, cada
uno en sí mismo, en su propia vida, y cuando vives en y con Cristo, te das
cuenta de que esto no son creencias, dogmas, ritos, ceremonias, etc. son
sentimientos que vives, que son la Sabiduría de Dios manifestada en la
Justicia, la Paz, la Bondad; esto es Dios, Creador y Recreador del infinito
Universo. Podemos decir, con propiedad, que esta es la verdadera religión
universal, que no necesita sacerdotes asalariados y con estudios de seminario,
con títulos, etc. Igualmente puedo decir, con propiedad, que el verdadero
Maestro es el Espíritu de Dios, al que llamamos “Cristo”. El cual me enseña, y
como Buen Pastor, me guía a través de la vida, y todo esto está al alcance de
todos los seres humanos de este mundo, y del infinito Universo. Jesús de
Nazareth nació, vivió y murió como los demás seres humanos, era pues, un hijo
de Dios, pero todos los seres vivientes en cualquier mundo del infinito
Universo, todos, somos hijos de Dios. Es hora ya de que se comprenda que todas
las religiones de este mundo han hecho mucho daño, pero todo ha sido por
ignorancia, y a estos dirigentes religiosos y a los creyentes, les digo desde
Mallorca: “Buscad al Cristo, al Espíritu de Dios, aunque le deis nombres
diferentes, pero buscadlo cada uno en sí mismo, y viviréis la verdadera vida,
sin ensuciarla, como verdaderos seres humanos. No se trata, pues, de perder el
tiempo discutiendo tonterías de ritos, ceremonias, creencias, ideas de partidos
políticos; etc. se trata de cambiar de vida, porque si no cambias tú, no cambia
nada”. Ánimos amigos, buscad al Espíritu de Dios, cada uno en sí mismo. Así
sea. Amén.
SOMOS LA
IGLESIA POBRE DE JESÚS DE NAZARETH
En el Evangelio podemos leer lo siguiente: “Vosotros sois mis amigos, si hacéis lo que os digo”, Juan 15, 14; “Los discípulos bajaron a tierra, vieron a
Jesús con unas brasas encendidas y un pez puesto sobre ellas”, Juan 21, 9.
Los obreros y obreras que formamos la iglesia pobre de Jesús de Nazareth, somos
el verdadero cristianismo en el mundo. Aquí en Mallorca, y en otros lugares del
mundo, algunos somos descendientes de los primeros apóstoles de Jesús que
llegaron a Mallorca poco tiempo después de la muerte de nuestro amigo, el
obrero carpintero Jesús de Nazareth, cuyo sencillo mensaje ha llegado hasta
nosotros de forma oral, de padres a hijos. Esta tradición y la experiencia
propia del Espíritu de Dios al que llamamos “el Cristo”, nos hacen verdaderos
apóstoles, hombre y mujeres. La iglesia de Jesús en la actualidad y siempre, la
han formado y la forman, obreros y obreras, o sea, gente pobre. No estamos en
contra de nadie, pero tenemos el derecho y el deber de decir a la iglesia rica,
tales como el catolicismo, el protestantismo, etc. que no son la iglesia de
Jesús. Nuestro amigo, Jesús de Nazareth, nos dice: “No se puede servir a Dios y al dinero”. Aconsejamos a las
jerarquías, sacerdotes, y creyentes ricos y también a los creyentes pobres de
estas iglesias ricas, que si quieren ser cristianos de verdad, busquen a
Cristo, cada uno en sí mismo, porque sin Cristo, nadie es cristiano, por muchos
estudios de seminario, teológicos, títulos, etc. que se tengan. En estos
versículos que citamos, vemos que Jesús llama “amigos” a los apóstoles, y
después de la supuesta resurrección, vemos a los apóstoles que siguen
trabajando. Teniendo presente lo que está escrito, y nuestra propia experiencia
del Espíritu al que llamamos “Cristo”, nosotros tenemos el derecho y el deber
de decir a los dirigentes y dirigidos de la iglesia rica, que mientras no vivan
al Cristo, no tienen ningún derecho de presentarse al mundo como sucesores de
los apóstoles, Pedro incluido, y que tengan presente que Pedro no era dirigente
de nadie. Los obreros y obreras que formamos la iglesia pobre, en Mallorca y en
otros lugares del mundo, como yo mismo, en particular, tenemos, tengo el
derecho y el deber de decir a las jerarquías y creyentes de la iglesia rica,
que sin ninguna clase de vanidad, ni egoísmos, soy apóstol de Cristo, sucesor
de los apóstoles, Pedro incluido. Si al papa católico, cardenales, obispos,
sacerdotes y creyentes, a todos los cuales considero amigos, les interesa
conocer de cerca de un descendiente y sucesor de los apóstoles, estoy a su
disposición, pero que vengan a mi casa, porque con mis 87 años de edad, mi
falta de vista, artrosis y reuma que padezco, y más cosas, no puedo trasladarme
a ningún lugar. Si el papa católico no se atreve, o no puede venir a mi casa,
puede hacerlo el obispo católico de Mallorca. Repito, amigos, no estoy en
contra de nadie, es más, desde Palma de Mallorca os envío mi bendición, como
apóstol de Cristo que soy. Pero esto, amigos, también puede decirlo cualquier
ser humano pobre, hombre o mujer, blanco o negro, joven o de mucha edad;
respito, pueden decir lo mismo, si viven al Cristo. Y vosotros, papa católico,
jerarquías, sacerdotes, creyente, tanto católicos, como protestantes, podréis
decir con propiedad lo que os digo, cuando verdaderamente tengáis cada uno en
su propia vida, en vuestra mente y corazón, al Espíritu de Dios, al que
llamamos “Cristo”. Ánimos amigos, que aunque os parezca mentira, Cristo, o sea,
Dios Universal, existe de verdad; el infinito Universo lo declara, y también la
Bondad de mi corazón, y la de tantos otros en el mundo. Ánimos amigos. Así sea.
Amén.
VIVIR LA BONDAD ES SER APÓSTOL
DE CRISTO
Jesús de Nazareth dice: "El reino de Dios es de nosotros, los pobres" Lucas 6,20.
Los obreros y obreras que formamos la iglesia pobre en Mallorca, comprendemos
que no basta solamente con ser pobre, sino que hay que buscar a Cristo, cada
uno en sí mismo, en su propia vida. La humanidad está dividida en ricos y
pobres, los ricos tienen toda la riqueza material: oro, pozos de petróleo,
minas, fábricas de armas de todas clases, poder político de los gobiernos,
religiones, etc. y los pobres no tenemos nada de estas cosas, y gracias si
tenemos una casa y un poco de trabajo, por lo tanto, el capitalismo que domina
al mundo produce este desnivel social, la explotación, el hambre, las guerras,
etc. y nosotros, los pobres, sufrimos las consecuencias del egoísmo brutal de
los ricos, que no solamente se han apoderado de las cosas materiales, sino que
además siempre han tratado de apoderarse de lo espiritual, de Dios, de las
ideas que podamos tener del Espíritu, y han fundado religiones que nada tienen
que ver con la Justicia, la verdadera Paz, la Bondad, sentimientos que sí que
vivimos mucha gente pobre en el mundo. Todos los pobres del mundo tenemos que
procurar tener las ideas claras; cualquier ser humano que viva la Paz, la
Justicia, la Bondad, es un verdadero representante de Dios en este mundo, y
claro está, que para vivir estos sentimientos, no se necesitan estudios de
seminario, títulos ridículos, paga mensual, etc. Todos los pobres del mundo
tenemos que tener las ideas claras, tenemos que tomar conciencia de que somos
los únicos en el mundo que producimos, los ricos sólo consumen, y si hay pobres
que se lanzan a la estafa, al robo, etc. es porque el capitalismo alimenta el
egoísmo. No se trata de odiar a los ricos, pero si ellos miran siempre por sus
propios intereses, por su bienestar, los pobres tenemos que tener siempre la
idea clara de que si en lugar de traer muchos hijos al mundo, traemos pocos o
ninguno, todos los problemas que padecemos los pobres quedarán solucionados,
resueltos, porque el día en el que nos encontremos en nuestro mundo con que hay
más trabajo que obreros, los ricos cerrarán las fábricas de armas, cortarán el
suministro de toda clase de droga, dejarán de hacer guerras, etc. porque los
ricos no podrían vivir sin los pobres, y tendrían que ponerse a sembrar y
pescar lo que se comen, ya que los ricos viven en palacios, llevan buenos
vestidos, tienen las grandes reservas de oro, etc. y todo esto, es gracias al
trabajo de los pobres. Pero este mensaje es para dar la idea clara de que todos
los seres humanos que viven la Justicia, la Paz, la Bondad, etc. somos los
verdaderos apóstoles y sacerdotes de Dios, y con propiedad, podemos decir a los
demás que hagan lo mismo. Este es el verdadero y único evangelio o buena nueva
que trajo al mundo el obrero carpintero Jesús de Nazareth. El dijo: "Aprended de mí", y Jesús no
era un sacerdote a sueldo, no cobraba para predicar, no puso negocios de
ninguna clase, no era un hombre rico, era un obrero que trabajaba para comer, y
vivía la Paz, la Justicia, la Bondad, o sea, los sentimientos que nos acercan a
Dios, y nos hacen más personas, y menos animales. Pobres del mundo, buscad a
Cristo, cada uno en sí mismo, en su propia vida, y si los ricos quieren hacer
lo mismo, ya lo saben, “No se puede
servir a Dios y al dinero”. Ánimos amigos. (Agosto).
SER CRISTIANO
DE CRISTO ES EL SEÑORIO DE LOS POBRES
La humanidad está dividida en ricos y pobres. En la parte rica están los
llamados “títulos de nobleza, de señorío”, etc. tales como “reyes, príncipes,
condes marqueses, duques”, etc. los de “generales del ejército, coroneles,
capitanes”, etc. así como “papas, cardenales, obispos, sacerdotes, pastores”,
etc. y también “capitalistas, banqueros, comerciantes, industriales,
empresarios”, etc. y todos estos tienen los tratamientos de “majestad”, alteza,
santidad, monseñor, excelencia, reverendo”, etc. y de “señor, señorío,
señorial”, etc. y todo esto junto forma el capitalismo, o sea, los ricos, los
cuales lo tienen todo, tienen “el oro, las tierras, los palacios, las obras de
arte, las fábricas de armas, la bomba atómica, el poder político, las
religiones, la banca”, etc. o sea, que todo esto es la parte rica. Pero
nosotros, los obreros y obreras que formamos la iglesia pobre, el único
cristianismo de Cristo, o sea, la iglesia que fundó o reunió el obrero
carpintero Jesús de Nazareth, el Cristo, comprendemos muy bien que en la parte
obrera, o sea, todos los pobres del mundo, no hay más títulos que los del
oficio de cada uno, tales como carpintero, albañil, zapatero, yesero,
enterrador, barrendero, fontanero, etc. y los de médico, oficinista,
dependiente, coger, etc. la lista sería muy larga, pero así ya es suficiente
para ver las dos formas de vida de la humanidad: ricos y pobres. Y claro está,
que nosotros, la iglesia pobre, nos sentimos muy orgullosos de ser cristianos
de Cristo, ya que es el más grande de los títulos que puede tener el ser
humano, y cuando dicho ser humano tiene en sí mismo, en su propia vida, al Espíritu
Universal de Dios, al que los cristianos llamamos “Cristo”, y otros seres
humanos le dan otros nombres, pero es lo mismo, entonces Cristo nos da el
verdadero título de “cristiano”, y Jesús de Nazareth nos dice: “El reino de Dios es de los pobres”, y
al tener, pues, a Cristo en uno mismo, este es el gran señorío del pobre, lo
cual está al alcance de todos los pobres del mundo. Y si los ricos quieren
tener este señorío, este título de “cristiano”, deben, pues, lo que Cristo
dice: “No se puede servir a Dios y al
dinero”, y que uno de los más grandes mandamientos de Dios es “Amar al
prójimo”, tal como Cristo nos dice: “Ama
a Dios sobre todas las cosas y ama a tu prójimo como a ti mismo”, y
hacerse, pues, rico a costa del trabajo del prójimo, y a veces también a costa
de la vida del prójimo con las guerras que organizan los ricos, es burlarse de
Dios y del prójimo. Repetimos, pues; ser cristiano de Cristo, es el mejor
título y el verdadero señorío que puede alcanzar el ser humano en este mundo.
Esto no es vanidad, no es orgullo material, social, político, etc. es orgullo
espiritual, es lo más importante en la vida humana, vivir en y con Cristo, con
nuestro Creador, al que llamamos “Dios”, es el verdadero título y señorío para
toda la humanidad, y claro está, que no tiene que ver con las tonterías de los
ricos. La iglesia pobre aconseja a todos los pobres del mundo que busquen a
Cristo, cada uno en sí mismo, en su propia vida. Así sea. Amén. (Agosto).
LA ORACION
INTIMA ES HABLAR CON DIOS
En la Biblia podemos leer: “Mas tú, cuando oras, entra en tu
habitación, cierra la puerta, y ora a tu Padre que está en secreto, y tu Padre
que ve en secreto, te recompensará en público”, Mateo 6, 6; “Dios es mi Pastor nada me faltará; en
lugares de delicados pastos me hace yacer, junto a aguas de reposo me
pastoreará; confortará mi alma; me guiará por sendas de Justicia…” Salmo
23, 1-3. Los obreros y obreras que formamos la iglesia pobre, comprendemos muy
bien todo esto. La oración íntima es la única que les sirve a los seres humanos
para hablar con Dios, porque rezar, orar, en los templos, catedrales,
mezquitas, sinagogas, etc. puede hacerse de forma falsa, hipócrita y sin creer
en Dios, pero la oración íntima no, ya que ningún ser humano se atreve a rezar
si no cree en Dios, porque nadie quiere engañarse a si mismo, entonces el que
reza, ora, de forma íntima, es porque cree de verdad en el Creador del Infinito
Universo. Hablar, pues, con Dios, es pedirle cosas necesarias para la vida,
ideas claras, Sabiduría, y sobre todo, fuerza o voluntad para ir desarrollando
la Bondad que todo ser humano lleva en si mismo. Por lo tanto, hablar de Dios
de esta forma particular, íntima, demuestra claramente que sobran todos los
intermediarios. Por ejemplo, si uno ya está hablando con el presidente de
gobierno, no necesita a nadie que se interponga entre los dos, a no ser que
hablen idiomas diferentes, entonces se necesita un intérprete, pero Dios y el
ser humano no necesitan intérpretes, porque Dios habla el idioma Universal, nos
entiende a todos, por que El nos ha creado. Sobran, pues, todas las religiones
del mundo, y aquí, nos referimos, en particular, a los que se autotitulan
“cristianos”, tales como el catolicismo, el protestantismo, etc. No
comprendemos por qué las jerarquías y sacerdotes se callan y no explican estas
cosas así, de esta forma tan sencilla, y los creyentes, la mayoría no entienden
estas cosas, y así, unos y otros se aferran a las creencias, ritos, ceremonias,
dogmas etc. y todo eso no sirve de nada, ya que el ser humano puede dirigirse
de esta forma tan sencilla a Dios. ¿De qué sirve, pues, para el ser humano que
habla con Dios, celebrar toda esta cosa teatral de religión? Porque esta
oración, que es la única que existe en la humanidad, resulta sencilla y al
mismo tiempo muy económica, ya que para hablar con Dios sobra el dinero, no
importa dar dinero a nadie, como tampoco nadie necesita estudios de seminario,
pagas mensuales, templos, etc. para hablar con Dios. Hemos entrado en el tercer
milenio, y nos parece que ya es hora de hablar claro, y no irnos por las ramas,
ir al tronco, y entender y practicar lo que dice Jesús de Nazareth: “La
Verdad nos libera”, la Verdad nos da libertad a todos. Todas las religiones
son ricas y están al servicio de los ricos, y repetimos, en particular nos
referimos al catolicismo y al protestantismo porque se autotitulan” iglesia
cristiana”, sin tener a Cristo, porque de tenerlo, practicarían y predicarían
el cristianismo así como lo hacemos nosotros, los obreros y obreras, la iglesia
pobre. Aconsejamos, pues, a todos los obreros y obreras del mundo que busquen a
Dios, cada uno en sí mismo, en su propia vida, y como dice Cristo, por boca del
obrero Jesús de Nazareth: “Ora, reza al
Padre de forma directa”. Así sea. Amén. (Septiembre).
