CRISTO Y SU IGLESIA
Dice el
profeta Sofonías, “Y dejaré en medio de
ti un pueblo humilde y pobre los cuales esperarán en el nombre de Dios”,
Sofonías 3-12. Y viene Jesús de Nazareth, un obrero carpintero, se aparta de la
religión de los ricos, escoge a doce obreros, después a setenta y dos más, y
dice a uno de ellos llamado Simón , “más
yo te digo que tú eres Pedro, (piedra), y sobre esta piedra yo edificaré mi
iglesia”. Mateo 16-18. Y el apóstol Pedro comprende muy bien todo esto, él
no se considera jefe, pero sí piedra de la iglesia, por eso dice después en una
de sus cartas, “Vosotros también como
piedras vivas, sed edificados una casa espiritual, y un sacerdocio santo”, Primera
Pedro 2-5. Y en los hechos de los apóstoles podemos leer lo siguiente, “Entonces viendo la constancia de Pedro y de
Juan, sabido que eran hombres sin letras, e ignorantes, se maravillaban, y les
conocían que habían estado con Jesús”. Hechos 4-13. Y de Jesús se decía: “No es éste el carpintero, hijo de María,
etc., y se escandalizaban en él”. Marcos 6-3. Jesús dice: “Bienaventurados vosotros los pobres, porque
vuestro es el Reino de Dios”. Lucas 6-20. De forma clara y sencilla vemos
lo que es la iglesia de Cristo, es la iglesia pobre; tanto el catolicismo como
el protestantismo con todas sus sectas, no tienen nada que ver con la iglesia
de Cristo. No valen, no sirven los
argumentos teológicos de unos y de otros, tanto los papas que se auto titulan
sucesores de Pedro, como los demás jefes protestantes, con sus fundadores
salidos del papado, etc. La iglesia de Cristo es pobre, formada por obreros
(hombres y mujeres) sin estudios religiosos, sin poder político, sin dinero,
sin jerarquía, sin catedrales, sin templos, etc. La riqueza material no tiene
nada que ver con Cristo, los verdaderos apóstoles de Cristo eran, y son los
obreros, los pobres que tratan de vivir en y con Cristo; no se necesitan
estudios de seminario para predicar el evangelio, lo predica quien lo vive,
dice el apóstol Pablo, “No vivo ya yo,
sino Cristo vive en mí”. Gálatas 2-20. Y Pablo trabajaba como los demás
apóstoles, para poder comer y no ser una carga para nadie, dice Cristo, “No se puede servir a Dios y al dinero”.
Mateo 6-24. Los ricos pues, ya saben lo que tienen que hacer, si quieren ser
cristianos de Cristo. Nosotros, la iglesia pobre de Mallorca, lo resumimos de
esta forma, “La iglesia verdadera en cada
casa obrera y Cristo en el corazón”, esto es todo. Y los que somos descendientes de los primeros
cristianos israelitas que vinieron a Mallorca, comprendemos muy bien que todos
los obreros y obreras, los pobres del mundo, pueden ser si lo desean,
sacerdotes y apóstoles de Cristo, si se apartan de la religión de los ricos. Y
si de entre todas las filosofías, religiones, etc., hay obreros y obreras que
quieren seguir a Cristo, tienen el derecho y el deber de presentarse al mundo,
como verdaderos apóstoles de Cristo, como lo hacemos nosotros la iglesia pobre.
Un fraternal saludo para toda la
humanidad. (Enero).
EL APOCALIPSIS O REVELACIÓN
Ayer Juan, hoy
Cayetano, aclaro lo más importante de la revelación profética del libro de la
Vida, la Biblia de Dios; estamos en año 1990, dentro de poco estaremos en el
año 2000 desde la gran revelación de
Cristo, en el obrero carpintero Jesús de Nazareth, los científicos encontrarán
la explicación, o fuente de la materia Universal, pero a nosotros nos es dado
dar ya, por ser el momento, la explicación del Espíritu, o sea Dios. Lo que
llamamos físico: animal, vegetal, mineral son tres materias que forman un
triangulo, que llamamos naturaleza. El Amor Infinito, la Sabiduría Infinita, y
el Poder Infinito, forman otro triángulo que llamamos Dios, y los dos
triángulos forman la estrella; ahora bien, lo que anima la materia es el
Espíritu, en el caso humano somos todos hijos de Dios, y cuando Cristo dice, “Más el Hijo del hombre no tiene donde
recostar su cabeza”, nos aclara que el hombre es el Espíritu, hijo de Dios,
y cuando el Espíritu se da cuenta de su procedencia, no se entretiene acumulando
cosas materiales, esto queda para los espíritus atrasados, los que aún no han
despertado, resucitado a la Verdadera Vida. No hay que olvidar las palabras de
Cristo: “Las palabras que os hablo, son Espíritu, la carne nada tiene que ver
en esto”, y de esta forma se aclara nuestra vida como espíritu en el Infinito
Universo, ya que hay otras casas o mundos para todos, y la nueva Jerusalén en
este mundo Tierra, es para todos los habitantes, pero la Gran Jerusalén es la
Universal, es la Infinita, es el cielo de Dios. Todas las religiones humanas
son el parvulario del Espíritu, para que entre a formar parte de la Religión de
Dios. Al que vence, Cristo le da una vestidura blanca y entra en la Fraternidad
Universal. En nuestro mundo Tierra ya está llegando el gran momento de la
resurrección del Espíritu, y que la religión humana confunde con el cuerpo
físico. Y los dos testigos que van vestidos de saco, son los hombres y mujeres
pobres del mundo, son los que siempre han esperado y confiado en Dios, y que ya
ahora se dan a conocer como iglesia pobre. Por fin empieza un nuevo Cielo y una
nueva Tierra para nuestro mundo. Aún sucederán algunas cosas negativas, pero ya
estamos entrando en la Jerusalén nueva,
es el fin de la religión de los ricos; el Espíritu empieza a vivir la verdadera
Vida, como iglesia pobre de Cristo, en nuestro mundo gracias a Dios. Ya es el
momento de comprender que es el Espíritu, o sea, Dios que crea y recrea mundos,
soles, estrellas, seres humanos, plantas, animales, etc. Y nosotros como espíritus
somos su imagen, somos sus hijos. Estar, pues, en y con Dios es el objetivo de
la vida espiritual y física para todo el Infinito Universo. Y el libro de la
vida, la Biblia de Dios, está al alcance de todos, hombres y mujeres que
busquen de verdad a Cristo, o sea, el que vence y mata la bestia que lleva
dentro, y hace renacer el ángel, que simbólicamente está escrito en el
Apocalipsis, y que ahora de forma sencilla revelamos, con este mensaje. Bendito
sea Dios, ánimos y adelante iglesia pobre. (Enero).
CREDO DE LA IGLESIA POBRE
Creemos que
Dios es el creador y recreador del Infinito Universo. Creemos que todo tiene
vida y que la muerte es transformación. Creemos que todos somos hijos de Dios.
Creemos que Dios es infinitamente sabio, justo y poderoso. Creemos que Dios no
castiga a nadie, y nos da muchas oportunidades en éste y en otros mundos,
reencarnando todas las veces que sean necesarias. Creemos que Cristo, Espíritu
de Dios, se manifiesta en los seres vivientes, por lo tanto en los seres
humanos. Creemos que además de manifestarse en los profetas, personas
espirituales, etc.,en la historia humana, lo ha hecho de forma definitiva en un
obrero carpintero: Jesús de Nazareth, al que llamamos el Cristo. Creemos que
Jesús reunió a un pequeño grupo de obreros y obreras pobres del mundo, para
seguirle. Creemos, pues, que dicho grupo es la verdadera iglesia de Cristo.
Creemos que la verdadera iglesia de Cristo que nació en Israel, fue dividida y
abolida. Creemos que la prueba de la destrucción de la primitiva iglesia, está
en el catolicismo, la cismática griega y rusa, y el protestantismo con todas
sus sectas. Creemos que algunos cristianos israelitas que Rabí, llegaron a
España, sobre todo Mallorca, son los
verdaderos seguidores del Jesús de Nazareth, que le vieron y escucharon.
Creemos que unos pocos conservaron las sencillas enseñanzas de Jesús de Nazareth, y las transfirieron de
padres a hijos de forma oral. Creemos pues, que ahora, los que hemos restaurado
la iglesia pobre de Cristo, los descendientes de aquellos israelitas, somos la
iglesia verdadera. Creemos que en el Apocalipsis o revelación, Juan el apóstol
nos da idea clara de la séptima iglesia y del séptimo sello. Creemos pues, que
ya ha llegado el fin de las iglesias de los ricos. Creemos que ya ha renacido
el verdadero cristianismo, es la restauración de la iglesia pobre, formada por
obreros y obreras pobres del mundo. Creemos que los llamados ritos, ceremonias,
sacramentos, etc. De las iglesias de los ricos, no tienen nada que ver con
Cristo. Creemos que bautizar, celebrar la cena de Jesús con los apóstoles, etc.
podemos hacerlo de forma sencilla nosotros los obreros que formamos la iglesia
pobre. Creemos que todos los obreros y obreras del mundo, pueden si lo desean,
ser sacerdotes y apóstoles de Cristo, si abandonan sus riquezas materiales.
Creemos pues, que el camino de Dios está abierto para todos, pero hay que tomar
nuestra cruz y seguir al único y verdadero Maestro y Pastor, Cristo. Creemos
que ya no puede estar más claro que la única y verdadera iglesia de Cristo es
pobre. Creemos que todo lo que está ocurriendo en el mundo, en la humanidad, es
prueba clara que solamente en Cristo hay la verdadera solución y salvación para
todos los seres humanos. Creemos que solo el Amor de Dios es lo que necesitamos
todos los seres humanos. Creemos, pues, que esta pequeña iglesia pobre en
Mallorca, puede ser y es modelo para todos los seres humanos, si de verdad
quieren seguir a Cristo y ser sus verdaderos sacerdotes y apóstoles. (Enero).