ISRAELITAS
NAZARENOS CON JESÚS EL CRISTO
Muy poco tiempo después de la muerte del obrero carpintero Jesús de
Nazareth, llegaron a Mallorca unos pocos israelitas nazarenos, amigos de Jesús.
Estos eran los primeros apóstoles. También llegaron a la isla israelitas seguidores
de la religión de Moisés, del judaísmo. Todos fueron bien recibidos en
Mallorca, y tanto los seguidores de Moisés, como los de Jesús de Nazareth,
vivían y podían expresar libremente sus creencias, hasta que vino el rey Jaime
I, con su llamada “conquista” de la isla, y vino también la iglesia católica
con su Inquisición, y obligaron a todos los nativos, a todos los habitantes de
Mallorca, a ser bautizados por la fuerza, y los que se negaron fueron
encarcelados, y algunos fueron quemados vivos en un terraplén que hay cerca del
Castillo de Bellver, hoy conocido como Plaza Gomila. Esta llamada “iglesia”,
cuyo centro, junto con su jerarquía está en ese palacio de Roma llamado “el
Vaticano”, cuando en aquél momento llegó a Mallorca, era una cosa algo así como
muy extraña, con aquellos sacerdotes católicos hablando de Jesús de Nazareth de
una forma tan distanciada del sencillo mensaje de Jesús, que está claro que
nunca han sido, ni son, seguidores de Jesús, como los nazarenos, más tarde
llamados “cristianos”. A nosotros, los descendientes de los israelitas, nos
pusieron el mote de “chuetas”, pero los chuetas siempre hemos estado divididos
en ricos y pobres, los llamados, los llamados “chuetas de oreja alta”, y los
“chuetas de oreja baja”. En la actualidad, la mayoría de los chuetas ricos son
católicos, y algunos protestantes, o de otras religiones, pero unos pocos, por
ejemplo, mi propia familia, somos la iglesia pobre, la de Jesús de Nazareth, y
junto con otros obreros y obreras, chuetas o no, somos esta iglesia pobre, sin
organización de ninguna clase, y procuramos vivir al Cristo, cada uno en sí
mismo, y con propiedad, y también con más libertad, podemos decir a todos los
demás seres humanos que si quieren ser cristianos de verdad, tienen que buscar
a Cristo, o sea, al Espíritu de Dios, cada uno en sí mismo, sin necesidad de
acudir a ninguna clase de sacerdotes asalariados y con estudios de seminario,
pues nadie es cristiano sin tener a Cristo en sí mismo. Hacemos un llamamiento
a las jerarquías y sacerdotes de la iglesia rica tales como el catolicismo, el
protestantismo, etc. y también a sus creyentes, ricos y pobres, para que si no
viven al Cristo, no se presenten como “cristianos”. El cristiano nunca ha
tomado ninguna clase de armas para participar en guerras, ni de ayer, ni de
hoy. El cristiano nunca se hace rico, sino que trabaja para comer y comprende
que el que se hace rico es a costa del trabajo de los demás. Dios dice: “Ama a tu prójimo como a ti mismo”; no
dice: “Explótalo para hacerte rico”. El cristiano predica con su ejemplo y
también de palabra, el sencillo mensaje de Jesús de Nazareth, y no necesita
títulos, ni estudios de ninguna clase, ni teológicos, ni filosóficos, etc.
porque Cristo es Vida, no es una creencia, es Justicia, Paz, Bondad, y esto es
Sabiduría de Dios, y cualquier ser humano, hombre o mujer, blanco o negro, si
vive al espíritu de Dios en sí mismo, es un verdadero sacerdote de la infinita
religión de Dios, y en nuestro mundo es un verdadero apóstol del Cristo. Yo
mismo, soy un obrero yesero ya jubilado, y con alegría y sencillo orgullo puedo
decir que me siento apóstol de Cristo, amigo de Jesús de Nazareth, y en la
actualidad puedo decir, con propiedad, a los demás amigos, descendientes o no,
pero obreros y obreras, tanto en Mallorca, como en cualquier lugar del mundo,
que si buscan y viven al Cristo, cada uno en sí mismo, yo declaro que son
cristianos de verdad, y que no necesitan pertenecer a ninguna religión
organizada por los hombres, y a todos les aconsejo lo que nos decía Jesús de
Nazareth: “Que vuestra oración sea íntima, en secreto, porque es Dios quien la
tiene que escuchar, no los seres humanos”, y esta es la verdadera y única
comunión con Dios. Ánimos amigos, el verdadero cristianismo está formado por
gente pobre, en cualquier lugar del mundo.
MI EVANGELIO
SOBRE JESÚS DE NAZARETH, EL CRISTO
Soy un obrero yesero ya jubilado, mallorquín, en estos momentos tengo 87
años de edad; soy descendiente de los apóstoles de Jesús de Nazareth que
llegaron a Mallorca poco tiempo después de la muerte del carpintero, cuyo
mensaje ha llegado hasta mi, a nuestra familia, de forma oral, de padres a
hijos. Al llegar a esta isla algunos sacerdotes de la religión católica,
obligaron a ser bautizados a los descendientes de los israelitas que llegaron a
Mallorca, tanto a los seguidores de la religión de Moisés, como a los
seguidores de Jesús, y a todos los nativos, y los que se negaban, fueron
encarcelados, y algunos fueron quemados vivos por la Inquisición católica, y a
todos los descendientes de Israel que consintieron en ser bautizados y quedaron
con vida, fueron conocidos con el mote de “chuetas”, como un insulto. Por lo
tanto, yo tengo el derecho y el deber de escribir, de forma muy sencilla, mi
evangelio sobre Jesús.
Jesús nació en Nazareth. Era el hijo mayor de varios hermanos; su padre era
José, y su madre era María. Jesús trabajaba de carpintero con su padre, pero ya
desde muy joven hablaba de las cosas de Dios, y los mayores se asombraban de su
Sabiduría. Cuando Jesús tenía ya más de treinta años de edad, empezó a decir a
los amigos y vecinos de Nazareth, y de otros lugares de Israel, que había
venido a este mundo para dar el sencillo mensaje de que todos los seres humanos
podemos vivir la vida espiritual con el Espíritu de Dios, al que llamamos “el
Cristo”, teniéndolo cada uno en sí mismo, sin necesidad de acudir a los
sacerdotes asalariados de ninguna religión organizada por los hombres. Con el
llamado “Padrenuestro”, la oración que Jesús compuso con palabras ya escritas
en la Torá, o sea, el llamado “antiguo testamento” de la Biblia, y rezando de
forma íntima, en secreto, esta es la verdadera comunión con Dios, que cualquier
familia, aunque esté compuesta de dos o tres personas, si viven al Cristo y
hablan de las cosas espirituales, Dios está presente, y ésta es también la
verdadera sinagoga o iglesia, pobre, porque el mismo Jesús nos dice: “El verdadero Maestro y Pastor es Cristo”,
el cual nos enseña y nos guía a través de la vida, y también nos dice: “El reino de Dios es de los pobres”,
pero buscando a Cristo, cada uno en sí mismo, y si los ricos quieren ser
cristianos, tienen que desprenderse de las riquezas materiales, porque no se
puede ser cristiano, y al mismo tiempo ir acumulando riquezas, dinero, porque
nadie se hace rico trabajando honradamente , pero sí explotando al prójimo, y
Dios nos dice: “Ama a tu prójimo como a
ti mismo”, no dice: “Explótalo para hacerte rico”. Jesús de Nazareth era
pobre, y nos dice: “Aprended de mí”,
y él trabajaba para comer y predicaba sin pedir dinero a nadie, porque Dios nos
da Sabiduría de forma gratis, por lo tanto, hay que predicar de forma gratis.
Cristo nos dice que lo importante es vivir la Justicia, la Paz, la Bondad. Este
es el sencillo mensaje de Jesús de Nazareth, el cual era una persona muy
sencilla y bastante alegre, y decía a la gente: “Si hablan mal de vosotros porque me seguís a mí, tenéis que estar
alegres”; y en su misma boda, al “convertir el agua en vino”, nos da la
idea de que el vino es alegría; pero claro que Jesús, algunas veces, también
lloraba. Busquemos, pues, al Cristo, cada uno en sí mismo, y que Dios nos
bendiga a todos.
EL CAPITALISMO
ES LA GRAN DESPENSA DEL EGOISMO
En este mundo al que llamamos “Tierra”, la humanidad está dividida en ricos
y pobres, o sea, unos que se hacen ricos a costa del trabajo de otros, y el
egoísmo está vivo, muy presente en la gran mayoría de los seres humanos, pero
en los países donde domina la dictadura comunista, el egoísmo está bastante
frenado, paralizado, de momento, y en los países donde domina el capitalismo,
el egoísmo está al día. Es, pues, el capitalismo, la despensa del egoísmo, es
la gran lacra social, ya que muchos van al poder y al dinero, y los ricos
tienen el poder político, oro, tierras, palacios, obras de arte, y armas, ejércitos,
policía, etc. que les protegen, además de jerarquías y sacerdotes que siempre
los defienden. Esto es el sistema capitalista, dominante, explotador, etc.
disfrazado con nombres como “democracia”, “país libre”, país con derechos
humanos”, etc. pero todo es un gran engaño. En estos países dominados por el
capitalismo, hay muchos obreros y obreras, o sea, los pobres, que piensan, que
sueñan con hacerse ricos; si están en paro esperan tener trabajo, bien, pero
los que ya trabajan, procuran comprar casas y se buscan más trabajo haciendo
horas extras, haciendo dos trabajos, etc. y claro está, que todo ello quita el
trabajo a otros, lo cual demuestra el gran egoísmo de todos. Es, pues, la gran
lacra social, la grave enfermedad llamada “egoísmo”, que produce y alimenta el
capitalismo tan salvaje y bestial, que hasta las jerarquías y sacerdotes de
todas las religiones han caído y se encuentran cómodos en la trampa
materialista y atea del brutal capitalismo. Bastan algunos “botones de
muestra”, como las guerras que organizan los ricos, muchos de ellos creyentes
de tal o cual religión, los muertos y heridos en los accidentes de tráfico en
las carreteras de todo el mundo, donde cada semana mueren millones de seres
humanos ya que hay que seguir vendiendo coches, hacer funerales, misas, etc. y
a todo esto hay que añadirle los robos, las grandes estafas, los vicios de
todas clases, siendo el panorama tan triste que se le puede llamar “macabro”,
“satánico”, etc. y están brutal, que muchos seres humanos quedan muy por debajo
de los animales más feroces que se conocen en este mundo.
El capitalismo es el gran anticristo desde que domina este mundo Tierra.
Esto es lo que trataba de demostrar aquél obrero carpintero, Jesús de Nazareth,
que llevaba en sí mismo al Cristo, o sea, al Espíritu Universal de Dios, y por
eso nos dice: “No se puede servir a Dios
y al dinero”; “Bienaventurados vosotros los pobres, porque vuestro es el reino
de Dios”; “Buscad primero el reino de Dios”. Y nosotros, los obreros y
obreras que formamos la iglesia pobre, entendemos muy bien todo esto, que es la
gran y única revolución contra el capitalismo, contra el egoísmo de cada uno,
que es la revolución pacífica con Cristo en el ser humano. Aconsejamos a todos
los pobres del mundo que procuren no traer muchos hijos, que se den de baja de
la religión de los ricos, llámese como se llame, que se aparten del
militarismo, que no voten a nadie, etc. y formen con nosotros, estén donde
estén, la iglesia pobre, el único y verdadero cristianismo en el mundo. Buscad
a Cristo. Así sea. Amén.
JESÚS DE
NAZARETH ERA POBRE, TAMBIÉN SU IGLESIA
Soy descendiente de los primeros israelitas cristianos que llegaron a
Mallorca poco tiempo después de la muerte de Jesús de Nazareth, cuyo mensaje ha
llegado hasta mí de forma oral, de padres a hijos. Jesús de Nazareth, el
Cristo, era un obrero, y su oficio era de carpintero. Jesús nunca tuvo casa
propia; siempre vivió con sus padres, cuya casa era una pequeña carpintería, ya
que José, el padre de Jesús, era carpintero. Jesús trabajaba y predicaba, y
decía: “No se puede servir a Dios y al
dinero”; “Es más fácil que pase un camello por el ojo de una aguja, que entrar
un rico en el cielo”; “Las aves del cielo tienen nido, pero yo no tengo más
casa que la de mis padres”, “El reino de Dios es de los pobres”; “Y dijo a un
rico que quería seguirle: “Primero tienes que devolver las riquezas que has
acumulado, y después, si quieres seguirme, ven, toma tu cruz y sígueme”.
Jesús se rodeó de otros obreros y obreras; algunos eran pescadores de oficio, y
después del trabajo, cuando se reunían, eran la pequeña sinagoga, más tarde
llamada “iglesia”. Jesús no nombró a nadie como Jefe o director de los demás,
pues decía: “Buscad a Cristo, al reino de
Dios, cada uno en sí mismo”. Cristo es el verdadero Maestro y Pastor, él
nos enseña y nos guía en esta vida. Jesús no organizó ninguna iglesia parecida
a lo que es la iglesia rica, tales como el catolicismo, el protestantismo, etc.
Jesús de Nazareth no se dirigía a la gente con versículos bíblicos, lo hacía de
forma directa, porque llevaba en sí mismo al Cristo. Jesús de Nazareth repetía
muchas veces: “Aprended de mí”, y la
base de su mensaje era, y es, apartarse de toda clase de religión organizada
por los hombres. Todo ser humano que se hace rico, lo hace explotando a los
demás, y esto no es amar al prójimo, por lo tanto, ningún rico es cristiano. En
la actualidad, nosotros, los obreros y obreras que formamos la iglesia pobre
podemos decir, con propiedad, a las jerarquías, sacerdotes, y creyentes ricos
del catolicismo, protestantismo, etc. que si quieren ser cristianos, busquen a
Cristo, que aprendan de Jesús, que trabajen para ganarse el pan, y que después
prediquen sin pedir dinero a nadie. Jesús decía: “Lo que Dios nos da gratis, tenemos que darlo gratis”. La iglesia
pobre actual somos la iglesia de Jesús de Nazareth, el Cristo, y hacemos un
sincero llamamiento a la iglesia rica, y a toda la humanidad, que busquen a
Cristo, cada uno en sí mismo, no en las religiones. Repetimos: “Sin Cristo en
uno mismo, nadie es cristiano”; y Dios, que es nuestro Padre, es el único que
puede guiarnos en la vida. Como podéis ver, amigos que leáis este mensaje, no
hacemos ninguna clase de propaganda para que la gente nos siga, no hacemos
seguidores nuestros, no hacemos socios, ni pedimos dinero a nadie, pero sí que
predicamos en voz alta, y con orgullo, que todos los seres humanos busquen al
Cristo, al Dios Creador del infinito Universo, el nombre que se le dé es lo de
menos, lo importante es sentir y vivir la Paz, la Justicia, la Bondad que Dios
nos inspira, si los buscamos en nosotros mismos. Ánimos amigos, buscad a
Cristo. Así sea. Amén. (Diciembre).
LOS VERDADEROS
CRISTIANOS SON POBRES
Somos obreros y obreras quienes formamos la iglesia pobre. Algunos somos
descendientes de los apóstoles de Jesús de Nazareth, al cual conocieron
personalmente. Algunos de dichos apóstoles llegaron a Mallorca poco tiempo
después de la muerte de Jesús, cuyo mensaje ha llegado hasta nosotros de forma
oral, de padres a hijos. Por eso, y junto con la experiencia del Cristo en
nosotros mismos, somos el verdadero cristianismo, así como, seguramente, hay
otros cristianos en otros lugares del mundo, y con propiedad, podemos decir que
la iglesia rica, tales como el catolicismo, el protestantismo, etc. nunca han
sido, ni son, la iglesia pobre de Jesús de Nazareth, aunque en estas
organizaciones religiosas, seguramente que hay algunos cristianos. El
cristianismo lo formamos los cristianos en cualquier lugar del mundo. El
cristianismo de Jesús de Nazareth no es ninguna religión organizada por los
hombres. Cristo es el Espíritu de Dios; no es, pues, una creencia o un dogma
para creer, es la vida espiritual para el ser humano, y sin esta vida,
viviéndola en uno mismo, nadie es cristiano. Esto es lo que tiene que
comprender la iglesia rica, pero si no les interesa seguir y predicar a Cristo,
que no se presente nadie como “cristiano”, porque el Cristo, o sea, Dios, es
Justicia, Paz, Bondad, y esta Sabiduría es de Dios, y por eso decimos, con
propiedad, que los verdaderos cristianos son pobres. Supongamos una familia
formada por el padre, la madre y dos o tres hijos; si los padres están en sus
cabales, no harán injusticias con sus hijos, cuando se trata de la comida, el
vestido, los estudios, etc. ya que estas cosas son para todos sus hijos; sobre
todo, la madre que ha parido a estos hijos, nunca le dirá a un hijo que coma
bien, y al otro que no coma bien, a uno que se ponga buenos trajes y al otro
que no se los ponga, a uno que estudie, y al otro que no, que trabaje. La
familia que se portase de esa manera, si hiciesen diferencias, sería criticada
por los mismos vecinos, por la gente que los conociese, que verían allí la
injusticia, pero las religiones, sobre todo la iglesia rica, que dicen fundarse
en Jesús de Nazareth, predican a “un dios que está contento con una humanidad
dividida en ricos y pobres”, siendo todos hijos del mismo Dios; eso es una
barbaridad de la cual no hay que culpar a Dios, pero sí a las jerarquías y
sacerdotes de todas las religiones, y sobre todo, de esta iglesia rica que se
burla de Dios, y de Jesús de Nazareth, el obrero carpintero, y de su iglesia
pobre, los cuales somos los verdaderos cristianos en este mundo. Jesús de
Nazareth nos dice: “Buscad el reino de
Dios”, y este reino está dentro de uno mismo, en la propia vida de
cualquier ser humano de este mundo, aunque al Cristo le de nombres diferentes,
ya que si vive la Bondad, la cual la inspira Dios, para nosotros es un
verdadero cristiano. Pero por desgracia, muchos van alimentando su egoísmo
buscando riquezas materiales, no comprendiendo que si todos los seres humanos
fuésemos ricos, nos moriríamos de hambre, mientras que si todos los que pueden
trabajar, trabajasen, no habría injusticia social, a nadie le faltaría el pan,
ni un techo. No necesitamos, pues, católicos del papa, ni protestantes de
Lucero, lo que toda la humanidad necesita son cristianos de Cristo; ser todos
más humanos, y menos animales; y portarnos todos como hijos de Dios, aunque
algunos digan que no creen en El, pero si todos vivimos la Bondad y la
Sabiduría de Dios, este mundo será un paraíso. Ánimos amigos, buscad a Cristo.
Así sea. Amén.
DIOS, LA
ORACIÓN Y LA CIENCIA HUMANA
Soy un obrero yesero ya jubilado, descendiente de los apóstoles de Jesús de
Nazareth, que llegaron a Mallorca poco tiempo después de su muerte. Su mensaje
ha llegado a nuestra familia de padres a hijos, y junto con otros obreros y
obreras, descendientes o no, somos la iglesia pobre. En este mensaje doy idea
de la oración que experimento en mi propia vida. Todas las religiones predican
la creencia en Dios; los ateos niegan la existencia de Dios, y los científicos,
con su ciencia humana, tratan de encontrar el origen del infinito Universo y de
la misma vida. En la historia de la humanidad encontramos que, de vez en
cuando, hay personas que encuentran a Dios en ellos mismos; son los llamados
“profetas”. El verdadero contacto con Dios es la oración íntima. Esta comunión
con el Creador del infinito Universo hace posible que el ser humano pueda
vivir, la Justicia, la Paz, la Bondad, y esto es Sabiduría de Dios. El obrero
carpintero Jesús de Nazareth dice: “Buscad
el reino de Dios”; comprendemos que cada uno debe buscarlo en sí mismo, no
en las religiones organizadas por los hombres. Nos dice también Jesús: “El reino de Dios es de los pobres”,
pero no basta con ser pobre, sino que hay que apartar de la propia mente la
ambición y el egoísmo de las cosas materiales. Los ateos niegan la existencia
de Dios; creo que es el nombre de “Dios Creador” el que los confunde, y los
científicos buscan en la materia “si Dios es cuadrado o redondo”, buscan el
origen de la vida y del infinito Universo. La oración íntima nos llena la mente
de ideas positivas, y se comprende que lo que llamamos “Dios”, es la mente o
idea Universal que crea y recrea el infinito Universo, o sea, la misma vida,
como Jesús dice en la oración llamada “Padrenuestro”, y comprendes que todos
somos hijos de Dios. Yo mismo, como espíritu, con la mente puedo dominar muchas
cosas de mi cuerpo físico, por ejemplo, el dolor, pero además, con mi vista que
falla, tengo reuma, artrosis, etc. pero comprendo que no hay que dar tanta
importancia a este cuerpo físico, y procurar, siempre, crecer espiritualmente.
Yo mismo puedo decir, por mi propia experiencia, que los ateos piensen estas
cosas, y que los científicos no busquen en las cosas materiales, que son las
ramas, y busquen la fuente y la verdad del infinito Universo que llamamos Dios,
que lo busquen en el tronco. La ciencia nos habla de los átomos, iones, electrones,
protones, etc. Conocemos lo que definimos con la palabra “espermatozoide”, este
microbio que al llegar al óvulo, juntos se convertirán en ser humano. También
se habla del macrocosmos y del microcosmos. Dios es infinito, y de El sale
todo. Dios ha creado y recrea el infinito Universo, y todo es vida, por lo
tanto es vida infinita. Las jerarquías y sacerdotes de todas las religiones no
entienden nada o no quieren entender y prefieren alimentar su egoísmo material.
Todos los seres vivientes en el Universo somos parte del Todo al que llamamos
“Dios”, por lo tanto, no hay ninguna clase de castigo eterno, porque Dios crea
siempre el futuro de todo. Yo mismo comprendo que lo importante en la vida es
avanzar, progresar espiritualmente, y si no basta una vida, ya Dios nos dará
otras vidas. El cielo es el infinito Universo, no se trata de irse por las
ramas, vayamos al tronco, al que llamamos “Dios”. Tanto las jerarquías, como
los sacerdotes de todas las religiones, los partidos políticos, los ateos, los
científicos, que comprendan que puedo decir todo esto por mi propia experiencia
espiritual, y no por estudios de seminarios, de universidades, etc. Comprendo
muy bien que hay que estudiar las cosas físicas, las matemáticas, etc. pero
para comprender a Dios, hay que acudir siempre a la oración íntima, que es
pensar con ideas positivas, con Bondad. Esta es la aclaración de la vuelta del
hijo pródigo a la casa del Padre, de la que nos habla la Biblia. Ánimos amigos,
buscad la Verdad a la que llamamos “Dios”. Así sea. Amén.
DIOS HABLA DE
FORMA DIRECTA A CADA SER HUMANO
Para las personas que no me conocen, debo repetir lo de siempre. Soy un
obrero yesero ya jubilado, descendiente de algunos apóstoles que llegaron a
Mallorca poco tiempo después de la muerte del obrero carpintero Jesús de
Nazareth, cuyo mensaje ha llegado hasta nosotros de forma oral, de padres a
hijos. Junto con otros obreros y obreras, descendientes o no, somos la iglesia
pobre. Jesús de Nazareth dice: “Orad o
rezad de forma íntima, en secreto”, y les dijo a los sacerdotes de su
tiempo que eso de “orad en voz alta es
vanidad”, y añadió: “Los rabinos oran
en voz alta en los templos, y en otros lugares para ser oídos por los hombres,
pero vosotros orad íntimamente”. Yo digo que esto es lo importante para el
ser humano, porque de esta forma cuando te diriges a Dios, El te contesta de forma íntima. Esta es la
verdadera oración para todo ser humano, tanto si cree en Dios como si no,
porque quien lo hace eres tú, el espíritu, la mente que piensa, y los pensamientos;
es lo mas importante para analizarlo. Se dice que los seres humanos
pertenecemos al reino animal, pero se comprende que estamos más adelantados que
los demás animales. Basta con ver que de los pensamientos del ser humano han
salido las ideas de construir casas, muebles, vestidos, inventos de toda clase,
etc. y esto nos demuestra que somos más que un cuerpo físico, una mente que
piensa con el cerebro, etc. Somos espíritus, y manejamos a nuestro antojo las
ideas de Paz, Bondad, Bondad, pero también las de ambición, egoísmo, maldad,
etc. pero todos los seres humanos buscan siempre lo bueno para sí mismos,
aunque muchos se equivocan y escogen el camino de lo negativo en la vida, los
vicios de toda clase, el robo, el engaño, la explotación del hombre por el
hombre, las guerras, y la humanidad la vemos dividida en ricos y pobres. Pero
yo mismo desde muy joven, con la idea clara del Cristo, o sea, del Espíritu de
Dios, siempre he podido comprobar que la verdadera Sabiduría para todo ser
humano es pensar y hacer las cosas en la vida, que sean siempre un bien para
uno mismo, sin hacer daño a nadie. No se trata de creer o no creer en Dios, es
cuestión de vivir la vida sin ensuciarla, y esto es el reino de Dios, o el
Mesías que siempre está presente en cada ser humano desde que existe el ser
humano sobre la Tierra. En la historia encontramos que siempre hay religiones
con unos seres humanos llamados “sacerdotes”, que dicen saber las cosas de
Dios, y que los demás seres humanos siempre tienen que acudir a ellos si
quieren estar bien y obedecer a Dios. Pero todas las religiones, al estar
organizadas por hombres que han ido siempre y van a lo mismo, que es poder
político y dinero, han hecho mucho mal a toda la humanidad, claro está, salvo
algunas excepciones de hombres y mujeres que han predicado y sacrificado su
vida por Dios. Pero ya es hora de que todos los seres humanos comprendan que
sólo hay un Maestro y Pastor que guía siempre al ser humano, que es Dios. Tengo
que repetir lo mismo: Dios habla continuamente de forma directa al ser humano y
no necesita de ninguna clase de intérpretes llamados “sacerdotes”, para
decirnos que somos seres humanos muchos más avanzados espiritualmente que los
demás seres humanos. Jesús de Nazareth nos dice que los mandamientos de Dios se
resumen en dos: “Ama a Dios sobre todas
las cosas y al prójimo como a ti mismo”. La oración íntima produce la
verdadera comunión con Dios, y al oír a Dios que “nos habla” con ideas
positivas, nos convierte en apóstoles de Cristo, en verdaderos sacerdotes de la
religión universal de Dios, que no necesita sacerdotes asalariados, ni templos
de ninguna clase. Por eso dice Jesús: “Bienaventurados
los de limpio corazón, porque ellos verán a Dios”; pero Jesús seguramente
dijo: “Ya ven a Dios”, porque no son
los ojos físicos, es el espíritu, que no tiene forma, el que “ve” a Dios en uno
mismo, en la Naturaleza, en la propia vida. Animos amigos, escuchemos la voz de
Dios, cada uno en sí mismo. Así sea. Amén.
EL ESPÍRITU DEL
SER HUMANO PUEDE VER A DIOS
Jesús de Nazareth dijo: “El reino de
Dios es de los pobres”. Lucas 6, 20. Se comprende muy bien que no basta con
ser pobre para tener el reino de Dios, los pobres, o sea, los obreros y obreras
del mundo, son los que están más cerca para encontrar el reino de Dios. Yo
mismo soy un obrero ya jubilado, y por las experiencias espirituales de mi vida
puedo decir que el espíritu del ser humano puede ver a Dios. La Paz, la
Sabiduría, la Justicia, la Bondad, etc. de Dios, son unos sentimientos que
cuando los vives, te das cuenta de que eso mismo es ver a Dios. Los ojos
físicos del ser humano no ven a Dios, pero sí que podemos contemplar las cosas
creadas como son: el infinito Universo, nuestro mundo, las plantas, los
animales, los seres humanos. Cuando el ser humano empieza a pensar por sí
mismo, se da cuenta de que cualquier acción está precedida por la idea; sin el
pensamiento, no eres capaz de mover ni tan siquiera un brazo; en una palabra,
que antes de construir una casa, hacer una mesa, o cualquier cosa, primero hay que
tener la idea, o sea, hay que pensarlo. Se comprende muy bien que Dios es la
gran idea Universal, y cuando Dios pone en marcha su propia idea, se forman los
mundos, los soles, etc. esta es la continua creación del infinito Universo, que
Dios crea y recrea eternamente. La idea humana a la que llamamos “el espíritu”,
se pone en contacto con la gran idea a la que llamamos “Dios”, he aquí la
verdadera comunión con Dios. En algunas ocasiones he contado algo de mis
propias experiencias, a veces soñando, y a veces despierto, me he encontrado en
un inmenso vacío lleno de luz, y no veía ninguna clase de seres humanos, ni de
figuras, ni de mundos, ni siquiera a mí mismo, pero en aquellos momentos, al
sentir aquella paz, se comprende que es la presencia de Dios, al cual el
espíritu ve cara a cara, y comprendes de forma sencilla y clara que cuando el
espíritu está en esta íntima comunión con Dios, no necesita ninguna clase de
religión organizada por los hombres, y el espíritu del ser humano comprende muy
bien la gran ignorancia de millones de seres humanos que en lugar de buscar a
Dios en ellos mismos, buscan su bienestar físico en este mundo, en la Tierra,
tratando de acumular riquezas materiales, dinero, y podemos decir que se quedan
vacíos de la Verdad que llamamos Dios.
Se dice que la ciencia humana, o sea, los científicos, están descubriendo
nuevas medicinas para vencer a las enfermedades que padecen los cuerpos físicos
de las personas, eso está muy bien, pero si se llega al punto de que el ser
humano no padezca ninguna clase de enfermedad y puedan alargar su vida
material, física, en este mundo, sin desarrollar el espíritu, sería un absurdo,
un caos, porque la vida no es solamente comer, beber y dormir; Dios no habría
creado el infinito Universo para eso. Aconsejamos, pues, a todos los pobres del
mundo que busquen al Cristo, que es el Espíritu de Dios, cada uno en sí mismo,
y cuando empiecen a desarrollar en ellos mismos estos sentimientos, comprobarán
que su propio espíritu ve a Dios, lo entiende, y con propiedad, puede aconsejar
a los demás que hagan lo mismo. Si los ricos quieren ver y sentir a Dios, que
abandonen sus riquezas materiales y busquen a Cristo, o sea, a Dios. Así sea.
Amén. (Junio).