NI CAPITALISMO NI COMUNISMO
Aclaremos un
poco más lo que es la iglesia pobre, la de Cristo, la única. No somos una secta
más, pero hemos hecho posible el renacer del cristianismo primitivo, el de
Cristo. Vemos ya de forma definitiva que ni el capitalismo, ni el comunismo, ni
el socialismo, etc. sirven para solucionar los graves problemas de la
humanidad, sobre todo de los obreros y obreras, los pobres del mundo. Vemos
estos días como se tambalea todo, regímenes de un lado y de otro y tanto los
países llamados democráticos, como los llamados socialistas o comunistas, no
son la solución, y esto que por todas partes abundan las religiones, pero éstas
estropean más la situación. Mientras en el mundo existan ricos y pobres,
explotados y explotadores, no habrá paz ni modo de vivir de forma normal. El
egoísmo es el gran peligro para todos los seres humanos, mientras los obreros,
los pobres del mundo, sientan ansias de hacer dinero, de enriquecerse, y los
ricos no quieran desprenderse de sus riquezas materiales, el mundo, la humanidad
empeorará más cada día, pero si se frena el egoísmo, habrá solución. Por
ejemplo, si los capitalistas, empresarios, comerciantes, etc. hacen partícipes
de los beneficios a los obreros, la cosa cambiará por completo, y las ansias de
hacerse rico desaparecerá. Pero todo
ésto no se consigue con religiones, creencias, dogmas, etc. ni tampoco con
partidos políticos, sean del color que sean, , ni mucho menos con la llamada
civilización, cultura, etc. todo esto solamente se consigue en y con Cristo, o
sea, el Espíritu Universal que llamamos Dios, el único que puede cambiar
nuestras vidas, ya que todos los seres humanos somos espíritu, y si hay personas que no comprenden esto, o
no lo creen, les diré que nosotros hablamos por propia experiencia. Cuando el
espíritu avanza, crece, y tiene a Cristo en su vida, domina la mente, el
cerebro, y en el lugar de las cosas negativas, egoísmo, ambición, maldad,
vanidad, ansia de poder y de dinero, etc., coloca ideas positivas, paz, amor,
armonía, bondad, justicia, etc. Esto es el evangelio de Cristo, esto es la
iglesia pobre, la que vivimos y predicamos un grupo de familias, obreros y
obreras en Mallorca y que tratamos de dar a conocer a los demás obreros y
obreras de toda España y del mundo entero. No hay otro camino, no hay otra
solución que Cristo; y claro está no hablamos de religiones muertas, con dioses
muertos, hablamos del Dios vivo, el que puede hacernos cambiar, evolucionar, y
convertirnos, no en seguidores de una religión determinada, de un partido
político, etc., sino convertirnos simplemente, en personas humanas y portarnos
como tales. Cuando todos los seres humanos nos comportemos de forma normal,
natural, como cristianos de verdad, como hijos de Dios, el mundo será un
paraíso. Pero mientras tanto procuremos tener “la iglesia verdadera en cada
casa obrera y Cristo en el corazón”. Esto es todo, es la única alternativa para
todas las religiones, partidos políticos, en una palabra, para todos los seres
humanos del mundo, cambiar cada uno pero para bien, y claro está, nos referimos
al Espíritu. Este es nuestro mensaje como iglesia pobre de Cristo. (Febrero).
MENSAJE PARA LA IGLESIA RICA
Mensaje para
la iglesia rica, la llamada católica romana y la protestante con todas sus
sectas, es también para todas las religiones del mundo, pero en particular a
las iglesias que se auto titulan cristianas, a toda la jerarquía católica y
protestante, amigos, salud y paz. Desde Mallorca, una de las islas del
Mediterráneo, la iglesia pobre, la verdadera de Cristo, os saluda y os aconseja
que volváis a Cristo, esto si creéis que sois los sucesores de los primeros
cristianos, sobre todo el Vaticano, Papa, cardenales, obispos, sacerdotes, etc.
y los obispos, pastores, etc. protestantes salidos del catolicismo. Nosotros
los obreros y obreras que hemos restaurado la iglesia primitiva, la iglesia
pobre que fundó un obrero carpintero Jesús de Nazareth, el Cristo, en Israel
hace casi dos mil años, somos los únicos que podemos decir con propiedad, que
somos la verdadera iglesia de Cristo, por dos razones d mucho peso, primero
porque somos descendientes de los primeros cristianos israelitas que vinieron a
Mallorca, y segundo porque somos obreros, somos pobres, y Cristo dice: “Bienaventurados vosotros los pobres, porque
vuestro es el Reino de Dios”, Lucas 6-20. Ya sabemos que no es el solo
hecho de ser pobres, que nos convierte en cristianos, sabemos que sin Cristo,
nada podemos hacer, pero somos los que estamos más preparados para estar en y
con Cristo, y los que formamos la iglesia pobre en Mallorca, nos presentamos
como profetas, sacerdotes y apóstoles de Cristo, precisamente porque tratamos
de vivir en y con Cristo y esto nos da una idea clara de lo difícil que es
vencer al egoísmo, comprendemos muy bien que os resulta casi imposible a vosotros,
jerarquía y sacerdotes católicos y protestantes, acudir a Cristo, ya que tenéis
que dejar de lado, poder y riquezas materiales, pero sin Cristo nada sois, y
nada podéis hacer en bien de la humanidad. Pero aún hay tiempo de acudir a
Cristo y establecer su iglesia, podéis hacerlo de forma tal como nosotros: “La
iglesia verdadera en cada casa obrera y Cristo en el corazón”, esto es todo. El
clero joven que trabaje para ganarse el pan. No se trata de ser sacerdotes
obreros, es simplemente lo que hacían los apóstoles primitivos y lo que hacemos
nosotros: ser obreros sacerdotes. Para esto sobran los estudios de seminario.
Los apóstoles y los primeros cristianos no tenían estudios teológicos, ni de
ninguna clase, pero tenían a Cristo, el único y verdadero Maestro, el mismo que
tenemos nosotros, apóstoles y sacerdotes actuales de Cristo. No es una
tontería, una autosugestión fanática, etc. es la llamada de Cristo que se vale
de unos pocos obreros y obreras, para daros el último toque de atención, a
vosotros la iglesia rica y de los ricos, a todas las religiones del mundo. No
buscamos adeptos, socios, miembros, etc. para nosotros. Buscamos seguidores de
Cristo, y cada uno en su vida, en su casa, no vamos a discutir, polemizar sobre
vuestras creencias, dogmas, ritos, etc. sabemos por propia experiencia que todo
esto sobra cuando se tiene a Cristo, cuando se vive en y con Dios. Amigos y
hermanos, salud y paz, nuestra sincera oración a Dios, es para que pronto
acudáis y encontréis a Cristo. (Febrero).
CRISTO ES EL VERDADERO MAESTRO
“No queráis ser llamados maestro, porque uno solo es
vuestro Maestro: Cristo”. Mateo 23-10. Y esto nos
lo dice un obrero carpintero, Jesús de Nazareth, que llevó en sí mismo al
Cristo, o sea, el Espíritu de Dios. Millones de seres humanos se han preocupado
siempre de estudiar cosas, tener conocimientos humanos, las llamadas, ciencias,
matemáticas, filosofías, teologías, medicina, etc, pero pocos, muy pocos se han
dedicado al estudio de la vida espiritual, moral, social, etc.en sí mismo.; esto
lo han dejado siempre para los religiosos en los monasterios, conventos, etc.
de las religiones organizadas; después muchos seres humanos , hombres y
mujeres, se han dedicado a escribir libros, folletos, etc. sobre la vida
espiritual, moral, religiosa, teológica, etc. llenando el mundo de muchas
toneladas de esta clase de literatura, y vemos con tristeza, que han servido
muy poco, ya que en la mente de muchos millones de seres humanos, solamente hay
el egoísmo dominante, acariciando siempre la idea del poder y del dinero. Para
muchos seres humanos tienen más importancia las riquezas materiales, que una
vida sana, pura, espiritualmente hablando, y lo curioso es que en el mundo hay
muchas religiones y cuentan con muchos seguidores, pero son muy pocos los que
buscan el Reino de Dios en sí mismo, al
verdadero Maestro, al Cristo. Muchos seres humanos son capaces de estudiar, por
ejemplo, el Universo, la Naturaleza, los microbios, etc., investigando años
para poder descubrir algo, para inventar algo, etc, pero son muy pocos los que
sean capaces de estudiarse a sí mismo, sus ideas, reacciones, emociones, el
odio, venganza, enfado, egoísmo, etc. Y claro está que al no tener al Cristo
como Maestro, como guía, luz, verdad, etc. millones de seres humanos, hombres y
mujeres, vegetan por el mundo, y no viven la vida, la ensucian, y el resultado
es una humanidad llena de problemas de contradicciones, una humanidad compuesta
de ricos y pobres, explotados y explotadores, con mucho ateísmo dentro y fuera
de las religiones organizadas, y a todo esto se le llama civilización, cultura,
progreso, etc. Cristo dice por boca de Jesús de Nazareth. “Yo soy la Luz, la Verdad, la Vida, el Camino, el Maestro”, y claro
está, que todo lo que Cristo dijo, lo dice siempre a cada ser humano si trata
de encontrarlo en sí mismo, en su propia vida, en sus ideas, experiencias,
etc., y no en las religiones muertas, con dioses muertos. Una verdadera
meditación, oración mental, apartar de la mente toda idea negativa, material,
egoísta, etc. es ya el camino abierto para que Cristo, el Maestro, empiece a
dirigir nuestra vida, nuestros pasos, ideas, pensamientos, etc. y dando por
resultado que los seres humanos vivan como personas y se porten como tales.
Aquí tenemos pues, el evangelio de Cristo aclarado y vivido por nosotros, la
iglesia pobre de Cristo, formada por obreros y obreras pobres del mundo, que
aquí en Mallorca hemos restaurado, algunos de los descendientes de los primeros
cristianos que vieron y escucharon al Maestro, Cristo, hace dos mil años en
Israel. Y claro está, que lo que tratamos de aclarar con este mensaje, no son
solamente ideas enseñadas de padres a hijos, son también experiencias propias,
somos, pues, verdaderos apóstoles de Cristo. (Marzo).
RELIGIONES Y SECTAS
DESTRUCTIVAS
Los cristianos
que formamos la iglesia pobre de Cristo en Mallorca, hemos leído en la prensa y
también se ha dicho por la radio, que se nos incluye en la lista de las
llamadas sectas destructivas. Claro está que las personas que dicen o escriben estas cosas no nos conocen. Nosotros, obreros
y obreras que formamos la iglesia pobre de Cristo, no somos una secta más, no
tenemos sacerdotes a sueldo, no tenemos templos, locales, etc., no hay
miembros, socios, etc., no hay cuotas que pagar ni nada por el estilo, y todo
se reduce de forma muy simple a lo siguiente: “La iglesia verdadera en cada
casa obrera y Cristo en el corazón”, esto es todo. Procuramos leer la Biblia, leer el evangelio
de Cristo, pero de forma sencilla, en familia, entre amigos, y claro está, sin las
tristes interpretaciones que hacen los que dirigen las muchas sectas y
religiones que hay en el mundo, que solamente van al poder y al dinero; sabemos
y entendemos muy bien lo que dice Cristo: “No
se puede servir a Dios y al dinero”. Por esto, nosotros, las familias que
formamos la iglesia pobre, somos obreros y obreras, pobres del mundo. Los ricos
ya tienen su religión o secta en las organizaciones religiosas ricas, llámense
como se llamen. Nosotros ya nos hemos librado de TODAS las religiones y sectas
destructivas, y claro está, no tenemos problemas de ayuda de dinero del estado,
de leyes a favor de la enseñanza religiosa en las escuelas, de estudios de
seminario, teológicos, etc. ya que enseñamos el sencillo evangelio de Cristo,
de padres a hijos, entre la familia y amigos, y a los obreros y obreras que se
acercan a nosotros, les aconsejamos que hagan lo mismo que nosotros, en su
casa, con su familia, practicar y predicar el cristianismo de Cristo, el que
practicó y predicó el obrero carpintero Jesús de Nazareth. De esta forma nos
convertimos en verdaderos sacerdotes y apóstoles de Cristo, sin necesidad de
pertenecer a ninguna secta o religión de los ricos, porque la Religión
Verdadera es la de Dios, y no la de los hombres, pues ya hemos dicho en otras ocasiones,
que la religión de Dios no son creencias, ritos, dogmas, estudios teológicos,
etc. La religión de Dios, la enseñanza
de Cristo, es vida, y la vida no es algo en que se cree, es algo que se vive.