EL CRISTIANO ES
EL QUE VIVE EN SI MISMO AL CRISTO
Soy un obrero yesero ya jubilado, mallorquín, descendiente de los apóstoles
de Jesús de Nazareth que llegaron a Mallorca poco tiempo después de la muerte
de Jesús, cuyo sencillo mensaje ha llegado a nuestra familia de forma oral, de
padres a hijos, y junto con otros obreros y obreras, descendientes o no, somos
la iglesia pobre en Mallorca, y en otros lugares del mundo. Jesús de Nazareth
dice: “El reino de Dios es de los
pobres”, Lucas 6, 20. Comprendemos que no basta con ser pobre para tener el
reino, pero Jesús nos dice que lo busquemos, cada uno en sí mismo, este reino
que es el Cristo, el Maestro, y el Pastor que nos enseña y nos guía a través de
la vida. El cristiano es el que vive en sí mismo al Cristo, por lo tanto, no
tiene necesidad de pertenecer a ninguna religión organizada por los hombres. El
cristiano no necesita que nadie le predique las cosas de Cristo, porque lo vive
en sí mismo, y si tiene hijos, no necesita que nadie les predique a sus hijos
lo que es el verdadero cristianismo, por la sencilla razón de que si los padres
son cristianos, con propiedad pueden enseñar a sus hijos el verdadero camino
hacia Dios, que es Cristo, cuando lo vives, y esto no es una creencia, es una
experiencia personal del ser humano; esto es ser, de verdad, cristiano. La
Justicia, la Paz, la Bondad, son Sabiduría de Dios, y esto es Cristo, y claro
está que cuando lo vives no necesitas ninguna clase de sacerdotes que te
prediquen lo que tú ya vives. La oración íntima es la verdadera comunión con
Dios. Las religiones organizadas por los hombres, son un impedimento para
llegar a Dios. Jesús de Nazareth les decía a los sacerdotes de Israel: “Sois
piedras de tropiezo, que no entráis en el reino, o sea, en el cielo, ni dejáis
entrar a los demás”. Pero claro está, que hay que comprender que en todas las
religiones hay personas de buena fe que viven al Cristo en ellos mismos, aunque
sea dándole nombres diferentes al Espíritu de Dios. El cristiano trabaja para
comer, no busca hacerse rico, porque nadie se hace rico trabajando
honradamente, pero sí que puede a costa del trabajo del prójimo, y Dios nos
dice: “Ama a tu prójimo como a ti mismo”,
no dice: “Explótalo”. Yo mismo, que he procurado vivir siempre al Cristo,
puedo decir con propiedad a las jerarquías y sacerdotes de la iglesia rica,
tales como el catolicismo, el protestantismo, etc. que si quieren ser
cristianos de verdad, y para poder predicarlo después a los demás, que busquen
a Cristo, cada uno en sí mismo, y verán que sobran los estudios de seminarios,
los palacios como el mismo Vaticano, los monasterios, etc. así como los
ridículos títulos que usan, y el salario mensual, y estando con Cristo, cada
uno en sí mismo, podrán ver claramente que el verdadero cristianismo no está
compuesto de ricos y pobres, y que nosotros, la iglesia pobre, en Mallorca, y
en cualquier lugar del mundo, somos el verdadero cristianismo. Y con buena fe y
buena voluntad, en oración íntima, pedimos a Dios que ilumine a las jerarquías
y sacerdotes de la iglesia rica, y de todas las demás religiones, para que con
su ejemplo, pronto podamos tener un mundo de Paz, de Justicia, en una palabra,
poder vivir al Mesías. Ánimos, pues, amigos; no habléis tanto de Cristo, sino
buscadlo, y tratad de vivirlo de verdad. Así sea, amigos. Amén.
JESÚS DE
NAZAREH Y LA RESURRECCIÓN
“El polvo se torne a la tierra como
era, y el Espíritu se vuelva a Dios que lo dio”, Eclesiastés 2, 8; “Jesús, clamando a gran voz, dijo: “Padre, en tus manos encomiendo mi
espíritu”, Lucas 23, 46; “El espíritu
es el que da la vida, la carne nada aprovecha”, Juan 6, 63; “Nosotros somos los que servimos en espíritu
a Dios, y nos gloriamos en Cristo Jesús, no teniendo confianza en la carne”,
Filipenses 3, 3; “Si Cristo no resucitó,
vuestra fe es vana”, 1 Corintios 15, 17; “Porque en la resurrección, ni los hombres tomarán mujeres, ni las
mujeres maridos, más son como los ángeles de Dios en el cielo”, Mateo 22,
30.
Nosotros, los obreros y obreras que formamos la iglesia pobre, tenemos todo
esto muy claro, y vemos como la iglesia rica, llámese como se llame, hace y
deshace todo lo que quiere de la Biblia, haciendo que Pablo se contradiga en
los distintos versículos, ya que en una carta le hacen decir que no confía en
la carne, y en otra le hacen decir que sí, que si Cristo no resucitó, toda la
fe es vana; entonces, ¿en qué se queda la fe de la iglesia rica con estas
contradicciones? Pero nosotros, los que formamos la iglesia pobre, nos atenemos
a las palabras del profeta que dice: “El
espíritu vuelve a Dios que lo dio”, y sobre todo, nos atenemos a las
palabras que dice Cristo por boca del obrero carpintero Jesús de Nazareth: “En la resurrección seremos como ángeles”,
por lo tanto, somos espíritus, y claro está que el espíritu no tiene un cuerpo
físico con sus necesidades fisiológicas humanas, por lo tanto, nada de resucitar
el cuerpo físico. Pero con este mensaje no tratamos de polemizar con nadie,
porque tenemos las cosas muy claras referente a Dios, y comprendemos muy bien
las palabras de Jesús cuando nos dice en la oración del Padrenuestro: “Hágase tu voluntad, así en la Tierra, como
en ele cielo”, por lo tanto, si hay un paraíso, o una resurrección, o si no
hay un paraíso, ni una resurrección, en una palabra, que tanto si hay premio,
como si no hay premio, damos gracias a Dios, y el egoísmo se queda en la
religión rica de los ricos. Y como siempre, terminamos este mensaje aconsejando
a todos los pobres del mundo que busquen al Espíritu de Dios, al Cristo, cada
uno en sí mismo, y si alguien quiere dar un paso más adelante, que se aparte de
la religión de los ricos, dándose de baja de ella, y que no traiga muchos hijos
al mundo. Ánimos amigos. Así sea. Amén. (Septiembre).
PEDIMOS VERDADERA JUSTICIA PARA
TODOS
En la Biblia
podemos leer lo siguiente: “El Dios Santo
santificado en la Justicia”, Isaías 5, 16; “Os digo que Dios hará Justicia prontamente”, Lucas 18, 7. Los
obreros y obreras que formamos la iglesia pobre en Mallorca, comprendemos que
tanto Isaías, como Jesús de Nazareth, se refieren a la verdadera Justicia, que
es la de Dios, porque la “justicia” creada en nuestro mundo por seres humanos,
es injusticia social. La prueba de ello es que la humanidad está dividida en
ricos y pobres. El trabajo de los pobres produce riqueza, y esta se la quedan
unos cuantos individuos sin conciencia y se hacen ricos a costa del trabajo de
los pobres, del prójimo, y Dios dice: “Ama
a tu prójimo”, no dice: “Explótalo para hacerte rico”, y nosotros
preguntamos: ¿Por qué las leyes de los gobiernos ponen un tope al salario de
los obreros con los convenios que duran uno, dos años, o más, pero a los
empresarios, comerciantes, industriales, etc. no se les pone límites y pueden
tener beneficios de millones de euros? Así, de esta manera, mientras unos pocos
tienen toda la riqueza del mundo en sus manos, muchos millones de obreros y obreras
tienen que adaptar sus vidas a sus salarios, que muchas veces no basta, no
llegan a fin de mes, y todas las religiones, sobre todo la iglesia rica que
tenemos en Europa, en España mismo, como el catolicismo, el protestantismo, no
dicen nada de todo esto, y tanto las jerarquías, como sus sacerdotes, procuran
su bienestar, y son los intermediarios de hacer limosnas a tantos pobres que
pasan hambre, y después predican que son la “iglesia cristiana”, y de esta
manera, todo el capitalismo mundial, incluidos, claro está, los “mandamases”
religiosos, políticos, reyes, presidentes de gobiernos, etc. se burlan de Dios
y de los pobres. Pero nosotros, la iglesia pobre de Jesús de Nazareth, aquí en
Mallorca, aconsejamos a todos los pobres del mundo lo que tantas veces
repetimos, que mientras no exista la verdadera Justicia de Dios en este mundo,
procurad no traer muchos hijos, uno por pareja ya es mucho, no aumentemos más
el número de obreros en paro, de pobres que pasan hambre, de soldados para las
guerras que organizan los ricos para aumentar su riqueza material; seamos
buenos, pero no tontos. Pobres del mundo, procurad buscar al Espíritu de Dios,
cada uno en sí mismo; nosotros lo llamamos el “Cristo”, y cuando lo vives,
comprendes lo que dice Jesús de Nazareth, que el verdadero Maestro y Pastor es
Cristo, el cual nos enseña y nos guía a través de la vida.
Vosotros,
jerarquías y sacerdotes de vuestras organizaciones a las que llamáis “iglesia”,
tales como el catolicismo, el protestantismo, etc. buscad a Cristo, cada uno en
sí mismo, y cuando lo tengáis, seréis apóstoles de verdad, siendo pobres tal
como nosotros, pero si no os interesa y queréis seguir como hasta ahora, como
un partido político que va siempre a lo mismo, al poder político y al dinero,
por favor, no habléis de Cristo, y seguid con vuestra línea capitalista.
De forma
particular me dirijo a ti, empresario, ¿por qué te quedas con los llamados
“beneficios”, o sea, la riqueza que produce el trabajo de los obreros y obreras
que trabajan para ti? ¿Por qué no empiezas a hacer Justicia? Consúltalo con tu
familia, y si tienes hijos, pregúntales si les parece bien que para que
vosotros podáis vivir bien y tener toda clase de comodidades, tengáis que
explotar a los obreros. Todo esto lo decimos sin odiar a nadie, y pedimos,
pues, como iglesia pobre, la de Jesús de Nazareth, verdadera Justicia para
todos. Así sea. Amén.
TODOS SOMOS TAN
ETERNOS COMO DIOS
En la Biblia se puede leer lo siguiente: “El cuerpo físico se torne a la tierra, y el Espíritu se vuelva a Dios,
que lo dió”, Eclesiastés 12, 7; “La
Verdad nos hace libres”, Juan 8, 32. Para los que no me conocen, les diré
que soy un obrero yesero ya jubilado, nacido en Mallorca. Soy descendiente de
los primeros apóstoles de Jesús de Nazareth que llegaron a Mallorca poco tiempo
después de la muerte de Jesús, cuyo sencillo mensaje ha llegado hasta mí, a mi
familia, de forma oral, de padres a hijos. En la actualidad, con otros obreros
y obreras, somos la iglesia pobre, que no tiene nada que ver con la iglesia
rica, tales como el catolicismo, el protestantismo, etc. que nunca han sido, ni
son, sucesores de los amigos de Jesús, conocidos como los “apóstoles”. Las
enseñanzas de Jesús, y mis propias experiencias espirituales, me están
acercando tanto a Dios, que puedo decir con propiedad, que todas las religiones
organizadas por los hombres sobran, y sobre todo esta iglesia rica que dicen
ser el “cristianismo”, tales como el catolicismo, el protestantismo, etc. los
cuales no tienen nada que ver con Jesús de Nazareth, ni con Dios. Claro está
que en estas organizaciones seguramente que hay personas que viven al Cristo, o
sea, el Espíritu de Dios, en ellos mismos. Lo importante, pues, es estar bien
con Dios, no con las llamadas “iglesias”, dirigidas siempre por gente rica.
Dios no necesita religiones de ninguna clase, pero tampoco lo necesitan los
seres humanos que buscan de verdad a Dios, cada uno en sí mismo. Todos somos
Espíritu; tan eternos como Dios mismo. Para el Espíritu no hay castigos de
ninguna clase, tales como el infierno, el purgatorio, la muerte eterna, el
karma, etc. ya que estas son ideas creadas por los dirigentes religiosos, que
no tienen nada que ver con la Verdad que nos hace libres, de la cual nos habla
Jesús. Cuando el Espíritu toma cuerpo físico en este mundo, o en otro mundo del
infinito Universo, es para aprender, estudiar, crecer espiritualmente, pero si
no crece y pierde el tiempo, tiene que volver a empezar. Lo que estoy diciendo
es el resultado de mi propia experiencia como Espíritu. La Justicia, la Paz, la
Bondad, etc. son Sabiduría de Dios. La humanidad, en este mundo, está dividida
en ricos y pobres, o sea, explotados y explotadores, y esto demuestra
claramente la gran ignorancia que está en la mente de millones de seres
humanos; les falta, pues, la Sabiduría de Dios. Claro está, que me refiero al
Dios Creador y Recreador del infinito Universo, cosa que no entienden los
dirigentes de las religiones, ni los llamados “ateos”, pero los científicos,
cuando buscan en plan serio el origen de la vida, tanto humana, como del
infinito Universo, y hablan de átomos, electrones, protones, iones, etc. se
acercan mucho a la idea de este Dios, y que con propiedad puedo decir que hablo
con El, y lo veo, como Espíritu que soy, pero esta comunión está al alcance de
toda la humanidad en este mundo, y en todos los mundos del infinito Universo.
Esto no es vanidad; es el resultado de la verdadera y única búsqueda de Dios en
mí mismo, en mi propia vida, y que aconsejo a todos los seres humanos, ricos y
pobres, que hagan lo mismo, que busquen a Dios, y serán más personas y menos
animales, ya que Dios da a cada Espíritu un cuerpo físico de la infinita
Naturaleza, para poder vivir en este mundo, y es que al fin y al cabo, todo es
uno, Dios, o Mente Universal, o Padre Eterno, el nombre es lo de menos. Lo
importante, pues, es comprender que todos somos hijos de Dios, y tan eternos
como Dios. Ánimos, pues, seres humanos, buscad a Cristo, o sea, a Dios; este es
el sencillo mensaje de un obrero jubilado. Ánimos amigos.
TODA LA CREACION UNIVERSAL ES
OBRA DE DIOS
Jesús de
Nazareth, el Cristo, dice: “Los dos
principales mandamientos de Dios son: “Ama a Dios por sobre todas las cosas, y
a tu prójimo como a ti mismo”, Mateo 22, 36-40. Soy un obrero yesero ya
jubilado, descendiente de los apóstoles de Jesús de Nazareth que llegaron a
Mallorca, poco tiempo después de su muerte. Su sencillo mensaje ha llegado
hasta nosotros de forma oral, de padres a hijos. En la actualidad, con otros
obreros y obreras, descendientes o no, somos la iglesia pobre, o sea, el
verdadero cristianismo de Jesús de Nazareth, el obrero carpintero. El mensaje
de Jesús es sencillo, dice que, “el reino
de Dios es de los pobres”, y que, “lo
importante es cumplir los mandamientos de amar a Dios y al prójimo como a uno
mismo”. Al vivir la Justicia, la Paz, la Bondad, pues esto es sabiduría de
Dios, practicas de verdad los mandamientos de Dios, Creador del infinito
Universo, y para esto no se necesita ninguna clase de sacerdotes asalariados de
ninguna religión organizada por los hombres. Los obreros y obreras que formamos
la iglesia pobre, no tratamos de entrar en polémica con nadie, pero Jesús de
Nazareth dice: “Lo que oís al oído,
predicadlo desde los terrados”, o sea, que nosotros comprendemos que el
mensaje de Jesús hay que darlo a conocer a todos los demás seres humanos de la
Tierra, a ricos y a pobres. Se comprende muy bien que el día en el que todos
los seres humanos tengan, cada uno en sí mismo, al Espíritu de Dios, al que
llamamos el “Cristo”, cumpliremos todos los mandamientos de Dios, de no matar,
no robar, etc. y esto es ser, de verdad, cristianos de Cristo, o sea, reconocer
que somos hijos de Dios, y hay que vivir lo que nos manda nuestro Padre
Universal, que es Dios. Esto es el Mesías, y cuando todos los seres humanos
obedezcamos a Dios, este mundo al que llamamos “Tierra”, será un paraíso.