Bien claro nos dice Cristo: “Por sus
frutos los conoceréis”. Y claro está, no es por sus creencias, estudios,
etc.. Somos pues, la iglesia pobre de Cristo, la única, la verdadera, y no
porque nos creamos ser mejores que los demás, sino porque entendemos muy bien
las palabras de Cristo: “Bienaventurados
vosotros los pobres, porque vuestro es el Reino de Dios”, y no porque lo
creemos, sino porque lo vivimos. Esto es el verdadero evangelio de Cristo. Y si
los sacerdotes católicos y protestantes, y sus seguidores quieren ser
cristianos de verdad, si quieren seguir a Cristo, que hagan lo mismo que
nosotros, tener un hogar, formar una familia, trabajar para ganarse el pan,
llevar una vida de oración, practicar y predicar el sencillo evangelio de
Cristo. Esto está al alcance de todos los seres humanos, y sobre todo, los
obreros y obreras, los pobres del mundo. Animo, pues, y adelante. (Marzo).
EL CRISTIANISMO DE CRISTO ES
POBRE
Dice Cristo
por boca de Jesús de Nazareth, “Aprended
de mí”. Mateo 11-20. Y también dice: “Bienaventurados
vosotros los pobres, porque vuestro es el Reino de Dios”. Lucas 6-20. Y he
aquí un hombre dice a Jesús: “¿Qué haré
para tener vida eterna?”, le contesta Jesús: “Guarda los mandamientos, etc. y
si quieres ser perfecto, vende lo que tienes y dalo a los pobres etc. Pero el
hombre se fue triste porque tenía muchas posesiones”. Mateo 19, 16-24. “Y la gente decía, ¿no es éste el
carpintero, hijo de María?”, etc, refiriéndose a Jesús. Y Jesús dice a uno
que quería seguirle, “Las zorras tienen
cavernas, y las aves del cielo nidos, pero el hijo del hombre no tiene donde
recostar su cabeza”. Mateo 8, 20. Tenemos aquí una gran lección, algo que
ha olvidado o no entendido el clero católico y protestante, lo del hombre rico.
Vemos que el hombre rico y Jesús, el carpintero, eran judíos, eran del mismo
país, y habían sido enseñados en la misma religión, la judía, pero uno era un
judío rico, y el otro un judío pobre, y claro está, los sacerdotes de Israel
permitían esto, para ellos era normal, practicar la misma religión ricos y
pobres, explotados y explotadores, exactamente lo mismo que practican y
predican las jerarquías y sacerdotes que se auto-titulan cristianos, católicos
y protestantes. Pero Cristo, por boca de Jesús de Nazareth, habla muy claro y
dice que aprendamos de él. Jesús de Nazareth, el obrero carpintero, no tenía
riquezas materiales, no era rico, no era un comerciante, no era un industrial,
no era un militar, no era un sacerdote de la religión de su país, no era un
político, no trató de defenderse con
armas del invasor romano, y sobre todo, no siguió predicando desde el
sacerdocio de la religión judia, sino que se apartó de ella, en lo humano como
organización y practicó y predicó la verdad de Dios, enseñándonos a vivir de
forma normal, sencilla, y natural la vida de oración y trabajando para ganarnos
el pan, y procurando siempre seguir a Cristo nuestro único y verdadero Maestro.
Esto es el evangelio verdadero, el de Cristo. Por esto nosotros, la iglesia
pobre, compuesta por obreros y obreras, pobres del mundo, somos la única y
verdadera iglesia, ya que somos guiados por Cristo, y no por hombres que se
auto titulan sacerdotes, simplemente porque tienen estudios de seminario,
católicos y protestantes, que con su llamada teología han desvirtuado,
estropeado, el sencillo evangelio de Cristo, vendiendo a Cristo, por querer
tener poder y riquezas materiales. Pero nosotros, la iglesia pobre, pedimos a
Dios que los perdone, que les ilumine, les guíe a Cristo, y si los ricos que
son feligreses, miembros de las llamadas iglesias católica y protestante,
quieren seguir de verdad a Cristo, ya lo saben, Cristo dice bien claro, “No se puede servir a Dios y al dinero”.
Todos los obreros y obreras que formamos la iglesia pobre en Mallorca, en
España y el mundo entero, somos los verdaderos sacerdotes y apóstoles de
Cristo, somos los que hemos restaurado la iglesia primitiva, el verdadero
cristianismo de Cristo, la iglesia pobre, la del carpintero Jesús de Nazaret.
(Marzo).
CRISTO Y EL SÉPTIMO SELLO DEL
APOCALIPSIS
“Y el me dice: Necesario es que otra vez profetices
a muchos pueblos y gentes y lenguas y reyes”.
Apocalipsis 10-11. Todo esto es el resumen de la séptima iglesia, del séptimo
sello. Lo de la Biblia judía y cristiana, partiendo de Moisés y Elías podremos
entender muchas cosas, Moisés representa la ley de Dios, y Elías representa la
profecía; Moisés representa la ley escrita, Elías representa la ley vivida, la
experiencia propia. Aquí ya empezamos a ver dos testigos: Moisés dirige la
religión judía, compuesta de ricos y pobres, Elías acude al Espíritu, a la
Verdad vivida y después predicada. Andando el tiempo vemos a dos testigos más,
en la cruz, crucificados uno a cada lado de Jesús de Nazareth, uno pertenece a
la ley escrita, otro a la experiencia espiritual, y éste dice a Cristo,
acuérdate de mí en el paraíso. Después encontramos otros dos más, Pedro y Juan,
apóstoles; con el nombre de Pedro se organizó la iglesia católica, el Vaticano,
protestantismo, etc., Juan representa el Espíritu, el Apocalipsis, la profecía,
la restauración del verdadero cristianismo. Muy pocos años después de la muerte
de Jesús de Nazareth, llegan a España muchos israelitas, algunos se quedan en
Mallorca, y la mayoría practican la religión judía, la de Moisés, pero un
pequeño grupo son cristianos, son seguidores del carpintero Jesús de Nazareth,
y tanto unos como otros enseñan sus creencias, su idea de Dios, de padres a
hijos de forma oral, hasta que viene el catolicismo con la triste inquisición,
y empieza una amarga historia. Pero pasan los años, los siglos, y en el año 1948,
se crea el nuevo estado de Israel, con judíos de todo el mundo. Y aquí, en
Mallorca, los que descendemos de los israelitas, conocidos con el apodo de
chuetas, empezamos a vivir una vida más tranquila y con más libertad. Y otra
vez dos testigos más, clave en la historia, siendo los protagonistas del
séptimo sello, Nicolás Aguiló y Cayetano Martí, yo mismo. Nicolás se va a
Israel, estudia para rabino, y se queda a vivir allí. Yo reuní a 16 personas,
hombres y mujeres, el día 9 de julio de 1987, y simbólicamente renació la
iglesia pobre de Cristo, la iglesia primitiva que creó el carpintero Jesús de
Nazareth. Ahora ya nadie podrá destruirla, por la sencilla razón de que hay
muchos millones de seres humanos en el mundo, que aunque sea en teoría, conocen
las enseñanzas de Jesús de Nazareth. Ahora ya quedan aclaradas las palabras del
profeta Sofonías del “pueblo pobre que
espera en Dios”. Nada pues de religiones organizadas, compuestas de ricos y
pobres, nada de partidos políticos, ni capitalismo, ni comunismo, etc. Cristo
es la solución a todos los problemas espirituales y sociales para toda la
humanidad. Pero Cristo, el Espíritu de Dios, no es creencias, ritos, dogmas,
etc. es Vida y la vida se vive, es paz, justicia, amor, bondad, etc. no basta creer en estas cosas,
hay que vivirlas. Esto es el evangelio de Cristo, esto es su verdadera iglesia,
la iglesia pobre, o sea el séptimo sello. “La
iglesia verdadera en cada casa obrera y Cristo en el corazón” Amigos, paz y
amor. (Marzo).
NOMBRES EXTRAÑOS AL CRISTIANISMO
El
cristianismo de Cristo, predicado de padres a hijos por los descendientes de
los primeros cristianos israelitas, que vinieron a Mallorca, muy poco tiempo
después de la muerte del rabí Jesús de Nazareth, el cristo, es muy sencillo y
fácil de entender. Pero cuando vino la iglesia católica, varios siglos después
a Mallorca, su llamado cristianismo resultó totalmente extraño, y con una
cantidad enorme de nombres, que no tienen nada que ver con el cristianismo
primitivo y verdadero. Toda una jerarquía de sacerdotes, rectores, vicarios,
canónigos, obispos, cardenales, papas, ermitaños, frailes, monjas, santuarios,
iglesias, monasterios, catedrales, oratorios, etc. Después títulos como padre
tal, madre tal, superior, superiora, sor, eminencia, ilustrísima, reverendo,
reverenda, santo padre, su santidad,
vicario de Cristo, etc., novicios, novicias, estudios filosóficos, de sapiencia, teológicos, etc., el papa
sucesor del apóstol Pedro, la madre de Dios, la virgen María, Jesucristo,
Eucaristía. La hostia, adoración o veneración de imágenes la misa, el cáliz,
agua bendita, la confesión, el celibato, infierno, purgatorio, limbo, etc.
santos y santas que el papa canoniza, o sea, que los declara santos desde el
Vaticano. En fin, la lista es muy larga, y referente al protestantismo salido
del catolicismo, no tiene tantas cosas o nombres extraños, pero tiene
bastantes. Pero nosotros, la iglesia pobre de Cristo en Mallorca, vemos la gran
diferencia que hay entre estas organizaciones religiosas, con el sencillo evangelio,
o sea, “la Buena Nueva” de Cristo, que de forma familiar hemos conservado
siempre, y que ahora damos a conocer a la humanidad, sobre todo a los obreros y
obreras, los pobres del mundo, para que ya tengan una idea clara de lo que
Cristo predicó, por boca del obrero carpintero Jesús de Nazaret, y que de esta
forma sencilla nace ahora y siempre, en la vida misma de los seres humanos que
lo buscan de verdad, en sí mismo y no en religiones organizadas por los
hombres. El evangelio de Cristo es sencillo y fácil de entender, tratar de
vivir los mandamientos de Dios, y no solamente creer en ellos, y para esto hay
que dejarse guiar, enseñar, salvar, etc., por el único y verdadero Maestro que
es Cristo. El es el Camino, la Verdad, la Vida. La Paz, la Luz, el Amor, etc.,
y claro está, que para vivir estas cosas, para vivir en y con Cristo, sobran
los estudios de seminario, teológicos, etc., no son necesarios sacerdotes a
sueldo, jerarquías, títulos, nombres extraños, dogmas, ritos, etc.. La cosa
está muy clara, no somos una secta más, católica o protestante, somos
sencillamente la verdadera iglesia pobre
de Cristo, la del obrero carpintero Jesús de Nazareth, la que fundó hace dos
mil años, y que ahora ya hemos restaurado nosotros, unas cuantas familias
obreras. Pero esto está siempre al alcance de todos los obreros y obreras del
mundo, si quieren ser como nosotros, verdaderos sacerdotes y apóstoles de
Cristo. Y si la jerarquía católica y protestante, como también sus seguidores,
quieren pertenecer a la verdadera iglesia de Cristo, ya lo saben, también está
al alcance de ellos. Pero Cristo dice bien claro: “No se puede servir a Dios y al dinero”. La iglesia pobre de Cristo
pedimos a Dios Luz y Paz para todos los seres humanos de la Tierra. (Marzo).