Comprendemos que es necesario decir a la gente que no nos conoce, que cuando
decimos “iglesia pobre”, lo estamos diciendo porque existe la “iglesia rica”,
pero el día en el que la iglesia rica deje de serlo, bastará con decir que
somos “cristianos”. Decimos “iglesia” porque nos reunimos en nuestras casas
particulares, porque bien claro nos dice Jesús: “Donde están dos o tres personas reunidas en su nombre, el Cristo está
presente”. No necesitamos, pues, ninguna clase de templos, ni sacerdotes
asalariados. Somos gente obrera, hombres y mujeres, que tanto en Mallorca, como
en otros lugares del mundo, somos apóstoles de Jesús de Nazareth, el Cristo, y
de esta forma sencilla, reconocemos que cualquier ser humano, si vive al
Cristo, o sea, al Espíritu de Dios, el nombre que se le de es lo de menos, es
pues, un apóstol que tiene el derecho y el deber de predicar el mensaje de
Jesús porque lo vive. Repetimos: ”Amar a
Dios por sobre todas las cosas, y al prójimo como a un mismo”, es la ley
Universal de Dios, y para eso no necesitamos ninguna clase de religión, que por
desgracia, sus dirigentes siempre han ido a lo mismo, al poder político y
dinero, y esto no tiene nada que ver con la Bondad que viven muchos seres
humanos. Amigos pobres del mundo, si leéis este mensaje, tratad de comprenderlo
y de vivir la Bondad de Dios. Procurad ser buenos, pero no tontos, pensad con
la cabeza, tened ideas propias, no os dejéis engañar por nadie, pero no odiéis
a nadie. Procuremos todos, amar de verdad a Dios y al prójimo, y a los ricos
les decimos lo que Jesús nos dice: “No se
puede servir a Dios y al dinero”. Ánimos amigos, buscad al Cristo, cada uno
en sí mismo. Así sea. Amén.
SOMOS
FAMILIARES Y SUCESORES DE LOS APÓSTOLES
En Mallorca, algunos obreros y obreras somos la iglesia pobre. Algunos de
nosotros somos descendientes de los familiares y amigos de Jesús de Nazareth,
conocidos como los “apóstoles”. Al principio eran conocidos como los
“nazarenos”, y más tarde como “cristianos”. Los llamados “chuetas”, en
Mallorca, son descendientes de los israelitas que llegaban a Mallorca, antes y
después de la muerte del obrero carpintero Jesús de Nazareth. Unos seguían la
religión de Moisés, y otros, unos pocos, seguían el mensaje de Jesús, cuyo
sencillo mensaje ha llegado hasta nosotros, a nuestra familia, de forma oral,
de padres a hijos. Nuestro cristianismo nunca ha sido lo que predica la iglesia
rica, tales como el catolicismo, el protestantismo, etc. No tenemos nada que
ver con estas organizaciones compuestas de ricos y pobres. Durante nuestra
historia, en Mallorca, todos los nativos de la isla tuvieron su lado tristísimo
con la conquista del rey Jaime y la religión católica, quienes vinieron a
Mallorca de forma oficial, y un poco más tarde llegó la inquisición, obligando
a todos los nativos a ser bautizados, y los que no quisieron fueron
encarcelados, y muchos, quemados, en una hoguera en un terraplén que había muy
cerca del castillo de Bellver, y los que quedaron vivos se vieron obligados a
practicar una religión fuera de sus casas, pero muchas personas, en familia, en
secreto, vivían, unos, la religión de Moisés, y otros, unos pocos, vivían las
enseñanzas de Jesús de Nazareth. En la actualidad, tanto descendientes como no,
somos la iglesia pobre en Mallorca, y en otros lugares del mundo, somos, pues,
el verdadero cristianismo, comprendiendo que en estas llamadas “iglesias
ricas”, seguramente que hay personas que tratan de vivir al Cristo. La iglesia
católica tiene un jefe al que le llaman “papa”, y dicen que es el sucesor de
uno de los apóstoles llamado Simón, al que después le pusieron el nombre de
“Pedro”, pero este apóstol nunca fue jefe de nadie. Pedro fue un apóstol como
los demás. Jesús de Nazareth no le dijo a Pedro: “Tú serás el jefe”. Y eso de
que Jesús dijera a Pedro: “Tú eres
piedra, y sobre esta piedra edificaré mi iglesia”, se ve claramente que es
algo añadido, o que han interpretado mal algunas frases de Jesús, porque el
mismo Jesús nos dice: “Yo soy el Buen
Pastor, mas el pastor asalariado, huye cuando viene el lobo, cuando hay
peligro”. Jesús no fundó ninguna iglesia con pastores asalariados, y al
decirnos: “Cuando estén dos o tres
personas reunidas en el nombre de Cristo, o sea, de Dios, El está presente”,
sobran toda clase de sacerdotes. Precisamente el mensaje de Jesús va contra
toda clase de religión organizada por los hombres, ya que con la oración
tenemos la verdadera comunión con Dios; no necesitamos a ninguna clase de
intermediarios. Los sacerdotes judíos, católicos, protestantes, etc. sobran, no
hacen falta para estar en armonía y comunión con Dios, porque el ser humano que
vive al Cristo, es un verdadero apóstol ya sea hombre o mujer, y con propiedad,
puede decir a los demás que hagan lo mismo. Animos, pobres del mundo, si
queréis ser cristianos de verdad, buscad a Cristo, cada uno en sí mismo; y si
los ricos también quieren ser cristianos de verdad, ya saben lo que Jesús les
dice: “No se puede servir a Dios y al
dinero”. Ánimos amigos, buscad a Cristo. Así sea. Amén.
ES DIFÍCIL PERO NO IMPOSIBLE
VER A DIOS
“Dios vistió
a Adán y a Eva”, Génesis 3, 21. “Dios viste a las plantas, los lirios...”,
Mateo, 6, 28-29. Soy un obrero yesero ya jubilado, descendiente de los primeros
apóstoles de Jesús de Nazareth, que llegaron a Mallorca poco tiempo después de
su muerte, cuyo mensaje ha llegado hasta nosotros de forma oral, de padres a
hijos. Esta tradición y experiencia propia de mi espíritu, me dan a entender,
que ver a Dios es difícil, pero no imposible. Al leer en la Biblia que Dios
está vistiendo a las flores, plantas, y a los seres humanos, comprendo que Dios
“viste” a la Vida. Nosotros, los seres humanos, somos espíritu, y “el vestido”
es el cuerpo humano. Esto podemos aplicarlo a toda la Creación, que es el
infinito Universo. Dios sabe siempre el pasado, el presente y el futuro,
sencillamente porque Dios crea estas cosas. El Espíritu del ser humano, que
está hecho a imagen y semejanza de Dios, cuando vive en el cuerpo físico,
podemos decir que está en la escuela de la Vida, y va estudiando como
comportarse, como crecer espiritualmente, pero si en lugar de estudiar se
pierde el tiempo, y pasan los años, y se deja el cuerpo físico, lo que llamamos
“muerte”, tendrá que volver en otra vida. No hay, pues, ninguna clase de
castigo eterno, ni muerte eterna. No hay que pagar ninguna clase de “karma”,
como algunos dicen, porque todo eso es ridículo. Se comprende muy bien que los
seres humanos que predican estas cosas, están en la ignorancia, y no entienden
nada de las cosas de Dios. ¿Te das cuenta, querido lector de este mensaje? yo,
como un ser humano trabajador y sin estudios de ninguna clase, puedo decir
estas cosas porque con mi oración íntima y con el continuo pensar en Dios, me
acerca tanto a El, que casi lo veo espiritualmente. Pero esto está al alcance
de todos los seres humanos, si aprenden a estudiar en la vida, y no perder el
tiempo. Cuando digo “estudiar”, me refiero a las cosas espirituales, porque
cualquier ser humano, aunque no sepa leer, ni escribir, humanamente hablando,
si vive al Cristo en sí mismo, está en plena comunión con Dios. La iglesia
rica, tales como el catolicismo, el protestantismo, etc. tanto sus jerarquías,
como sus sacerdotes, no han entendido e ignoran por completo el sencillo
mensaje del obrero carpintero Jesús de Nazareth, quien nos dice: “A nadie llaméis Maestro, porque uno es el
Maestro, Cristo, y es el buen Pastor que enseña y guía a todos los seres
humanos que lo buscan de verdad en ellos mismos”. Ver a Dios es difícil,
pero no imposible, y a medida que voy pensando cada vez más en Dios, lo veo de
forma casi total. Dios no es una cosa física o humana, es el gran Espíritu,
creador de todo. Espiritualmente lo veo, y mucha gente en el mundo, al vivir la
Justicia, la Paz, la Bondad, puede decir, con propiedad, lo mismo que yo digo.
Jesús nos dice: “Buscad el Reino de
Dios”, y claro está, que este reino no es ninguna clase de religión
organizada por los hombres, es la vida del Espíritu, y aquí se comprende muy
bien aquello de la Biblia: “Te vestiré
con vestiduras blancas”, porque cuando el Espíritu ha dejado la “vestidura
física”, ya “viste” esta “vestidura de Dios”. Para los ojos físicos, este
Espíritu no está presente, pero está en manos de Dios, y si alguna vez vuelve
otra vez a la Tierra, es para enseñar, para ayudar a los seres humanos, como
hizo Jesús de Nazareth, los apóstoles, y a través de la historia humana, tantos
seres, que como yo mismo, sin ninguna clase de vanidad, puedo aconsejar a los
demás que busquen a Cristo, a Dios, cada uno en sí mismo. Ánimos amigos. Así
sea. Amen.
MI MENSAJE A TODA LA JUVENTUD
MUNDIAL
En la Biblia
podemos leer lo siguiente: “Tú ¡Oh, Dios!
me adoctrinaste desde mi juventud”, Salmos, 71, 17; “Que nadie tenga en poco tu juventud”, I Timoteo 4, 12; “Huye las pasiones juveniles y sigue la
justicia de Dios”, II Timoteo 2, 22. Soy un obrero yesero ya jubilado,
descendientes de los primeros apóstoles que llegaron a Mallorca, poco tiempo
después de la muerte de Jesús de Nazareth. Mi cristianismo no es católico, ni
protestante, es el de Cristo, pues el mensaje de Jesús ha llegado hasta nuestra
familia de forma oral, de padres a hijos, y junto a otros obreros,
descendientes o no, somos la iglesia pobre. No tenemos nada que ver con la
iglesia rica, tales como el catolicismo, el protestantismo, etc. Mi mensaje es,
pues, para todos los jóveneses del mundo. Tanto si trabajáis, como si estáis
estudiando, mi mensaje es que no os dejéis engañar por nadie. El capitalismo
brutal y salvaje que domina el mundo, procura ser más rico cada día, y explotan
a todos los pobres del mundo, armas guerras para que la gente joven se maten
unos a otros, se valen de toda clase de drogas, que proporcionan a todos los
jóvenes, y les importa poco si la juventud se pone enferma o se muere a causa
de esta porquería, tales como drogas de hierba, tabaco, alcohol, etc. Jóvenes
del mundo, procurad pensar por vosotros mismos, procurad no caer en la trampa
de las drogas, del sexo, de las religiones, de los partidos políticos, y procurad
ser libres, pero no tontos. Con vuestra ignorancia, y la de todos los
trabajadores del mundo, los ricos viven bien y tienen toda la riqueza material
en sus manos sin trabajar, y procuran que vosotros, los jóvenes, estéis siempre
pensando en divertiros y no pensar con la cabeza. No se trata, pues, de que
vayáis por la vida haciendo el papel de místicos, pero sí de que os portéis
como seres humanos, viviendo la vida sin estropearla; esto es Sabiduría de
Dios. Os lo digo yo, que a mis 87 años de edad me siento apóstol de Cristo y
estoy muy contento porque nunca me he dejado engañar por nadie. Y vosotros,
chicos y chicas que estáis estudiando, procurad tener las ideas claras, y decid
a vuestros padres, y también a vuestros profesores, que retiren ya de una vez
esta farsa de que al salir de la escuela tengáis que seguir estudiando en
vuestra casa; esto que se llama "Hacer deberes", mientras que la
iglesia católica exige al gobierno que dentro de las escuelas se enseñe su
religión. Si los padres son religiosos, y si no saben cómo hacerlo, que envíen
a sus hijos a la parroquia más cercana, y que los sacerdotes les enseñen la
religión que predican. Pero si no os interesa pertenecer a ninguna religión,
cuando seáis mayores de edad, si estáis metidos en alguna de las tantas
religiones que hay, daos de baja. Yo, como apóstol de Cristo, insisto en
aconsejaros más, que seáis buenos, pero no tontos. El cristiano de Cristo no
pertenece a ningún partido político, ni a ninguna religión organizada por los
hombres, y tampoco coge ninguna clase de armas, pues siempre se trata de lo
mismo, de defender los intereses de los ricos. ¿Os dáis cuenta qué gran negocio
para los dirigentes y jugadores, todo ello a costa de la gente sencilla a la
que le gusta el deporte? Cuando yo digo o repito lo que nos dijo Jesús: “Buscad el reino de Dios, cada uno en sí
mismo”, esto es tener al Cristo, y cuando lo vives, está presente en tu
vida la Justicia, la Paz, la Bondad, en una palabra, tienes ideas propias, “la verdad que nos hace libres”, como dice
Jesús de Nazareth. Jóvenes del mundo, procurad ser libres, y apartaos de toda
clase de esclavitud. Ya hemos dicho antes: "Procurad ser seres humanos de
verdad, y dejemos a los ricos que se porten como aves de rapiña, como animales,
pero sin odiar a nadie. Vosotros, los jóvenes, y todos los pobres del mundo,
procuremos tener las ideas claras, viviendo la vida sin ensuciarla. Vuestro
amigo.
MI CENTRO
CRISTIANO SIEMPRE ES MI FAMILIA
En el Evangelio podemos leer lo siguiente: “Donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy yo en
medio de ellos”, Mateo 18, 20. Soy un obrero yesero ya jubilado
descendiente de los apóstoles de Jesús que llegaron a Mallorca poco tiempo
después de la muerte de Jesús, cuyo sencillo mensaje ha llegado hasta nosotros
de forma oral, de padres a hijos. Puedo decir, con propiedad, que mi centro
cristiano, es y siempre ha sido, mi propia familia. No tenemos, pues, nada que
ver con la iglesia rica, tales como el catolicismo, el protestantismo, etc. que
nunca han sido, ni son, la iglesia pobre de Jesús, el Cristo. Al principio nos
llamaban “los nazarenos”, por ser seguidores de Jesús de Nazareth, y ya más
adelante, nos llamaron “cristianos”, pero el nombre es lo de menos, porque
cuando se vive en y con Cristo, o sea, con lo que llamamos “el Espíritu de
Dios”, vivimos la verdadera comunión con Dios. En nuestra familia, los abuelos,
padres, nosotros y nuestros hijos, en mi caso con una sola hija, siempre hemos
procurado vivir en y con Cristo. No hemos necesitado nunca la ayuda de
sacerdotes asalariados. La iglesia rica, tales como el catolicismo, el
protestantismo, etc. dicen basarse en las enseñanzas de Jesús de Nazareth, pero
en la realidad, practican y predican es todo lo contrario del mensaje de Jesús.
Pero yo siempre estoy repitiendo lo mismo, que no se trata de perder el tiempo
entablando polémicas con nadie; allá ellos, pero sí que tengo el derecho, tanto
mi familia, como los obreros y obreras que formamos la iglesia pobre, todos
tenemos el derecho y el deber de decir a
todos los pobres del mundo, que sin Cristo en uno mismo, en la propia
vida, nadie es cristiano,. La verdadera iglesia de Jesús de Nazareth la
formamos todos los pobres del mundo que procuran vivir al Cristo, pero la
iglesia rica, y sus creyentes ricos, si no hacen lo mismo que nosotros, por
favor, que no se auto-titulen “cristianos”. Jesús nos dice: “Ora, o reza, en secreto a Dios”; este
es el verdadero lenguaje para dirigirnos a Dios: la oración. Reunidos en
familia, aunque sean dos personas, estamos viviendo la verdadera iglesia de
Jesús de Nazareth, pero dos o tres seres humanos, aunque no sean familia, si se
reúnen en nombre de Dios, esto es iglesia. Nuestro deber y derecho, es decir a
las jerarquías y sacerdotes de la iglesia rica y sus creyentes, ricos y pobres,
que si quieren ser cristianos de verdad, busquen a Cristo, cada uno en sí
mismo, pero si no les interesa, que sigan su camino y prediquen lo que
verdaderamente son: paridos políticos que no tienen nada que ver con Dios. El
mensaje de Jesús lo resumimos de la siguiente manera: vivir la Justicia, la
verdadera Paz, y sobre todo, la Bondad, cada uno en sí mismo; esto es Sabiduría
de Dios. Jesús de Nazareth nos enseña que para estar en comunión con Dios no
necesitamos ninguna clase de sacerdotes asalariados. La iglesia rica ha hecho
una mala copia del mensaje de Jesús, pero lo importante es que, tanto los
ricos, como los pobres, comprendan ya de una vez que nosotros, la iglesia
pobre, no hemos copiado nada de la iglesia rica, por lo tanto, todos los ricos,
y también los pobres, del mundo, ya lo saben, si quieren ser cristianos de
verdad, que busquen a Cristo, cada uno en sí mismo, pero si no les interesa,
que vayan a lo suyo, ya que se ve muy bien que las iglesias y religiones, junto
con los demás ricos del mundo van a los suyo, al poder político y al dinero.
Allá ellos; no tratamos de juzgar a nadie. Repito, la verdadera iglesia la
formamos nosotros, y todos los seres humanos que trabajan para vivir y procuran
estar en comunión con Dios. Ánimos amigos, buscad a Cristo. Así sea. Amén.
LOS POBRES, SI
VIVEN AL CRISTO, SON APÓSTOLES
En la Biblia se puede leer lo siguiente: “Jesús de Nazareth escogió a doce apóstoles”, Mateo 10, 2; “Y
después nombró a 72 más”, Lucas 10, 1. Soy un obrero yesero ya jubilado,
descendiente de los primeros apóstoles de Jesús que llegaron a Mallorca poco
tiempo después de la muerte de Jesús de Nazareth, cuyo mensaje ha llegado hasta
nosotros de forma oral, de padres a hijos, y con otros obreros y obreras,
descendientes o no, somos la iglesia pobre. Tenemos el derecho y el deber de
aclarar lo que leemos en los evangelios, referente a los apóstoles. Jesús se
enfrentó con los sacerdotes de su tiempo, los cuales le decían: “Si quieres abrir una sinagoga, tienen que
ser diez personas”, y Jesús les dijo: “Pondré
doce”, pero los sacerdotes no le entendieron, y Jesús les dijo: “Veo que no me entendéis, pues nombraré a
setenta y dos más”; y aquí, los sacerdotes se pusieron rabiosos, porque
entonces sí que entendieron a Jesús con esto de los setenta y dos, porque en la
Cábala judía, el número nueve es la totalidad, es el todo. Pero esto es el
mensaje de Jesús, que todos los seres humanos, si viven al Cristo, o sea, al
Espíritu de Dios, cada uno en sí mismo, ya sea hombre o mujer, se convierte en
verdadero apóstol, y esto es el final de los sacerdotes asalariados de todas
las religiones organizadas por los hombres. Cuando el ser humano vive al
Cristo, vive la Justicia, la Paz, la Bondad, y esto es Sabiduría de Dios, cada
uno en sí mismo, en su propia vida. Buscar al Cristo, o Espíritu Santo, cada
uno en sí mismo, es Sabiduría de Dios; pero buscarlo a través de otros seres
humanos, y seguirles, es ignorancia. Los obreros y obreras, aquí en Mallorca y
en otros lugares del mundo, al vivir al Cristo, cada uno en sí mismo, somos el
verdadero y único cristianismo. La iglesia rica, tales como el catolicismo, el
protestantismo, etc. nunca han sido, ni son la iglesia pobre de Jesús de
Nazareth. Como apóstoles de Cristo, nosotros aconsejamos a las jerarquías y
sacerdotes de la iglesia rica, así como a sus creyentes ricos, que si quieren
ser cristianos de verdad, se aparten de forma total de sus riquezas materiales,
y busquen a Cristo; pero si no les interesa seguir el mensaje de Jesús de
Nazareth, que se dediquen a lo suyo, que siempre ha sido y es, el poder
político y el dinero, pero que no engañen más a la gente. Y vosotros, todos los
pobres del mundo, si queréis estar en armonía y comunión con Dios, buscad, cada
uno en sí mismo, al Espíritu de Dios al que los cristianos llamamos “Cristo”,
el nombre es lo de menos, pero es necesario ya, de una forma definitiva, que
los verdaderos sucesores de los apóstoles de Jesús, incluyendo a Pedro, que
antes se llamaba Simón, que se comprenda que ningún ser humano rico puede ser
apóstol, y mucho menos, cristiano. El Cristo nos enseña, nos inspira y nos
guía, y esto es lo que tienen que hacer todos los seres humanos, si quieren
estar bien con Dios, si de verdad creen en El. El cristianismo no es una
creencia, es la experiencia en la vida, y esto no es para creer, es para vivir.
No somos católicos, ni protestantes, ni una secta más, como se podría creer;
somos los sucesores de los primeros apóstoles, y nuestro deber es dar el
mensaje de Jesús a toda la humanidad, que se reduce a lo que ya dijo Jesús: “Amar a Dios, sobre todas las cosas, y al
prójimo como a uno mismo”. Un fraternal saludo a toda la humanidad, y
nuestra bendición apostólica desde Mallorca. Ánimos amigos.
LOS CRISTIANOS SOMOS POBRES,
PERO TENEMOS A CRISTO
Jesús de
Nazareth dice: “El verdadero Maestro es
Cristo”, Mateo 23, 8-10. Soy un obrero yesero ya jubilado, mallorquín,
descendiente de los apóstoles de Jesús, al cual conocieron personalmente, que
llegaron a Mallorca poco tiempo después de la muerte de Jesús, cuyo mensaje ha
llegado hasta nosotros, a mi familia, de forma oral, de padres a hijos, y junto
a otros obreros y obreras, descendientes o no, somos la iglesia pobre, o sea,
el verdadero cristianismo del obrero carpintero Jesús de Nazareth, el Cristo.
Cuando sientes en ti mismo la Justicia, la Paz, la Bondad, y no sientes odio
hacia nadie, te das cuenta de que esto es Cristo, esto es Sabiduría de Dios, y
con propiedad, puedes decir a los demás que busquen a Cristo. Jesús de Nazareth
dice: “A nadie llaméis maestro, ni padre
espiritual, ni pastor, porque uno es el Maestro, Padre y Pastor, que es Dios”,
el cual nos da su Espíritu, al que los cristianos llamamos "Cristo",
o, "Espíritu Santo", el nombre es lo de menos, lo importante es estar
en armonía con Dios, que es nuestro Padre y Creador. Los cristianos no
necesitamos pertenecer a ninguna religión organizada por los hombres. La
iglesia rica, tales como el catolicismo, el protestantismo, etc. dicen que son
la iglesia cristiana, pero tanto lo que predican, como la forma de vivir de las
jerarquías y sacerdotes, demuestran claramente que no son cristianos de Cristo.
No tratamos de juzgar a nadie, pero tenemos el derecho y el deber de decir a
toda la humanidad que nadie es cristiano, sino vive en sí mismo a Cristo. La
humanidad está dividida en ricos y pobres, o sea, en explotados y explotadores,
pero esto no es cristiano. Nosotros, como cristianos, hacemos un llamamiento a
todos los pobres del mundo, para que busquen a Cristo, cada uno en sí mismo,
para que procuren no traer muchos hijos al mundo, para que no aumentemos más el
número de obreros en paro, de pobres que pasan hambre, o de soldados para las
guerras que organizan los ricos. No esperemos que los ricos hagan Justicia,
mientras les domine el egoísmo. Esperemos en Dios, procurando tener a Cristo,
que es Luz, y cuando hay Luz, se ven las cosas claras. No se trata, pues, de
odiar a los ricos, pero sí de decirles que si quieren ser cristianos, que
busquen a Cristo, y esto no se consigue con estudios de seminario, teológicos,
etc. pero sí con la sencillez de la vida, o sea, la Bondad. La verdadera
oración íntima nos hace comunicar con Dios, y esta es la verdadera comunión con
El que nos ha creado, al que llamamos "Dios". El cristiano no explota
a nadie para hacerse rico, es más, no procura acumular riquezas materiales,
pero sí espirituales; el cristiano no coge ninguna clase de armas para matar al
prójimo en las guerras; Jesús nos dice a todas la humanidad: “Bienaventurados los pacíficos, los limpios
de corazón, y el reino de Dios es de los pobres”, pero comprendemos que no
basta con ser pobres, sino que hay que tener a Cristo. La iglesia pobre, pues,
aconsejamos a todos los pobres del mundo, y también a los ricos, que busquen a
Cristo, cada uno en sí mismo, porque Dios nos ha puesto en este mundo para que
vivamos como seres humanos, no como animales, como fieras que se devoran entre
ellas, y a los demás. Vivamos, pues, la verdadera vida, que es Cristo. Ánimos
amigos, seres humanos que poblamos este mundo, vivamos la verdadera vida, en y
con Dios. Así sea. Amén.
LOS CRISTIANOS ACONSEJAMOS A LA
IGLESIA RICA
Soy un obrero
yesero ya jubilado, descendiente de los apóstoles de Jesús de Nazareth que
llegaron a Mallorca poco tiempo después de la muerte de Jesús, cuyo mensaje ha
llegado hasta mí, de forma oral, de padres a hijos, y con mi propia experiencia
espiritual del Cristo, puedo decir, con propiedad, que junto con otras
personas, descendientes o no, todos somos obreros y obreras, somos la iglesia
pobre, o sea, el verdadero y único cristianismo. Claro está, que seguro que en
otros lugares del mundo también hay gente pobre que vive al Cristo, aunque le
den nombres diferentes. Este mensaje es para aconsejar a las jerarquías y
sacerdotes de la iglesia rica, tales como el catolicismo, el protestantismo,
etc. que si de verdad quieren ser cristianos, que busquen a Cristo, cada uno en
sí mismo. Yo he conocido gente pobre, católicos y protestantes, que procuran
vivir al Cristo. Los dirigentes de la iglesia rica pueden aprender de ellos,
tienen un buen ejemplo, y también pueden acudir a nosotros, y les daremos idea
clara de lo que es ser cristiano de Cristo, que no tiene nada que ver con las
religiones organizadas por los hombres. Las jerarquías y sacerdotes de la
iglesia rica, tales como el catolicismo, el protestantismo, etc. no son gente
pobre, nunca están en el paro obrero, no tienen que pedir limosna para comer,
siempre están repitiendo que “están con los pobres”, pero ellos mismos no son
pobres. Jesús de Nazareth era un obrero, trabajaba de carpintero, y no tenía
más casa que la de sus padres; no era, pues, un hombre rico, no tenía títulos
de ninguna clase, no tenía paga mensual para predicar, es más, no pedía dinero
a nadie, y dice: “Aprended de mi”. Nadie,
pues, es cristiano verdadero si no sigue las enseñanzas de Jesús de Nazareth,
el Cristo. Cualquier ser humano que vive al Cristo, vive la Justicia, la Paz,
la Bondad, y esto es Sabiduría de Dios. El cristiano trabaja para comer y no se
hace rico, porque tiene en cuenta lo que dice Jesús de Nazareth: “No se puede servir a Dios y al dinero”,
“Procurad hacer riquezas en el cielo, no amontonar dinero en la Tierra”. El
trabajo produce riquezas, las cuales se las quedan unos cuantos, y se hacen
ricos. Pero Jesús nos recuerda que los dos principales mandamientos son: “Ama
Dios por sobre todas las cosas, y al prójimo como a ti mismo”, no
dice, pues, “explótalos para hacerte rico”. Con este mensaje no tratamos de
juzgar a nadie, pero tenemos el derecho y el deber de decir a toda la
humanidad, y sobre todo a la iglesia rica, que los dirigentes y dirigidos que
se presentan como “cristianos”, que no lo hagan, por favor, si no viven al
Cristo. Jesús de Nazareth nos dice: “Por
sus frutos los conoceréis”. Nosotros, los cristianos que formamos la
iglesia pobre, comprendemos que las jerarquías y sacerdotes de la iglesia rica,
así como los creyentes ricos, no son cristianos, y seguramente que hay pobres
que piensan en hacerse ricos, y estos tampoco son cristianos. Nadie es pues
cristiano si no vive al Cristo. Los cristianos no necesitamos ninguna clase de
sacerdotes con títulos, estudios de seminario, paga mensual, etc. tampoco
necesitamos templos, monasterios, catedrales, etc. Bien claro lo dice Jesús: “Donde están dos o tres personas reunidas en
nombre de Cristo, o sea, de Dios, El está presente”. Ánimos amigos,
católicos y protestantes, en una palabra, a toda la humanidad: “Buscad a
Cristo, cada uno en sí mismo, y comprended que el nombre es lo de menos;
nosotros decimos “Cristo”, que es Justicia y Paz, y lo más importante, es la
Bondad. Ánimos amigos.