DIOS ES AMOR UNIVERSAL
Dice Cristo: “Un mandamiento nuevo os doy: que os améis
los unos a los otros”, Juan 13-34. Y
también dice Juan, “Dios es amor, y el
que vive en amor vive en Dios y Dios en él”. Primera Juan 4-16. Y Cristo
dice: “Aprended de mí”. Mateo 11-29.
Y referente a los apóstoles podemos leer lo siguiente: “Entonces viendo la constancia de Pedro y de Juan, sabiendo que eran
hombre sin letras e ignorantes, se maravillaban, y les conocían que habían
estado con Jesús”. Hechos de los apóstoles 4-13. Y el apóstol Pablo dice: “¿No sabéis que sois templo de Dios, y que
el Espíritu de Dios mora en vosotros?” Primera Corintios 3-16. Y dice
también: “Con Cristo estoy juntamente
crucificado y vivo, no ya yo, más vive Cristo en mí”. Gálatas 2-20. La cosa
ya no puede estar más clara. Todas las religiones organizadas, con sacerdotes a
sueldo, y estudios de seminario, sobran y no tienen nada que ver con la
verdadera religión de Dios. El Universo Infinito, poblado por un número
infinito de mundos, nos aclara mucho más todo esto, no puede ser de otra
manera. Dios es el creador de todo, es el Padre de todos, Dios es Infinitamente
Sabio, poderoso y de Amor Infinito. Y a través de la historia humana vemos a
seres humanos que han conseguido vivir en y con Dios, vivir en sí mismo el amor
de Dios, y tenemos un buen ejemplo en el obrero carpintero Jesús de Nazareth,
el Cristo. Por eso nos dice muy claramente que busquemos el Reino de Dios en
nosotros mismos. Ahora bien, en el llamado cristianismo católico y protestante,
son muy pocas las personas que han vivido o viven en y con Dios, que tengan a
Cristo en sí mismo, y esto es por la forma que se predica el evangelio de
Cristo. Toda una jerarquía de sacerdotes de seminario, con muchos estudios
humanos, pero faltos de lo más importante, como son las experiencias
espirituales propias, y claro está, las experiencias, el Maestro, el Cristo, no
viene al ser humano por mediación de estudios, viene de una búsqueda verdadera
de Cristo, en sí mismo, en la vida misma. Nosotros pues, la iglesia pobre de
Cristo, formada por obreros y obreras sin estudios de seminario, somos los
verdaderos sacerdotes y apóstoles de Cristo, y por lo tanto, los únicos
capacitados para hacer posible, el aumento de sacerdotes y apóstoles, y no
solamente por nuestras predicaciones, imposiciones de manos, sino porque
podemos decir y con propiedad, a los obreros y obreras del mundo, que el único
que hace de verdad sacerdotes de Dios es Cristo mismo. No es pues una fantasía,
una forma de soberbia, etc. al presentarnos al mundo como la única y verdadera
iglesia de Cristo. No se trata de una secta más, ya hemos dicho en otras
ocasiones, que ya hemos restaurado la iglesia primitiva de Cristo, unas cuantas
familias descendientes de los primeros cristianos israelitas que vinieron a Mallorca,
hace casi dos mil años, y que de padres a hijos hemos sido enseñados en el
camino del evangelio de Cristo, teniendo muy claro que sin Cristo, nada podemos
hacer para nuestro avance espiritual, y que si vivimos en y con Cristo, en y
con Dios, sobran todas las religiones, dogmas, ritos, etc. Dios es amor, si nos
amamos unos a otros, Dios está en y con nosotros. (Marzo).
HOMILIA DE LA IGLESIA POBRE
A todos los
sacerdotes católicos, protestantes, etc. Amigos: Salud y Paz. Sirvan estas
líneas como sencilla homilía o plática, para daros idea clara de nuestro
mensaje como iglesia pobre de Cristo. Es ya hora de predicar las verdades de
Cristo, sin salirse de la sencillez del evangelio. Basta con dar una simple
mirada a la sociedad, la humanidad llamada civilizada, y sobre todo, a los
países de mayoría católica o protestante. En España, por ejemplo, hay ricos y
pobres, explotados y explotadores, vicios de toda clase, robos, violencia,
ateísmo, un materialismo dominante, ansias de tener poder y dinero, sectas de
todas clases, suicidios, crímenes, muchas familias deshechas, hijos que
abandonan a sus padres, y también padres que abandonan a sus hijos,
violaciones, engaños, estafas, etc. y con muchos siglos de catolicismo
dominante; pero también podemos decir lo mismo de los países de mayoría
protestantes. Entonces, ¿qué es lo que falla? La cosa está muy clara; la
humanidad no necesita religiones organizadas, y en el caso del llamado
“cristianismo” católico y protestante, estas dos grandes organizaciones están
formadas, la primera por católicos del Papa, y la segunda por protestantes de
Lutero, pero muy pocos cristianos de Cristo. La humanidad no necesita partidos
políticos, religiones que están compuestas de ricos y pobres, ejércitos de toda
clase, etc. La humanidad necesita más cristianos de Cristo, que con su ejemplo
den idea clara de cómo vivir en nuestro mundo. Por eso, nosotros, la iglesia
pobre de Cristo, resumimos de forma muy sencilla la vida cristiana, viviendo el
Evangelio de Cristo de esta forma: “La iglesia verdadera en cada casa obrera, y
Cristo en el corazón”, eso es todo. Si la gente rica quiere vivir en Paz, y
portarse como personas, como verdaderos cristianos, que repartan sus riquezas
materiales, pero no con limosnas, sino con una auténtica justicia social: que
los beneficios del trabajo sean para todos, no para unos cuantos, esto es el
verdadero cristianismo de Cristo, el verdadero Amor de Dios, esto es amar al
prójimo de verdad. No se trata de creencias, dogmas, ritos; se trata de hechos
positivos, como dice Cristo: “Por sus
frutos los conoceréis”, pero no dice “por su religión”. Es ya el gran
momento histórico, tratad de comprenderlo amigos, la iglesia pobre de Cristo,
no hay otra, os aconseja que prediquéis de verdad el Evangelio de Cristo, viviéndolo,
y decid a vuestros seguidores que hagan lo mismo, sobre todo a los ricos;
porque bien claro dice Cristo: “No se
puede servir a Dios y al dinero”. Mientras no se siga de verdad a Cristo,
no esperéis soluciones a los graves problemas de la humanidad, ya que las
“soluciones” humanas, en lugar de arreglar las cosas, las estropean más. Pero
no todo está perdido, nosotros, los obreros y obreras de la iglesia pobre de
Cristo, comprendemos muy bien que a vosotros, amigos sacerdotes católicos y
protestantes, así como a todas vuestras jerarquías, aunque tengáis estudios de
seminario, os falta Cristo. Nosotros pedimos a Dios, que muy pronto, lo
encontréis, para poder predicarlo de verdad. Así sea. Amén. (Abril).
LA MUERTE Y RESURRECCIÓN DE
CRISTO
“Amarás al Señor tu Dios, y a tu prójimo como a ti
mismo”, Marcos 12, 30-31. “De cierto te digo que lo que hicisteis a estos mis hermanos, a mi me
lo hicisteis”, Mateo 25, 32-46. Los evangelistas nos hablan de la muerte y
resurrección de Jesús de Nazareth, el obrero carpintero, el Cristo. El
catolicismo y el protestantismo que se auto-titulan “cristianos” de Cristo, han
confundido las cosas, y de la muerte y resurrección de Cristo, han hecho una
religión muerta. Los sacerdotes de ambos lados predican sobre las enseñanzas,
la muerte y resurrección del Maestro, de Cristo. Celebran la Pascua de
Resurrección una vez al año con sermones, fiestas, procesiones, etc. Los
teólogos escriben libros sobre las enseñanzas, muerte y resurrección de Cristo.
Pero todos dejan lo más importante, aquello de “amar a Dios y al prójimo”. Los
ricos y los sacerdotes de Israel, junto con los militares romanos, crucificaron
al obrero Jesús de Nazareth, no comprendiendo que Cristo, el Espíritu de Dios,
hablaba por su boca, y es que a través de la historia humana, Cristo siempre
está presente; nace, muere y resucita siempre. Cada ser humano, cuando nace, lo
lleva dentro; pero andando el tiempo, el mismo ser humano lo mata con el
egoísmo, la avaricia, la maldad, etc. Pero siempre hay algunos seres humanos
que lo hacen resucitar, siendo un vivo ejemplo para toda la humanidad. Pero
millones de seres humanos roban y explotan a otros seres humanos para
enriquecerse con su trabajo. Y claro está, que el rico, el empresario, el
comerciante, etc. cuando explota, cuando roba al obrero, explota y roba a
Cristo; cuando organiza guerras, lo asesina, se ríe de Cristo, pues de la misma
forma que un ser humano ayuda a otro, ama al prójimo, ama a Cristo. Muchos
siglos antes de Jesús de Nazareth, ya existía el mandamiento de amar al prójimo
como a uno mismo; así como los mandamientos de no matar, no robar, etc. Ya lo
sabéis capitalistas, sacerdotes, militares, empresarios, banqueros,
comerciantes, etc. cuando no amáis de verdad al prójimo, dais martillazos a los
clavos que crucifican a Cristo y le apretáis más la corona de espinas. Pero los
obreros, los pobres del mundo, ya vemos la gran verdad, que el capitalismo es
salvaje, y que todas las dictaduras, sean del color que sean, son criminales,
son salvajes. Y vosotros, sacerdotes católicos y protestantes, con vuestros
seguidores, los ricos, explotáis y engañáis a los pobres, a los obreros,
martirizáis y sacrificáis a Cristo, y el mismo dolor del hijo, lo sufre la
madre, a la que llamáis “virgen María”. Millones de madres de obreros, los
pobres del mundo, lloran y sufren viendo a sus hijos crucificados, con la
explotación, guerras, hambres, esclavitud, muerte, todo ello producido hace
miles de años por el egoísmo, por el “becerro de oro”, por las “treinta
monedas” que se cobra el capitalismo salvaje, religioso, político y militar.
Nada, pues, de católicos del Papa, ni protestantes de Lutero, pero sí de
cristianos de Cristo. Es la única y verdadera solución a todos los problemas de
la humanidad, Cristo resucitado en cada ser humano, el Mesías. Así lo creemos y
predicamos la iglesia pobre de Cristo. (Abril).
DIOS TODOPODEROSO ES EL TEMPLO
VERDADERO
“Y en espíritu, ví la nueva Jerusalén que descendía
del cielo..., y no había en la ciudad templo, porque Dios Todopoderoso es el
templo con Cristo”, Apocalipsis 21. Esta es la
nueva ciudad, el nuevo mundo Tierra, la séptima iglesia o época, el séptimo
sello ya abierto para toda la humanidad. Ahora, dos mil años después de la
predicación, o buena nueva de Cristo, del nacimiento de su iglesia, después de
que el cristianismo se corrompiera y durante siglos se esparciera por todo el
mundo en la forma de catolicismo y protestantismo, dando a conocer un evangelio
adulterado con las enseñanzas de Cristo, Dios tenía preparado para estos
momentos históricos, descifrar o aclarar el séptimo sello, y lo está haciendo a
través de la iglesia pobre de Cristo, renacida en este siglo, en una isla,
Mallorca. Ahora ya queda bien aclarado lo del profeta Sofonías: “Un pueblo humilde y pobre espera en el
nombre de Dios”, Sofonías, 3, 12. Después de tantos siglos de dominio
capitalista en el mundo Tierra, y de casi un siglo de dominio comunista en
muchos países, y con muchas religiones con dioses muertos, queda ya el camino
bien abierto para una verdadera preparación para la tan esperada “ciudad
santa”, la gran Jerusalén, preparación que consiste en un verdadero cambio de
mentalidad del ser humano, o sea, Cristo en cada hombre y mujer, en su propia
vida, en su corazón. Tiene que ser ya el fin de la explotación, es insostenible
ya la triste filosofía de que, “tienen que existir ricos y pobres, explotados y
explotadores, o dictaduras de una forma o de otra”. Es ya el gran momento de
renacer el verdadero cristianismo, precisamente ahora que ya hay millones de
seres humanos que se auto-titulan “cristianos”. Ahora es el momento de
comprender que la solución de todos los graves problemas de la humanidad es
Cristo, que es la Verdad, el Camino, la Vida, la Salvación, pero en uno mismo;
el Espíritu de Dios hecho realidad en la vida, en los hechos positivos de cada
día en el ser humano. siendo miembros de verdad de la única y verdadera
religión, la de Dios, que no tiene nada que ver con las religiones humanas
organizadas y compuestas de ricos y pobres, con sacerdotes a sueldo, ritos,
creencias, dogmas, etc. que de nada sirven si falta una vida en y con Cristo,
en y con Dios; y claro está, que cuando se vive en y con Cristo, sobran
religiones, partidos políticos, militarismo, etc. Y que no se diga que esto es
utopía, ya que estamos hablando del ser humano, cuando se porta sencillamente
como persona. Vivir en y con Cristo, es ser santo de verdad, es la nueva
Jerusalén, simbólicamente en cada ser humano, en cada familia, en todo el
mundo, en el infinito Universo. Ahora tenemos la gran oportunidad de hacer de
nuestro mundo la ciudad santa. La humanidad nunca había tenido tan cerca esta
realidad. Nosotros, los obreros y obreras que formamos la iglesia pobre de
Cristo, y que algunos somos descendientes de los israelitas cristianos que
vinieron a Mallorca muy poco tiempo después de la muerte del rabí Jesús de
Nazareth, el obrero carpintero, el Cristo, aclaramos ya de forma sencilla, el
simbolismo del séptimo sello del Apocalipsis. Ánimos y paz, amigos. (Mayo).
NOSOTROS SOMOS LA IGLESIA DE
CRISTO
“Bajo El
emperador Tiberio, un modesto obrero, Jesús de Nazareth fue considerado como el
“Mesías” esperado por un pequeño grupo de obreros, que se convirtieron en
discípulos suyos”. Historia Universal, J. Jastrow, página 117. “Jesús de Nazareth andando junto al mar de
Galilea llamó a unos amigos suyos, pescadores de oficio, Simón, Andrés, Jacobo,
Juan, etc. y fueron sus discípulos”, Mateo 4, 18-22. Jesús decía: “Bienaventurados vosotros los pobres, porque
vuestro es el reino de Dios”, Lucas 6,20. En uno de mis mensajes digo: “Muy
poco después de la muerte de Jesús de Nazareth, muchos israelitas se vieron
obligados a salir de su Tierra, a causa de los romanos, repartiéndose por el
Mediterráneo, y de los que llegaron a Mallorca, unos eran seguidores de Moisés,
y unos pocos lo eran del Rabí Jesús, el carpintero. Pasando el tiempo, las
enseñanzas de Jesús de Nazareth iban siendo predicadas de padres a hijos, de
forma oral, como en el caso de mi familia. Los seguidores de Moisés ya tenían
sus sinagogas, y tanto unos, como otros, junto con los nativos, vivían en Paz,
y en bastante Armonía, hasta la llegada del rey Jaime I, con la llamada
“iglesia católica” y la Inquisición, de tan triste memoria en la historia de
las islas Baleares, sobre todo en Mallorca. Habían pasado ya varios siglos y la
iglesia católica seguía siendo totalmente extraña para nosotros, los
cristianos, la iglesia pobre de Cristo, formada por obreros y obreros, los
pobres del mundo. Ahora nos alegramos mucho al ver que los historiadores y los
evangelios compuestos por el Vaticano con cartas de algunos seguidores de Jesús
de Nazareth y de algunos escritores que escribieron sobre el cristianismo
primitivo, declaran ya abiertamente que la iglesia de Cristo era pobre,
compuesta de obreros sin estudios. Repito, nos alegra mucho a nosotros, como
descendientes de los primeros cristianos y como obreros, sabiendo ciertamente
que somos la única y verdadera iglesia pobre de Cristo, al ver que hay muchas
personas que consciente o inconscientemente, nos dan la razón. La historia nos
dice que, tanto en Europa, como en América, se expandió el catolicismo y el
protestantismo el cual salió del catolicismo. Comprendemos que estas
organizaciones religiosas, compuestas de ricos y pobres, explotados y
explotadores, han dado a conocer al mundo las enseñanzas de Jesús de Nazareth,
pero de forma totalmente cambiada. Comprendemos que en ambos lados ha habido, y
hay, personas de buena fe en estas religiones de los ricos. Pero ya ha llegado
el histórico momento del renacer del cristianismo primitivo, nosotros, la
iglesia pobre de Cristo, formada por obreros y obreras, en Mallorca y en
algunos otros lugares de España, y en otros países, damos el feliz mensaje a
toda la humanidad, sin vanidad, ni soberbia, pero sí con sinceridad y firmeza,
de que nosotros somos la verdadera y única iglesia que fundó el obrero
carpintero Jesús de Nazareth, el Cristo. Ahora le toca a la religión de los
ricos, llámese como se llame, reconocer su error, y tanto los sacerdotes, como
sus seguidores, tienen que acudir a Cristo, si quieren ser cristianos de
verdad. “La iglesia verdadera en cada casa obrera, y Cristo en el corazón”.
(Mayo).
LA FAMILIA DE JESÚS DE NAZARETH
Una vez más
aclaramos que Jesús de Nazareth, nació, vivió y murió, como los demás seres
humanos, digamos ya de una vez por todas, que toda la fantasía, leyenda para
dar fuerzas a las creencias, dogmas, etc. de la iglesia de los ricos, el
catolicismo del vaticano y el protestantismo de Lutero; todo este montaje que
han hecho sobre la familia de Jesús, el Cristo, sirve solamente a los
mercaderes de la palabra de Dios para sus propias ganancias materiales. José,
el carpintero, y su esposa, María, viviendo en Nazareth de Galilea, tuvieron
varios hijos, el primero fue Jesús, y esta familia era pobre, gente obrera,
como la mayoría de los galileos; y claro está, que eran gente sencilla, sin
estudios. Se puede decir que algunos sabían leer un poco, y nada más, pero eso
sí, eran muy religiosos, pero notando siempre la falta de un Libertador, de un
Mesías. En la historia humana vemos siempre lo mismo, los obreros, los pobres
del mundo, soñando y esperando siempre un verdadero Libertador; cosa que nunca
han necesitado los ricos, ya que estos, con sus riquezas materiales lo han comprado
todo, hasta intentan comprar su propia salvación o vida eterna, comprando
siempre a los sacerdotes de todas las religiones. Pero la teología católica y
protestante, hablan de la virginidad de María, la madre de Jesús, y el Vaticano
ha creado el culto a María, que fomenta las llamadas “apariciones” de María, y
la han hecho “madre de Dios”, etc. Pero todos se callan, o dicen muy poca cosa
de las palabras que, según el evangelio de Lucas, dijo María: “Engrandece mi alma al Señor, y mi espíritu
se alegró en Dios, mi Salvador..., quitó a los poderosos de los tronos, y
levantó a los humildes, a los hambrientos hinchó de bienes, y a los ricos envió
vació”, Lucas, 1, 46-53. Comprendemos muy bien a la iglesia de los ricos,
al haber convertido a una sencilla mujer pobre, en “la virgen y madre de Dios”,
por los grandes beneficios materiales que les ha proporcionado a través de los
siglos, pero también comprendemos que nosotros, la iglesia pobre de Cristo,
tenemos el derecho, y el deber de defender a la familia de Jesús de Nazareth,
por ser ellos, y nosotros, obreros, pobres del mundo, y por ser Jesús de
Nazareth portador en sí mismo del Cristo, nuestro “Maestro y Salvador” de
nuestra iglesia pobre. Y claro está, que ser cristiano no consiste en tener
creencias, dogmas, celebrar ritos, etc. El verdadero cristiano vive en y con
Cristo, por lo tanto, tiene experiencias propias en lo espiritual, en la vida
misma, y en las apariciones, como en el astral. Cuando vemos a Jesús, a su
familia, a los primeros apóstoles, no nos dicen nada de jerarquías, sacerdotes
a sueldo, construcción de templos, monasterios, oratorios, etc. pero sí que nos
alientan, sobre todo Cristo, a dar su mensaje de Paz, Amor, Bondad, etc.
repitiéndonos siempre que “no se puede
servir a Dios y al dinero”, y que el pecado más grave es el egoísmo, y que
el mundo no es un paraíso a causa de haber ricos y pobres, explotados y
explotadores. Hace falta Cristo en cada ser humano, o sea, más espiritualidad,
y no comedia religiosa. (Junio).