LA ORACIÓN PRODUCE SABIDURÍA
Jesús de Nazareth dice: “Aprended de mí”, Mateo 11,29; “El reino de Dios es de los pobres”,
Lucas 6,20. Soy un obrero yesero ya jubilado, que con otros obreros y obreras,
formamos la iglesia pobre en Mallorca. Cuando digo que la oración produce
Sabiduría, es por mi propia experiencia. Jesús nos dio un ejemplo muy sencillo
con la oración llamada "padrenuestro". Hay que orar o rezar, cada uno
dentro de sí mismo, en secreto; éste es el verdadero y único diálogo que
podemos hacer con Dios; no se trata de palabras dichas de memoria, es cuestión
de pensamientos con nuestro Creador al que llamamos Dios. El Espíritu de Dios
al que llamamos Cristo, es el único y verdadero Maestro y guía que nos enseña y
nos conduce en la vida. Jesús nos dice: “Aprended
de mí”, y vemos que él trabajaba de carpintero y predicaba la Buena nueva a
los pobres, o sea, los que trabajamos para comer, los obreros y obreras, de
ayer y de hoy en todo el mundo. Jesús no era un sacerdote con un sueldo o paga
mensual, él predicaba y no pedía dinero a nadie, no organizó ninguna clase de
negocio, no era un hombre rico, trabajaba para comer, y vivía una vida sencilla
y de continua oración. Yo mismo puedo decir con propiedad: “Aprended de mí”, ya que desde muy joven, siendo casi un niño, he
practicado siempre la oración del espíritu, del pensamiento, y puedo decir con
propiedad, que la oración produce Sabiduría. Yo no tengo estudios, empecé a
trabajar a la edad de nueve años, pero la oración íntima, te hace pensar las
cosas de la vida, y en lo referente a Dios, y empiezas a tener ideas propias, y
te das cuenta de que en este mundo, nuestra humanidad está dividida en ricos y
pobres, y vemos que los ricos lo tienen todo: oro, minas, pozos de petróleo,
armas, sobre todo la bomba atómica, tienen los partidos políticos, todas las
religiones, etc. y los pobres de todo el mundo, no tenemos nada de todas estas
cosas, y gracias si tenemos una casa, una moto, un coche propios, y gracias
también, si tenemos trabajo. Los pobres pues, no podemos armar ninguna clase de
guerra, y cuando un barco va de un país a otro cargado con toda clase de
drogas, eso también es de los ricos. Sin odio pues, a nadie, aconsejamos a
todos los pobres del mundo: Apartaos de los partidos políticos, daos de baja de
la religión, llámese como se llame, y sobre todo, procurad no traer muchos
hijos al mundo mientras los ricos sigan organizando guerras y no exista la
verdadera justicia social en nuestro mundo; es mejor que no nazcan niños
pobres, no aumentemos más el número de obreros en paro, de pobres que pasan
hambre, o de soldados para las guerras que organizan los ricos. Aconsejamos a
todos los pobres del mundo que busquen a Cristo, cada uno en sí mismo, en su
propia vida. Cristo, es el nombre que damos al Espíritu de Dios, el nombre que
le den otras personas es lo mismo; busquemos pues, a Dios en la oración íntima,
y tendremos Sabiduría. Si los ricos quieren hacer lo mismo, que se desprendan
de las riquezas acumuladas explotando a los pobres, que las devuelvan. Ánimos
amigos, procuremos todos, ser más persona y menos animal. Así sea. Amén.
LA ORACIÓN INTIMA ES COMUNIÓN
CON DIOS
Soy uno de los
descendientes de los familiares y amigos de Jesús de Nazareth, el Cristo, que
llegaron a Mallorca poco tiempo después de su muerte. Su mensaje ha llegado
hasta nosotros, a mi familia, de forma oral, de padres a hijos. Soy un obrero
yesero ya jubilado, no tengo estudios de ninguna clase, empecé a trabajar a la
edad de nueve años de aprendiz de herrero, y a los catorce años empecé de
yesero hasta mi jubilación; en la actualidad tengo 87 años de edad. Los
descendientes de los israelitas que llegaron a Mallorca, tanto de los
seguidores de Moisés, como de los seguidores de Jesús de Nazareth, el obrero
carpintero, al principio, dichos seguidores de Moisés eran conocidos como
miembros de la religión judía, y los seguidores de Jesús eran conocidos como
los “nazarenos”, más tarde llamados “cristianos”. Pero cuando la iglesia
católica empezó a dominar Mallorca, todos los descendientes de israelitas,
fuimos conocidos con el mote de “xuetas”. Yo mismo, desde muy joven, empecé a
rezar, o lo que es lo mismo, a orar en secreto, de forma íntima, y con mi
experiencia puedo decir que la oración íntima es comunión con Dios. Ningún ser
humano se atreverá a orar o rezar de forma íntima si no cree, o siente a Dios.
Se puede rezar en voz alta, aparentar que se reza, tomar la llamada “comunión”
en el templo, se puede hacer todo esto, sin creer, ni sentir a Dios, esto es la
farsa, la hipocresía, pero el ser humano que está en sus cabales, no puede
rezar a Dios íntimamente, de forma falsa, hipócrita, sin creer, ni sentir a
Dios. Esto nos da a comprender que el ser humano que se hacer rico, no reza a
Dios de forma íntima, porque nadie se hace rico trabajando, pero sí a costa del
trabajo de los demás, o sea, explotando al prójimo, y Jesús de Nazareth nos
dice que los dos principales mandamientos de Dios son: “Amar a Dios por sobre todas las cosas, y al prójimo como a uno mismo”.
Digo estas cosas como resultado de mi propia experiencia. La oración íntima
no son palabras, son pensamientos, y repito, es imposible rezar sin creer, ni
sentir a Dios. Yo mismo, siempre he pensado que alguien o algo ha hecho posible
mi existencia, pues yo no me he creado a mí mismo. No puedo, pues, negar a mi
Creador, al que llamamos “Dios”, y de esta forma puedo rezar, lo que se dice,
hacer oración, y esta es la verdadera comunión con Dios, y te conviertes en verdadero
apóstol de Cristo, y no necesitas acudir a sacerdotes asalariados para que te
hablen de lo que tú ya vives, que es el Cristo, que es Paz, Justicia, Bondad, y
esto es Sabiduría de Dios. Con mi propia experiencia tengo el derecho y el
deber de decir a toda la humanidad, que los ricos no creen, ni sienten a Dios,
y muchos pobres que con su propio egoísmo también ansían ser ricos, tampoco
creen, ni sienten a Dios. No se trata, pues, de religiones organizadas por los
hombres, sino de la experiencia de vivir en y con Dios, eso es lo que vale y
nos convierte en verdaderos seres humanos que viven la verdadera vida sin
ensuciarla. Conviene que toda la humanidad comprenda lo que estoy viviendo yo
con la oración íntima, que está al alcance de todos, y sólo Dios sabe cuantos
seres humanos viven la verdadera comunión con Dios. Aquí, en Mallorca, somos un
grupo de personas, de gente obrera, que formamos la iglesia pobre de Jesús de
Nazareth, y no tenemos más templo que nuestro corazón, ni más iglesia que
nuestra propia familia y amigos. Aconsejamos, pues, a la iglesia rica, y a
todas las demás religiones, que busquen de verdad a Dios, cada uno en sí mismo,
en la íntima y secreta oración, y se verán los resultados positivos en la vida
de este mundo, con tanta religión y tanta filosofía de partidos políticos, pero
con tanta falta de Dios. Ánimos amigos, meditad a fondo este mensaje.
LA IGLESIA POBRE Y EL
DICCIONARIO ESPAÑOL
En el
diccionario enciclopédico Grijalbo podemos leer lo siguiente:
Católico: “Título honorífico que se daba a los reyes de España”.
Catolicismo: “Iglesia cristiana que, además de recoger el legado de
Jesucristo, acepta la figura soberana de un vicario de este, (el Papa)”.
Protestantismo: “Conjunto de manifestaciones doctrinales e iglesias surgidas de
la reforma de Lutero”.
Cristiano: “Que sigue la fe de Jesucristo”.
Apóstol: “Cada uno de los doce seguidores de Jesús, a los que este ordenó
difundir su doctrina”.
Nazareno: “Jesús por haber vivido allí, según cuenta el Nuevo Testamento.
Apelativo dado a los primeros cristianos”.
Chueta: “En Mallorca, descendiente de judío converso”.
Pobre: “El que
reúne las cualidades de la humildad cristiana”.
Espiritual: “Se aplica a las personas
en las que predomina el espíritu sobre la materia”.
Y Jesús de
Nazareth, el Cristo, dice: “Bienaventurados
los pobres, porque vuestro es el reino de Dios”, Lucas, 6,20. Jesús, el
Cristo, dice: “Donde están dos o tres
congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos”. En la
actualidad, los obreros y obreras, descendientes o no, formamos la iglesia
pobre de Jesús de Nazareth. Nuestro cristianismo es importante por dos cosas.
Una es el haber llegado hasta nosotros el mensaje de Jesús de forma oral, de
padres a hijos, y la otra, la más importante, es la propia experiencia de
nuestro espíritu en comunión con Dios, a través de su Espíritu que los
cristianos llamamos “Cristo”, al que también se le llama “Espíritu Santo”, u
otros nombres que le dan otros seres humanos, en nuestro mundo. Pero lo
importante es comprender que al vivir al Espíritu de Dios en uno mismo, se vive
la Justicia, la Paz, la Bondad, y estas cosas no son creencias, ni dogmas, son
experiencias propias del Espíritu. En una palabra, que el cristianismo de Jesús
de Nazareth no es algo para creer, es vivir. Y claro está, que la vida física,
si no la alimentas con comida física, el cuerpo que la sustenta se muere, y se
dice que “se ha muerto de hambre”. Así, pues, si el Espíritu no se alimenta de
Cristo, es un ser que vegeta, pero no vive. Por eso Jesús “resucitaba a los
muertos”, pero la iglesia rica no ha entendido, o no ha querido entender las
palabras de Jesús, aunque bien claro lo dice el mismo Jesús: “Las palabras que yo os hablo, son espíritu,
la carne para nada aprovecha”. Nosotros, como iglesia pobre, no estamos en
contra de nadie, pero tenemos el derecho y el deber de decir a la iglesia rica,
tales como el catolicismo, el protestantismo, etc. que si quieren ser
cristianos de verdad, tanto las jerarquías, sacerdotes y creyentes ricos, como
los creyentes pobres, que busquen a Cristo, cada uno en sí mismo, y serán
cristianos de verdad. Pero si no les interesa, y quieren seguir siendo lo que
siempre han sido, es decir, partidos políticos, que no se presenten como
“iglesia”. Por favor, no confundáis más a la humanidad. Nosotros comprendemos
que en la iglesia rica, y en otras religiones, hay hombres y mujeres que buscan
al Cristo y tratan de vivirlo de verdad, pero a todos les decimos lo que Jesús
nos dice: “No se puede servir a Dios y al
dinero”. Resumiendo, amigos que formáis la iglesia rica, buscad a Cristo,
si queréis ser cristianos, y contad con nosotros para daros idea de cómo se
hace. Pedimos a Dios que os ilumine a todos, y desde Mallorca, os enviamos
nuestra bendición apostólica. Ánimos amigos.
JUDÍOS, CATÓLICOS, PROTESTANTES
Y CRISTIANOS
Hace dos mil
años, un obrero carpintero, Jesús de Nazareth, el Cristo, estaba dando la buena
nueva a todos los pobres de Israel diciendo: “El reino de Dios es de los pobres”. Pero la gente rica, como los
sacerdotes y políticos, junto con los romanos que dominaban Israel, procuraron
hacer callar a Jesús, y lo crucificaron. Después persiguieron a los amigos de
Jesús, llamados “apóstoles”, hombres y mujeres, y muchos de ellos también
fueron condenados a muerte. Muchos años después de la muerte de Jesús, otra
gente rica, organizó en Roma el llamado “Vaticano”, o sea, la iglesia católica
con su jefe al que llaman “papa”, y su jerarquía y sacerdotes, admitiendo a
ricos y a pobres como feligreses. Siglos después, en Alemania, un sacerdote
católico, Martín Lutero, se separó del catolicismo y empezó el llamado
“protestantismo”. Vemos, pues, que los ricos judíos mataron a Jesús porque les
estropeaba el negocio, sobre todo el Sanedrín y los sacerdotes. Y las
jerarquías y sacerdotes católicos y protestantes ensalzan a Jesús después de su
muerte, porque les va muy bien para su negocio. Resumiendo, que viviendo Jesús,
no les va bien a los ricos de Israel, pero muerto Jesús, es el gran negocio del
catolicismo y protestantismo. De esta forma, han podido hacer “resucitar” a
Jesús, hacerlo Dios, y llegando más lejos, hacer de la madre de Jesús, la
“madre de Dios”. Pero este mensaje no es para juzgar a nadie, sino para dar la
idea clara a todos los pobres del mundo, de lo que es el verdadero
cristianismo. Aquí en Mallorca, unos cuantos obreros y obreras somos la iglesia
pobre de Jesús de Nazareth. Algunos somos descendientes y sucesores de los
apóstoles que llegaron a Mallorca poco tiempo después de la muerte del obrero
carpintero Jesús de Nazareth. El mensaje de Jesús es muy sencillo, se trata de
buscar a Dios, cada uno en sí mismo, o sea, a su Espíritu, al que llamamos
“Cristo”, y al vivirlo, vives la verdadera Justicia, Paz, y Bondad, que es Sabiduría de Dios. Vives
estos sentimientos, y te conviertes en un verdadero apóstol, y con propiedad,
puedes decir a los demás que hagan lo mismo. Seguramente que en el judaísmo,
catolicismo, y protestantismo, hay personas de buena fe que viven en y con
Cristo, con Dios; esta es la verdadera comunión con Dios, nuestro Padre y
Creador del infinito Universo.
Yo soy un obrero yesero ya jubilado, uno
de los descendientes de los apóstoles que llegaron a Mallorca, y de forma
personal puedo decir que no comprendo que los sacerdotes judíos no aceptaran a
Jesús como el Mesías. Se habla mucho de la sabiduría judía, pero de haber
reconocido a Jesús como el Mesías, hoy lo tendrían monopolizado en Israel, y no
existirían la iglesia católica, ni las iglesias protestantes. Pero nosotros,
los pobres que formamos la iglesia de Jesús de Nazareth, en Mallorca y en otros
lugares del mundo, al tener y vivir al Cristo, podemos decir, con propiedad,
que los ricos judíos, católicos, protestantes, etc. no tienen, ni han tenido
nunca al Cristo, o sea, al Mesías, y que nosotros, los pobres, como iglesia,
podemos decir a toda la humanidad, con orgullo, pero con Sencillez y Bondad.
que lo tenemos y lo vivimos, y aconsejamos a todos los seres humanos del mundo,
que lo busquen, cada uno en sí mismo; los pobres quitándose de la mente la
ambición y el egoísmo material, y los ricos devolviendo las riquezas materiales
si quieren ser, todos ellos, cristianos. Ánimos amigos, todos los seres humanos
del mundo, buscad a Dios, cada uno en sí mismo, y al tener al Mesías, nuestro
mundo será un paraíso. Así sea. Amén.
JESUS DE NAZARETH DICE: “APRENDED DE MI”
En el
Evangelio podemos leer lo siguiente: Jesús dijo: “Yo te alabo Padre, Señor del Cielo y de la Tierra, porque has ocultado
estas cosas a los “sabios y discretos”, y las has revelado a los pequeñuelos.
Sí, Padre, porque así te plugo. Todo me ha sido entregado por mi Padre, y nadie
conoce al Hijo sino el Padre, y nadie conoce al Padre sino el Hijo, y aquél a
quien el Hijo quisiere revelárselo. Venid a mí todos los que estáis fatigados y
cargados, que yo os aliviaré. Tomad sobre vosotros mi yugo, y aprended de mí,
que soy manso y humilde de corazón”, Mateo 11, 25-30. La nota aclaratoria
que sobre estos versículos hace el Vaticano católico, es la siguiente: “Maravilloso desahogo de Jesús con su Padre
acerca de los planes de su Providencia. El Reino de los Cielos es de los
pobres; de los que presumen de “sabios”, la reprobación”. Tanto estos
versículos, como la nota, están copiados de la Biblia católica versión
Nácar-Colunga.