YO, CAYETANO MARTI, EL YESERO
Soy Cayetano,
mallorquín, nacido en Inca en 1918, pero desde niño resido en Palma. A la edad
de nueve años empecé a trabajar de aprendiz de herrero, hasta los catorce años,
y después de yesero, hasta mi jubilación. Solamente fui unas pocas semanas a la
escuela. Aprendí a leer y a escribir un poco yo solo, pero desde muy joven
siempre sentí una fuerte atracción por las cosas espirituales, por las cosas de
Dios. Pero mi abuelo me aconsejaba: “Busca a Dios en ti mismo, no en las
religiones”. Llevo recorrido a pie toda la isla de Mallorca, y muchas noches,
en las montañas, he contemplado las estrellas, el infinito Universo, y he
sentido un gozo difícil de explicar, y en muchas ocasiones he llorado de
alegría contemplando el cielo, las montañas, los campos, y hasta he pintado al
óleo estas cosas. Soy, pues, autodidacta, pero la fuerza espiritual siempre me
ha empujado a Dios. Recuerdo que siendo yo muy joven, mi abuelo me enseñaba
cosas de Jesús de Nazareth, el Cristo, y mucho tiempo después lo pude comprobar
en la Biblia; y lo curioso es que mi abuelo no tenía la Biblia, y nunca la
leyó, pero ahora comprendo que no la necesitaba, así como yo tampoco la
necesito. Cristo es el verdadero Maestro, que me enseña, siempre directamente,
tanto despierto, como en el astral. Tengo que aclarar que yo hago “viajes
astrales” de forma consciente desde niño, y siempre he sentido la presencia de
Dios. Estoy casado con Magdalena, tenemos una sola hija, que se llama Lucía, y
está casada con Jaime, y nos han dado una nieta, que ahora tiene dos años y se
llama Esther. Yo, Cayetano el yesero, he dado la idea de la iglesia pobre, el
retorno al cristianismo primitivo. Y claro está, que esto no tiene nada que ver
con el catolicismo, ni con el protestantismo. No somos una secta más; nuestro
mensaje es muy sencillo: “La iglesia verdadera en cada casa obrera, y Cristo en
el corazón”, eso es todo, pero lo suficiente como para transformar a la
humanidad: Cristo en cada ser humano; por lo tanto, el clero católico y
protestante, junto con sus seguidores, que acudan a Cristo, no con estudios de
seminarios, pero si con amor de Dios, con sencillez. Nos entristece mucho ver
que los medios de comunicación nos hacen poco caso, alguna vez publican una
carta nuestra, de los que formamos la iglesia pobre; pero los periodistas, el
clero, los políticos, etc. tendrían que darse cuenta de todo lo que está
pasando. Tratamos de comprender que se puede vivir una vida santa, una vida
cristiana de verdad, en familia. Los obreros y obreras, o sea, los pobres del
mundo, somos los verdaderos sacerdotes y
apóstoles de Cristo, si lo tenemos en el corazón. Sacerdotes de todas las
religiones, os digo, sin vanidad, pero con firmeza: Cristo es Luz, y cuando hay
Luz, se ven las cosas claras; no es con estudios que se avanza espiritualmente,
sino que se avanza con las experiencias propias. El Universo es infinito, así
como también es infinito el número de mundos que lo componen. Nuestro mundo es
uno de los más atrasados, en lo espiritual. Solamente se avanza con una
verdadera vida mística, en y con Cristo, en y con Dios. Os lo dice un obrero,
un pobre del mundo, pero apóstol de Cristo, de ayer y de hoy, Cayetano el
yesero jubilado. (Junio).
EL VERDADERO PUEBLO DE DIOS
Muchas veces
se habla o se escribe refiriéndose al “pueblo de Dios”, pero ¿quienes son los
seres humanos que lo forman? En la Biblia leemos lo siguiente: “Os tomaré por mi pueblo y seré vuestro
Dios”, Éxodo 6, 7; “Vosotros sois
gente santa, ahora sois pueblo de Dios”, I Pedro 2, 9-10. Vemos pues, que
tanto en el llamado “Antiguo Testamento”, como en el Nuevo Testamento, se dice
lo mismo, o sea, “pueblo de Dios”. Antes, el pueblo de Dios era Israel, el
pueblo judío, y según la teología católica y protestante, ahora lo es su
llamado “cristianismo”, pero el apóstol Pedro, como todos los demás apóstoles,
no dice nada más que lo que enseña Cristo, y si tenemos muy presente las
palabras de Cristo: “Bienaventurados
vosotros los pobres, porque vuestro es el reino de Dios”, empezaremos a
comprender muchas cosas. En la historia humana vemos que desde miles de años
atrás, unos seres humanos que mandan y otros que obedecen; los que mandan
tienen el poder político, las armas, la religión, el oro, etc. y los que
obedecen son los esclavos, los que trabajan, o sea, los pobres del mundo. Pero
a través de la historia se presentan al mundo los profetas, tratando de ser un
poco de Luz en el camino de la vida, pero las religiones estando ya organizadas
y siempre dirigidas por sacerdotes, han procurado tener siempre el monopolio de
Dios, presentándose como los únicos intermediarios entre Dios y los seres
humanos, pero lo que siempre han conseguido ha sido enriquecerse. Y claro está,
que todas las religiones del mundo se han presentado siempre como el “pueblo de
Dios”. Pero la realidad es muy diferente, ya que las religiones han sido
siempre el brazo derecho de todas las guerras entre los seres humanos. ¿Dónde
están pues lo seres humanos que forman verdaderamente el pueblo de Dios? Lo
forman los obreros y obreras, los pobres del mundo, claro está, si tienen a
Dios en el corazón, si viven una vida sencilla en armonía con la Naturaleza,
con Dios. Dice Cristo: “Bienaventurados
vosotros los pobres, porque vuestro es el reino de Dios”. Los profetas,
antes de Cristo, ya decían: “Suben al
monte de Dios los de manos limpias y corazón puro”. La vida misma nos
enseña el camino recto, el de Dios, pero el egoísmo impide a mucha gente andar
alegremente por dicho camino, aunque no podemos negar que de vez en cuando
vienen al mundo seres humanos que andan de forma natural por dicho camino, y su
ejemplo sirve para todos, y claro está que no me refiero a sacerdotes, frailes,
monjas, rabinos, lamas etc. de las religiones organizadas que adoran a sus
dioses muertos, me refiero a Dios Universal. Por eso, nosotros, la iglesia
pobre de Cristo, somos la realidad del renacer de la sencilla iglesia que fundó
el obrero carpintero Jesús de Nazareth, el Cristo. Procuramos vivir en y con
Cristo, en y con Dios, y claro está, que de esta forma, y seguro que hay otros
seres humanos en la Tierra que hacen lo mismo, somos y formamos el verdadero
pueblo de Dios. Nuestro mensaje, pues, es el de Cristo, de su Evangelio el cual
resumimos de esta forma: “La iglesia verdadera en cada casa obrera, y Cristo en
el corazón”; eso es todo. Ánimos, pues, y adelante, Pueblo de Dios. (Julio).
MALLORCA Y LOS CRISTIANOS EN LA
HISTORIA
“En el siglo I después de Cristo, ya existían
colonias de ciudadanos romanos en Mallorca. La población romana debía estar
básicamente constituida por veteranos marineros, comerciantes y esclavos. No
sabemos cuando ni cómo llegó el cristianismo a Mallorca. Se habla de la llegada
de San Pablo, pero no se tiene base suficiente. Es seguro que el cristianismo
llegó a Mallorca, como en otras partes del Mediterráneo, por gente pobre que lo
daba a conocer, gente pobre que lo recibía con agrado. No sabemos nada de la
primitiva iglesia en Mallorca, parece seguro que eran pequeños grupos
independientes, y seguro que estos grupos lo formaban gente. Y según parece, en
Menorca ya había un grupo cristiano, formado por pobres, gente poco ilustrada.
En cambio, la comunidad judía ya tenía poder y riqueza. En el año 420, un
teólogo que visitó Mallorca, Consencio, escribió a San Agustín y le decía que
“en Baleares no había cristianos”; seguro que no encontró “cristianos”
intelectuales, pero no se puede aceptar que no había cristianos”. Hasta aquí hemos copiado del libro: “Historia de la iglesia en Mallorca”, de Pedro Xamena y Francisco
Riera, editorial Moll, 1986, páginas 12-17, escrito en mallorquín. Todo esto
confirma lo que ya hemos dicho en otras ocasiones, que somos descendientes de
los primeros cristianos israelitas que vinieron a Mallorca, muy poco tiempo
después de la muerte de Jesús, el obrero carpintero. Todo tiene una explicación
sobre los judíos pobres y los judíos ricos. Los judíos ricos seguían las
enseñanzas de Moisés, pero los pobres seguían las de Jesús de Nazareth. En las
Islas Baleares, judíos y no judíos, si eran obreros, o sea, pobres, entendían
mejor la sencillez del Evangelio de Cristo, el mensaje de Jesús, el carpintero,
que las complicadas enseñanzas de los rabinos del judaísmo. Es por eso que el
verdadero y único cristianismo se conservó siempre en casas particulares, casas
pobres. Las enseñanzas de Cristo eran transmitidas de padres a hijos, de forma
oral, en la misma familia. Por eso, al llegar el “cristianismo” católico del
Vaticano, con su poder político y religioso, era algo completamente extraño a
los cristianos de Cristo. Y después de su llamada “conquista” de Mallorca,
empezó la triste y amarga historia de la inquisición. Pero Dios tenía preparado
algo, que el catolicismo y protestantismo no podían imaginarse, el glorioso
renacer del cristianismo primitivo, el de Cristo, precisamente aquí en Mallorca,
la iglesia pobre de Cristo. Los que tienen el poder político y religioso, los
ricos, siempre han intentado dividir a los obreros, los pobres del mundo, con
religiones, partidos políticos, con la llamada cultura, militarismo etc. para
poder explotarlos. Pero en realidad, la humanidad está dividida en ricos y
pobres, explotados y explotadores, los que tratan de adorar a Dios, y los que
solo adoran al becerro de oro: el dinero, y no hay nada más que egoísmo. Por
esto, la iglesia pobre de Cristo aconseja a los obreros y obreras, los pobres
del mundo, que acudan a Cristo, que es la Luz y la Verdad de la Vida, y verán
las cosas claras, y tendrán la única salvación, siendo verdaderos apóstoles de
Cristo. (Julio).
LA LEY DE DIOS ES UNIVERSAL
En el libro
del Éxodo, capítulo 20, de la Biblia, están los llamados “Diez Mandamientos de
Dios”, pero en la misma Biblia podemos leer lo siguiente: “Porque muy cerca de ti está la palabra, en tu boca y en tu corazón,
para que la cumplas”. Deuteronomio 30, 14. Y si añadimos lo que dice Cristo
por boca del obrero Jesús de Nazareth: “Bienaventurados
vosotros los pobres porque vuestro es el reino de Dios”, Lucas 6, 20;
“De cierto os digo, si nos os
volviereis y fuerais como niños, no entrareis en el reino de los cielos”,
Mateo 18, 3; “Dejad a los niños y no les
impidáis venir a mi; porque de los tales es el reino de los cielos”, Mateo
19, 14; “Mas buscad primeramente el reino
de Dios y su Justicia”, Mateo 6, 33. Teniendo pues muy presentes todos
estos versículos de la Biblia, busquemos en la misma todo lo que a continuación
citamos en Números 31, 17; Deuteronomio 13, 9; Deuteronomio 2, 34; Deuteronomio
17, 1-5; Jueces 20, 48; Jueces 21, 11; 2ª Crónicas 15, 13; Jeremías 50, 21;
Ezequiel 9, 5; Oséas 13, 16. De esta forma clara y sencilla, veremos que la ley
de Dios no es letra muerta, sino que es Vida, Paz, Amor, Justicia,
Armonía, Bondad, etc. Y claro está, que no basta con creer en estas cosas, sino
que hay que sentirlas, vivirlas. Cuando la ley de Dios, Su palabra, está en el
corazón, sobran ya todas las religiones organizadas, y sobra hasta la misma
Biblia escrita por los hombres. No olvidemos que todo lo que está escrito en la
Biblia, antes se ha vivido, se ha sentido, se ha predicado, y después se ha
escrito, y claro está, que al escribir se ha podido manipular, quitar añadir,
etc. y el resultado es que en la misma Biblia se puede leer: “No matarás”, y,
“Mata, y no dejes a ninguno con vida”. No vamos seguir haciendo comentarios,
que los hagan los amigos que lean este mensaje, después de haber leído todos
los versículos citados. Pero una cosa es cierta, todos los seres humanos,
hombres y mujeres, viejos y jóvenes, ricos y pobres, si buscan de verdad
en su corazón la Ley de Dios, la encontrarán, porque es Universal, es única, es
eterna. La ley de Dios, Su palabra, es el infinito Amor. A través de la
historia de la humanidad, siempre han venido a este mundo seres que han vivido,
en la medida de sus posibilidades, el Amor de Dios; tenemos un buen ejemplo con
el obrero carpintero Jesús de Nazareth, el Cristo. Por eso, nosotros, la
iglesia pobre de Mallorca, tratamos de dar a conocer el mensaje de Cristo, y
repetiremos siempre las palabras del Maestro: “Buscad primero el reino de Dios”; de esta forma viviremos en, y
con, la Ley de Dios, y sobrarán religiones, partidos políticos, ejércitos, etc.
La Ley de Dios es universal, es para todos, ricos y pobres, hombres y
mujeres, pero quien no la viva en sí mismo, de nada le sirven los estudios, las
religiones, creencias, dogmas, ritos, etc. Ser cristianos de Cristo es ser,
pues, miembros activos de la única y verdadera religión de Dios, la Universal.
Ser cristiano es ser sacerdote y apóstol de Cristo, es ser la palabra de Dios
viviente. Ser cristiano de verdad no es solamente predicar las enseñanzas de
Cristo, es vivir, en y con, Cristo, en y con, Dios. (Julio).
EL VERDADERO PUEBLO DE DIOS
Muchas veces
se habla o se escribe refiriéndose al “pueblo de Dios”, pero ¿quienes son los
seres humanos que lo forman? En la Biblia leemos lo siguiente: “Os tomaré por mi pueblo y seré vuestro
Dios”, Exodo 6, 7; “Vosotros sois
gente santa, ahora sois pueblo de Dios”, I Pedro 2, 9-10. Vemos pues, que
tanto en el llamado “Antiguo Testamento”, como en el Nuevo Testamento, se dice
lo mismo, o sea, “pueblo de Dios”. Antes, el pueblo de Dios era Israel, el
pueblo judío, y según la teología católica y protestante, ahora lo es su
llamado “cristianismo”, pero el apóstol Pedro, como todos los demás apóstoles,
no dice nada más que lo que enseña Cristo, y si tenemos muy presente las
palabras de Cristo: “Bienaventurados
vosotros los pobres, porque vuestro es el reino de Dios”, empezaremos a
comprender muchas cosas. En la historia humana vemos que desde miles de años
atrás, unos seres humanos que mandan y otros que obedecen; los que mandan
tienen el poder político, las armas, la religión, el oro, etc. y los que
obedecen son los esclavos, los que trabajan, o sea, los pobres del mundo. Pero
a través de la historia se presentan al mundo los profetas, tratando de ser un
poco de Luz en el camino de la vida, pero las religiones estando ya organizadas
y siempre dirigidas por sacerdotes, han procurado tener siempre el monopolio de
Dios, presentándose como los únicos intermediarios entre Dios y los seres
humanos, pero lo que siempre han conseguido ha sido enriquecerse. Y claro está,
que todas las religiones del mundo se han presentado siempre como el “pueblo de
Dios”. Pero la realidad es muy diferente, ya que las religiones han sido
siempre el brazo derecho de todas las guerras entre los seres humanos. ¿Dónde
están pues lo seres humanos que forman verdaderamente el pueblo de Dios? Lo
forman los obreros y obreras, los pobres del mundo, claro está, si tienen a
Dios en el corazón, si viven una vida sencilla en armonía con la Naturaleza,
con Dios. Dice Cristo: “Bienaventurados
vosotros los pobres, porque vuestro es el reino de Dios”. Los profetas,
antes de Cristo, ya decían: “Suben al
monte de Dios los de manos limpias y corazón puro”. La vida misma nos
enseña el camino recto, el de Dios, pero el egoísmo impide a mucha gente andar
alegremente por dicho camino, aunque no podemos negar que de vez en cuando
vienen al mundo seres humanos que andan de forma natural por dicho camino, y su
ejemplo sirve para todos, y claro está que no me refiero a sacerdotes, frailes,
monjas, rabinos, lamas etc. de las religiones organizadas que adoran a sus
dioses muertos, me refiero a Dios Universal. Por eso, nosotros, la iglesia
pobre de Cristo, somos la realidad del renacer de la sencilla iglesia que fundó
el obrero carpintero Jesús de Nazareth, el Cristo. Procuramos vivir en y con
Cristo, en y con Dios, y claro está, que de esta forma, y seguro que hay otros
seres humanos en la Tierra que hacen lo mismo, somos y formamos el verdadero
pueblo de Dios. Nuestro mensaje, pues, es el de Cristo, de su Evangelio el cual
resumimos de esta forma: “La iglesia
verdadera en cada casa obrera, y Cristo en el corazón”; eso es todo.
Ánimos, pues, y adelante, Pueblo de Dios. (Julio).
LOS VERDADEROS TESTIGOS DE DIOS
En la Biblia
en el libro de Isaías, capítulo 43 y 44se hace referencia a los testigos de
Dios. “Vosotros sois mis testigos”,
dice Dios, 43, 10. Este dirá: Yo soy de Dios; el otro se llamará del nombre de
Jacob y otro escribirá con su mano a Dios y se apellidará con el nombre de
Israel”44, 5. “No temáis ni os
amedrentéis, que te lo hice oir desde antiguo, luego vosotros sois mis
testigos” 44,8. Y claro está estas palabras, el mensaje era para los
israelitas, era para ellos. Pero Jesús de Nazareth dijo: “Bienaventurados vosotros los pobres, porque vuestro es el reino de
Dios”, Lucas 6,20. Después han venido organizaciones religiosas,
catolicismo, protestantismo, además del judaísmo y todos los sacerdotes de
dichas organizaciones, quieren ser y se presentan, como los verdaderos testigos
de Dios, con los nombres de Eloim, Adonai, Johová, Yavé, etc. Basándose en el
Tetragrama -YHVH-. Pero Jesús de Nazareth, el obrero dice: “Aprended de mi”. El no tenía donde recostar su cabeza, era un
obrero, no era un sacerdote a sueldo, no era un comerciante, no era un militar,
banquero, etc. en una palabra no era un rico. Y escoge a otros obreros, otros
pobres para que sean sus apóstoles. Antes de Jesús ya vinieron los profetas,
ahora Jesús de Nazareth y los apóstoles, todos juntos forman el verdadero grupo
de los testigos de Dios. Ahora la iglesia pobre de Cristo, o sea la
restauración de la iglesia primitiva, damos el mensaje sencillo de Cristo.
Cuidado con las organizaciones religiosas que se auto-titulan testigos de Dios.
Los verdaderos testigos de Dios, viven lo que predican, en la Justicia de Dios,
en el cristianismo de Cristo. “No se puede servir a Dios y al dinero, los seres
humanos que se enriquecen a costa del trabajo de otros seres humanos, no son
testigos de Dios. en estos momentos históricos para la humanidad encontraréis
en todo el mundo testigos de Dios, que os dirán lo mismo: Justicia, Amor,
Bondad, Armonía, Paz, etc. pero de Dios y no de religiones organizadas
compuestas de ricos y pobres, explotados y explotadores. El verdadero testigo
de Dios no vende nada referente a lo
espiritual, se gana el pan trabajando, predica con el ejemplo, y no necesita
templos, locales, catedrales etc. para
predicar lo que vive, Ya somos muchos los obreros, los pobres del mundo, que tratamos
de dar la idea clara de lo que es el reino de Dios, en nuestro mundo y en
millones d e mundos del Infinito Universo; espíritus hermanos nuestros, cuyo
avance o progreso espiritual y no físico, técnico, etc. esto es propio de
mundos atrasados, como el nuestro que llamamos tierra. Cuando el Espíritu
avanza crece, no necesita naves físicas para recorrer el infinito Universo. Y
nuestro mundo no necesita militarismo, partidos políticos, leyes humanas,
religiones, sectas, etc. El Espíritu va creciendo y está en y con Cristo, en y
con Dios, es pues un verdadero testigo de Dios. Por esto nuestro mensaje, como
la iglesia pobre de Cristo es muy sencillo: “La iglesia verdadera en cada casa
obrera y Cristo en el corazón”, esto es todo, ánimos amigos. (Agosto).