Soy un obrero
yesero ya jubilado, descendiente de los primeros israelitas cristianos que
llegaron a Mallorca poco tiempo después de la muerte del obrero carpintero
Jesús de Nazareth, cuyo sencillo mensaje ha llegado hasta nuestra familia de
forma oral, de padres a hijos, y junto a otros obreros y obreras, descendientes
o no, somos la iglesia pobre, la de Jesús de Nazareth, el verdadero y único
cristianismo, que siempre ha estado, y está compuesto de obreros y obreras, o
sea, de gente pobre, que al vivir en nosotros mismos al Cristo, podemos decir,
con propiedad, a las jerarquías y sacerdotes de la iglesia rica, tales como el
catolicismo, el protestantismo, etc. que si quieren ser cristianos de verdad,
busquen a Cristo, cada uno en sí mismo, en su propia vida. Si no saben como
hacerlo, que acudan a nosotros, que con Sencillez y Bondad, les daremos ideas
claras y sencillas. Que no olviden nunca que Cristo es Paz, Justicia, Bondad,
esto es Sabiduría de Dios. Sabemos que en Israel mismo hay gente sencilla,
trabajadores, que siguen a Jesús de Nazareth, el Mesías, y aquí, en Mallorca,
como ya dije antes, somos la iglesia pobre de Jesús. Yo diría que pareciera
como que tuviéramos dos ciudades simbólicamente llamadas Jerusalem, una en
Israel, y la otra en Mallorca, pero claro está, que en cualquier lugar del
mundo, cualquier ser humano pobre, ya sea hombre o mujer, y tanto si es una
sola persona, como si es una familia, si viven al Cristo, son otra Jerusalem.
Estamos satisfechos de que la iglesia rica, tales como el catolicismo, el protestantismo,
etc. reconozcan que el Reino de Dios, la verdadera iglesia de Jesús de
Nazareth, somos los pobres que la formamos y procuramos vivir al Cristo, el
cual es Paz, Justicia, Bondad, esto es Sabiduría de Dios. Repetimos,
aconsejamos a las jerarquías, sacerdotes y creyentes de la iglesia rica, que si
quieren ser cristianos de verdad, busquen a Cristo, cada uno en sí mismo, y
tantos las jerarquías, como los sacerdotes y los creyentes ricos, que no estén
avergonzados si tienen que acudir a nosotros, los pobres, pero apóstoles de
Cristo. Si de verdad quieren estar en comunión con Dios, yo, personalmente,
hago un fraternal llamamiento a todas las jerarquías y sacerdotes católicos y
protestantes, y en particular a los teólogos de España, como Miret Magdalena,
el cual ya nos conoce personalmente porque ha venido a nuestra propia casa,
repito, que no se avergüence nadie de acudir a nosotros, los pobres que vivimos
al Cristo. Si de verdad quieren saber cómo encontrarse con Cristo, el Espíritu
de Dios, cada uno en sí mismo, ánimos amigos, podéis contar con nosotros, que
sin ninguna clase de vanidad, pero con orgullo espiritual, nos presentamos al
mundo como lo que somos: apóstoles de Cristo, y esto está al alcance de toda la
humanidad. Un fraternal saludos desde Mallorca.
JESÚS DE
NAZAREH Y LA RESURRECCIÓN
“El polvo se torne a la tierra como
era, y el Espíritu se vuelva a Dios que lo dio”, Eclesiastés 2, 8; “Jesús, clamando a gran voz, dijo: Padre, en tus manos encomiendo mi
espíritu”, Lucas 23, 46; “El espíritu
es el que da la vida, la carne nada aprovecha”, Juan 6, 63; “Nosotros somos los que servimos en espíritu
a Dios, y nos gloriamos en Cristo Jesús, no teniendo confianza en la carne”,
Filipenses 3, 3; “Si Cristo no resucitó,
vuestra fe es vana”, 1 Corintios 15, 17; “Porque en la resurrección, ni los hombres tomarán mujeres, ni las
mujeres maridos, más son como los ángeles de Dios en el cielo”, Mateo 22,
30.
Nosotros, los obreros y obreras que formamos la iglesia pobre, tenemos todo
esto muy claro, y vemos como la iglesia rica, llámese como se llame, hace y
deshace todo lo que quiere de la Biblia, haciendo que Pablo se contradiga en
los distintos versículos, ya que en una carta le hacen decir que no confía en
la carne, y en otra le hacen decir que sí, que si Cristo no resucitó, toda la
fe es vana; entonces, ¿en qué se queda la fe de la iglesia rica con estas
contradicciones? Pero nosotros, los que formamos la iglesia pobre, nos atenemos
a las palabras del profeta que dice: “El
espíritu vuleve a Dios que lo dio”, y sobre todo, nos atenemos a las
palabras que dice Cristo por boca del obrero carpintero Jesús de Nazareth: “En la resurrección seremos como ángeles”, por
lo tanto, somos espíritus, y claro está que el espíritu no tiene un cuerpo
físico con sus necesidades fisiológicas humanas, por lo tanto, nada de
resucitar el cuerpo físico. Pero con este mensaje no tratamos de polemizar con
nadie, porque tenemos las cosas muy claras referente a Dios, y comprendemos muy
bien las palabras de Jesús cuando nos dice en la oración del Padrenuestro: “Hágase tu voluntad, así en la Tierra, como
en ele cielo”, por lo tanto, si hay un paraíso, o una resurrección, o si no
hay un paraíso, ni una resurrección, en una palabra, que tanto si hay premio,
como si no hay premio, damos gracias a Dios, y el egoísmo se queda en la
religión rica de los ricos. Y como siempre, terminamos este mensaje aconsejando
a todos los pobres del mundo que busquen al Espíritu de Dios, al Cristo, cada
uno en sí mismo, y si alguien quiere dar un paso más adelante, que se aparte de
la religión de los ricos, dándose de baja de ella, y que no traiga muchos hijos
al mundo. Ánimos amigos. Así sea. Amén.
EL VERDADERO
MAESTRO ES EL CRISTO O ESPIRITU DE DIOS
En el llamado “Antíguo Testamento” de la Biblia se puede leer lo siguiente:
“El Espíritu del Señor habló por mí, su
palabra ha estado sobre mi lengua”, II Samuel 23, 2; y en el llamado “Nuevo
Testamento” se dice lo siguiente: “Sucederá
en los postreros días, dice el Señor, que yo derramaré mi Espíritu sobre todos
los hombres, y profetizarán vuestros hijos y vuestras hijas, y vuestros jóvenes
tendrán visiones, y vuestros ancianos revelaciones en sueños”, Hechos de
los Apóstoles 2, 17; “Porque la profecía
no fue en los tiempos pasados traída por voluntad humana, sino que los santos
hombres de Dios hablaron, siendo inspirados del Espíritu Santo”, II Pedro
1, 21; y dice Jesús de Nazareth: “El
Espíritu es el que da vida, la carne nada aprovecha; las palabras que yo os he
hablado, son Espíritu y son vida”, Juan 6, 63; “Pero cuando viniere aquél Espíritu de Verdad, él os guiará a toda
Verdad”, Juan 16, 13; “Porque no sóis
vosotros los que habláis, sino el Espíritu de vuestro Padre el que habla en
vosotros”, Mateo 10, 20; “Mas
vosotros no queráis ser llamados “rabí”, porque uno es vuestro Maestro, el
Cristo, y todos sóis hermanos”, Mateo 23, 8; “No seáis llamados maestros, porque uno es vuestro Maestro, el Cristo”,
Mateo 23, 10. Vemos, pues, claramente en la Biblia, que Dios es el que lo
dirige todo, su Espíritu está en todos y en todo, es el que nos alienta, nos
enseña, nos guía, es nuestro verdadero Padre y Maestro. Todos los seres humanos
que ha través de la historia de la humanidad han escuchado y obedecido la voz
de Dios, lo han hecho sin religiones, sin sectas, etc. es más, tanto Budha,
como Jesús de Nazareth, fueron mal vistos, y hasta perseguidos por las
religiones de su tiempo. Es como en las escuelas, universidades, etc. el alumno
aprende, pero después tiene que ser él mismo el que tiene que llevar a la práctica
lo que le han enseñado, por ejemplo, en Bellas Artes, se aprende a pintar, pero
después, el artista tiene que dejar de lado la Academia y crear arte. El
verdadero ser espiritual avanza, aprende, evoluciona, y se salva obedeciendo
siempre al Cristo, o Espíritu de Dios que está en él. Ya en otros mensajes míos
he dicho que todos los seres humanos somos hijos de Dios, por lo tanto,
hermanos. Ahora bien, podemos colaborar entre todos, ayudarnos, tener
intercambio de ideas, etc. pero no olvidar nunca que EL VERDADERO MAESTRO ES
CRISTO; nadie, pues, debe ser escuchado, si quiere interponerse, o sea, hacerse
pasar por maestro, ya que el que se presenta como maestro, usurpando el sitio
de Dios, es más digno de lástima, que de odio, ya que son seres inferiores, y aún
no han avanzado lo suficiente como para poder comprender que el verdadero
Maestro es el Espíritu de Dios, Cristo. Todas las religiones, pues, y en
particular la llamada “cristiana” tan dividida en sectas, tienen muchos falsos
maestros, falsos profetas, etc. ya que el verdadero cristiano trata de ayudar a
los demás seres humanos, pero no para atraerlos a la religión organizada por
los hombres, sino al Maestro, el CRISTO.
CARTA ABIERTA AL PAPA CATÓLICO
Me llamo
Cayetano Martí Valls, nacido en Inca, Mallorca, soy un obrero yesero ya
jubilado y no tengo estudios; pues empecé a trabajar a la edad de 9 años de
aprendiz de herrero, hasta la edad de 14 años, que empecé de yesero hasta mi
jubilación. Soy descendiente de los primeros israelitas cristianos que llegaron
a Mallorca muy poco tiempo después de la muerte de nuestro Rabí, el obrero
carpintero Jesús de Nazareth el Cristo, y sus sencillas enseñanzas han llegado
hasta mí, de forma oral de padres a hijos. Esto ocurrió en unas pocas familias,
ya que la mayoría de los israelitas llegados a Mallorca seguían la religión de
Moisés. Yo soy uno de los pocos descendientes de los que quedaron vivos después
de la matanza hecha por la inquisición católica y con la llamada “conquista”,
por el rey Jaime I. Pero esta carta mensaje, es para ti como jefe de la
organización católica, para darte idea clara de nuestro cristianismo,
conservado por unos pocos descendientes, conocidos en Mallorca con el mote de
“chuetas”, somos pues con otros amigos, chuetas o no, la Iglesia Pobre, en la
actualidad el único cristianismo en el mundo. Y claro está, que la organización
católica que tu diriges o presides no es el cristianismo de Cristo, porque es
una organización compuesta de ricos y pobres, o sea, unos creyentes que se
hacen ricos a costa del trabajo de otros creyentes, burlándose así de Dios y
del prójimo, pues Dios dice, “Ama a tu
prójimo como a ti mismo” y los sacerdotes se callan y tampoco dicen nada de
las guerras que organizan los ricos, está pues muy claro que el catolicismo no es
cristianismo. Pero tampoco es cristiano el protestantismo de Lutero, ya que
actúan igual que el catolicismo. Y amigo, comprendemos que tanto en el
catolicismo como en el protestantismo hay hombres y mujeres que encontraron a
Cristo, en sí mismo, en su propia vida, pero estas personas pertenecen a la
Religión Universal de Dios, la Iglesia Pobre. Ánimo amigo Papa católico, como
puedes ver no nos metemos en tonterías, como esto de, tu eres Pedro, el jefe,
etc. ya que hay algo mucho más serio, más importante, repitiendo lo que dijo el
apóstol Pablo a unos supuesto seguidores de Cristo, ¿y tu como jefe del
catolicismo y tus seguidores, habéis recibido el espíritu santo?, el
catolicismo y el protestantismo, como organización demostráis claramente que
no. Así pues nosotros, los obreros y obreras que formamos la Iglesia Pobre, os
aconsejamos a todos que busquéis a Cristo, cada uno en sí mismo, en su propia
vida y formaréis parte con nosotros en la única Religión de Dios, o sea, la
Iglesia Pobre. Amigo Papa o jefe católico, nosotros tenemos las ideas muy
claras, comprendemos que no basta con ser pobre para ser cristiano, ya que sin
Cristo en sí mismo, en la propia vida, nadie es cristiano, por pobre que sea o
por muchos estudios o dinero que tenga. Ánimos amigos, todos, buscad a Cristo.
Así sea. Amén. (Noviembre).
EN MALLORCA HAY UN CENTRO
ESPIRITUAL DEL MUNDO
Soy un obrero
yesero ya jubilado, descendiente de algunos apóstoles de Jesús de Nazareth, que
llegaron a Mallorca poco tiempo después de la muerte de Jesús, cuyo mensaje ha
llegado hasta mí, de forma oral, de padres a hijos, y junto con otros obreros y
obreras, somos la iglesia pobre, somos, pues, el verdadero cristianismo. Somos
un centro espiritual, en Mallorca, para todo el mundo, comprendiendo que en el infinito
Universo, el centro está en todas partes, porque su Creador, que es Dios, lo es
todo. Un grupo de personas reunidas, una sola familia, o sencillamente, un ser
humano, hombre o mujer, si vive en sí mismo al Espíritu de Dios, al que
llamamos “Cristo”, es un centro espiritual, que con su modo de vivir la
Justicia, la Paz, la Bondad, es un ejemplo vivo para las demás personas, sobre
todo para las que viven en la oscuridad, o sea, en la ignorancia de la
verdadera vida humana, que es espiritual, porque Dios nos ha creado a todos, y
claro está, que todos somos hijos de Dios. Jesús de Nazareth dice: “El reino de Dios es de los pobres”, y
comprendemos que este “reino de Dios” hay que buscarlo cada uno en sí mismo. El
verdadero Maestro es Cristo, y es el buen Pastor que nos enseña y nos guía a
través de la vida. Resumiendo, el mensaje de Jesús, el Cristo, es que para
estar en comunión con Dios, se consigue con la verdadera e íntima oración, y no
se necesita ninguna clase de sacerdotes asalariados de ninguna religión
organizada por los hombres. El ser humano que vive esta comunión con Dios es un
verdadero centro espiritual para los demás seres humanos, y cuando todos lo
comprendan y vivan la Bondad de Dios, toda la humanidad de este mundo tendrá la
presencia individual del Mesías; este es el “paraíso” que necesitamos en este
mundo.
La
humanidad está dividida en ricos y pobres, y esta injusticia social está
protegida por los gobiernos, y bendecida por todos los dirigentes de todas las
religiones. Trabajando nadie se hace rico, pero sí a costa del trabajo de los
demás, y Dios dice: “Ama a tu prójimo
como a ti mismo”, no dice: “Explótalo para hacerte rico”. Nosotros, como
iglesia pobre en Mallorca, aconsejamos a todos los pobres del mundo que
procuren no traer muchos hijos al mundo; no aumentemos más el paro obrero,
gente que pasa hambre, soldados para las guerras que organizan los ricos;
seamos buenos, pero no tontos. La Sabiduría del Cristo, que es Dios, nos
inspira estas ideas sencillas, y como verdaderos cristianos, y como centro
espiritual, podemos decir estas cosas, porque nos inspira Cristo. No odiamos a
los ricos, los compadecemos porque sufren la gran enfermedad que es el egoísmo,
pero tenemos el derecho y el deber de decir a los ricos que busquen a Cristo,
cada uno en sí mismo, y quedarán sanos de esta terrible enfermedad, y a los
pobres que piensan en hacerse ricos, que también busquen a Cristo, cada uno en
sí mismo, como prevención al terrible mal que padecen muchos seres humanos que
aman más al dinero, a las riquezas materiales, que a la Bondad, que es un don
de Dios, y la Bondad es más importante que todas las creencias religiosas,
porque puede alcanzar y alcanza a creyentes y no creyentes en Dios. Esto es el
centro espiritual, que de forma individual, como un obrero ya jubilado, yo os
digo estas cosas, que también las dicen, las sienten, los obreros y obreras que
formamos la iglesia pobre en Mallorca, siendo el verdadero cristianismo,
sabiendo y comprendiendo que también existe en otros lugares del mundo. Ánimos
amigos; procurad ser centro espiritual, aunque algunos no creáis en Dios, pero
vivid la Bondad, que al fin y al cabo, esto es Dios. Saludos desde Mallorca.