EL VERDADERO MANANTIAL DE DIOS
“Porque yo
derramaré aguas en el desierto, y derramaré mi Espíritu sobre tu posteridad, y
mi bendición sobre tus descendientes”, Isaías 44,
3. Buda y sus discípulos estaban bebiendo en un cántaro que les ofrecía una niña
en un manantial, y Buda dijo: “Lo mismo
que si las raíces de un árbol están intactas, aunque esté cortado, crece con
vigor, igualmente, si no se apaga por completo la sed, el dolor vuelve siempre
de nuevo”. Jesús de Nazareth dijo a una mujer de Samaria: “Si conocieses el don de Dios, y quien es el
que te dice: “Dame de beber”, tú pedirías de él, y te daría agua viva”,
Juan 4, 5-10. El verdadero “manantial” de Dios, siempre va de forma directa al
ser humano. Pero en la historia de la humanidad siempre se han presentado seres
humanos que se han autotitulado “sacerdotes” de Dios, y claro, al ponerse como
intermediarios entre Dios y los seres humanos, han ensuciado el “agua pura y
limpia” que viene de Dios, y la han ensuciado tanto, que en lugar de limpiar, ensucia
y embrutece más a los seres humanos, dando como resultado guerras, hambres,
explotación del hombre por el hombre, ricos y pobres, robos, estafas,
asesinatos, vicios de todas clases, etc. y con el mundo lleno de religiones,
sectas, literatura que se vende en nombre de lo espiritual, etc. Pero el
manantial de Dios no es solamente agua, tierra, aire, vegetación, etc. o sea,
la vida física, es sobre todo vida espiritual, alimento del espíritu, por eso
dice Cristo por boca del carpintero Jesús de Nazareth: “Buscad primero el reino de Dios”, y claro está, que el reino de
Dios no está en las religiones, está en uno mismo, si busca de verdad a Dios en
la oración, en la meditación, en el deseo sincero de cambiar de vida, de
avanzar, de crecer espiritualmente, entonces empezaremos a beber agua viva,
limpia, pura, en el verdadero manantial de Dios. Y lo maravilloso es que de
esta forma todos los seres humanos, hombres y mujeres, bebiendo agua viva en
las “manos” puras de Dios, somos ya, de hecho, verdaderos sacerdotes y
apóstoles de Cristo, de Dios, y estamos capacitados para indicar el camino de
la verdadera y única fuente, del verdadero manantial, a otros seres humanos,
que vegetan en el triste desierto de la vida física. Cristo dice: “Si un ciego guía a otro ciego, ambos se
caerán”. Es triste ver como los sacerdotes de todas las religiones,
ensuciando el agua, pisoteándola, añadiéndole cosas y cada religión dándole un
sabor y un color diferente, y lo mas
triste, lo que da pena es que todos quieren cobrar por esa agua sucia,
facilitando así el enriquecimiento de los sacerdotes y sus jerarquías, de todas
las religiones del mundo, y a través de toda la historia humana. Por eso,
nosotros, la iglesia pobre de Cristo, desde Mallorca lanzamos al mundo el
mensaje sencillo: “Obreros y obreras, los pobres del mundo, haced lo mismo que
nosotros, acudid al verdadero manantial de Dios, de forma directa, sin ninguna
clase de intermediarios, y si los ricos quieren hacer lo mismo, ya lo saben,
Cristo dice: “No se puede servir a Dios y
al dinero”. Animos amigos. (Agosto).
JESÚS DE NAZARETH Y LA
RESURRECIÓN
“Yo se que mi
redentor vive”, Job 19, 25; “Y he aquí el velo del templo se rompió en dos, de alto a bajo y la
tierra tembló, y las piedras se hundieron y abriéndose los sepulcros y muchos
cuerpos de santos que habían dormido se levantaron y salido de los sepulcros,
después de su resurrección, vinieron a la santa ciudad y aparecieron a muchos”,
Mateo 27, 51-53; “Más Jesús dando una
grande voz, espiró. Entonces el velo del templo se rasgó en dos de alto abajo”,
Marcos 15, 37-38; “Y cuando era como la
hora de sexta fueron hechas tinieblas sobre toda la Tierra hasta la hora nona.
Y el Sol se obscureció y a gran voz dijo: “Padre en tus manos encomiendo mi
espíritu”, y habiendo dicho esto expiró”, Lucas 23, 44-46; “Y como Jesús tomó el vinagre dijo:
“Consumado es”. Y habiendo inclinado la cabeza, dio el espíritu”. Juan 6,
63. Aquí tenemos bien clara la idea de la resurrección. El catolicismo y el
protestantismo enseñan que Jesús de Nazareth resucitó, y también los demás
seres humanos que salieron de los sepulcros. La pregunta que le podemos hacer a
los teólogos es la siguiente: “¿Dónde están ahora Jesús de Nazareth y los
muchos cuerpos de santos, que resucitaron con Jesús?” Si están en el cielo,
¿para qué les sirve el cuerpo físico? Y si no están en el cielo, ¿dónde están
ahora estos cuerpos físicos en nuestro mundo? En los evangelios se dice que en
la tumba, donde pusieron a Jesús estaba vacía después de la resurrección. Pero
el apóstol, Pablo dice: “Y vivo, no ya
yo, mas vive el Cristo en mi”, Gálatas 2, 20. Y Jesús de Nazareth dice: “Porque donde están dos o tres congregados
en mi nombre, allí estoy en medio de ellos”, Mateo 18, 20. Todo esto nos da
la idea clara para entender lo que dice Cristo: “El espíritu es que da vida, la carne nada aprovecha”. Y si
tenemos presente las palabras de Job: “Yo
sé que mi redentor vive”, todo queda bien aclarado y podemos dar gracias a
Dios, bendito sea. Job dice: “Mi redentor vive”, y esto lo decía
muchísimo antes de la venida o nacimiento de Jesús de Nazareth, el Cristo.
Cristo era, y es, el eterno Espíritu de Dios, el que está siempre presente, en
y con los seres humanos que lo buscan de verdad. Dios es Espíritu, y los seres
humanos estamos hechos a su imagen; somos pues, espíritus. El cuerpo físico
tiene su importancia, pero no tanta como se le ha querido dar. Dice Cristo: “Porque en la resurrección, ni los hombres
tomarán mujeres, ni las mujeres maridos; mas son como los ángeles de Dios en el
cielo”, Mateo 22, 30. Dice Cristo: “Y
la resurrección de los muertos, ¿no habéis oído lo que es dicho por Dios?: “Yo
soy el Dios de Abraham, y el Dios de Isaac, y el Dios de Jacob?” Exodo 3,
6; “Dios no es Dios de muertos, sino de
vivos”, Mateo 22, 31-32. De esta forma lo entendemos la iglesia pobre de
Cristo, y así lo predicamos, entendiendo muy bien lo que siempre se nos ha
dicho de padres a hijos desde los primeros cristianos israelitas que vinieron a
Mallorca: “Dios sobre todas las cosas”. Bendito sea Dios. Amén. (Agosto).
LA VERDAD OS HARA LIBRES
Estos días
hemos leído en la prensa que, “La cúpula católica cree que hay crisis moral
porque la sociedad olvida a Dios”. Nosotros, la Iglesia pobre de Cristo, damos
la razón al clero, o sea, a la jerarquía católica al citar el evangelio de
Juan, sobre las enseñanzas de Cristo, cuando dice: “La Verdad os hará libres”, por esto nosotros obreros y obreras que
formamos la Iglesia pobre, ya nos hemos dado de baja de la religión de los
ricos, catolicismo, protestantismo, etc, y procuramos tener la Verdadera
Iglesia en nuestra propia casa, y lo resumimos así, “La Iglesia verdadera en cada casa obrera, y Cristo en el corazón”, esto
es todo, así de esta forma tan sencilla no necesitamos locales, socios, cuotas,
sacerdotes a sueldo, etc, y claro está, tampoco vendemos literatura religiosa,
libros, revistas, etc, y tratamos de vivir las sencillas enseñanzas del obrero
carpintero Jesús de Nazareth el Cristo, y así de esta forma tratando de
vivirlas podemos predicarlas; y claro está que la moral, la vida espiritual, la
vida normal y sencilla, no nos viene impuesta por nadie, ya que Cristo nos
enseña y nos guía, sin intermediarios de ninguna clase de las religiones
organizadas. Es muy triste ver ahora, después de tantos siglos de dominio
católico en muchas partes del mundo, y sobre todo aquí en España, el clero
católico se queja, pero esto es el resultado normal de lo que han enseñado a la
gente, olvidando que Cristo dice: “Lo que
se siembra se recoge”. Es normal amigos sacerdotes, Cristo dice: “No se puede servir a Dios y al dinero”,
la Iglesia de Cristo no es una organización para ganar algo que es extraño a
Cristo, como es el poder político y el dinero, y tanto el catolicismo como el
protestantismo, a través de los siglos os habéis olvidado de Cristo,
arrebatando la Iglesia a los pobres, y claro está, que la sociedad sin Dios es
una porquería, pero nos referimos al Dios Universal, y no a las religiones
organizadas por los hombres, compuestas de ricos y pobres, explotados y explotadores,
y dirigidas por jerarquías y clero con estudios de seminario, con poder
político y apoyándose en el dinero, en el capitalismo. Pero la sociedad, toda
la humanidad puede tener a Dios, puede vivir en y con Dios, nosotros la Iglesia
pobre, lo hemos conseguido, por esto aconsejamos a todos los obreros y obreras,
los pobres del mundo, que se den de baja de la religión de los ricos, y
procuren tener de verdad a Dios en la vida misma de cada uno. Y referente a los
ricos, también les aconsejamos que busquen a Cristo, y comprendan de una vez
que no se puede servir a Dios y al dinero; y claro está que nadie puede hacerse
rico sin robar, y el mayor robo en la humanidad es que unos pocos se enriquecen
a costa del trabajo de muchos, y esto es injusticia, es inmoral, y mientras no
tengamos justicia en nuestro mundo, no habrá paz. Pero el cristianismo de
Cristo es paz, armonía, justicia, bondad, alegría, etc, y “La Verdad nos hace libres”, esto es el mensaje de Cristo, que ya
vivimos y lo predicamos la Iglesia pobre de Cristo, en Mallorca y en otras
partes del mundo, ánimos pues y adelante amigos. (Noviembre).
EL GRAN RETORNO DE LA IGLESIA
DE CRISTO
La verdadera
Iglesia de Cristo, fundada por un obrero carpintero Jesús de Nazareth era
pobre, los primeros apóstoles y demás seguidores de Cristo eran gente obrera,
hombres y mujeres sin estudios, digamos religiosos o teológicos, etc., pero
formaban la verdadera Iglesia de Cristo, sin dogmas, jerarquía, sacerdotes a
sueldo, etc., ya que todos, hombres y mujeres eran sacerdotes y apóstoles de
Cristo. Esto ocurrió en Israel hace casi dos mil años, pero ya en otros lugares
del mundo se empezaba a tener idea clara de la Iglesia de Cristo, pero también
empezó al mismo tiempo la persecución a los cristianos. Mucho años después
nació el llamado catolicismo, que arrebató por completo el sencillo y único
cristianismo de los pobres. Empezando la amarga y triste historia del orgulloso
Papado que dominó muchos siglos el mundo conocido. Después del mismo clero
católico salió la reforma, el protestantismo de Lutero, siguiendo más o menos
los mismos pasos que el catolicismo, estudios de seminario, teológicos,
filosóficos, etc., jerarquía, sacerdotes o pastores a sueldo, ritos,
ceremonias, muchas sectas, y sobre todo admitiendo como miembros a ricos y
pobres, explotados y explotadores, y de esta forma, tanto el catolicismo como
el protestantismo son la Iglesia de los ricos, y claro está que no tiene
absolutamente nada que ver con la verdadera Iglesia pobre de Cristo. Pero
nosotros los obreros, hombres y mujeres, hemos hecho posible aquí en Mallorca,
el renacer del cristianismo verdadero, o sea el gran retorno de la única y
verdadera Iglesia pobre de Cristo; reconocemos claro está, que tanto en el
catolicismo como en el protestantismo, habrá personas de buena fe que buscan a
Cristo y tratan de seguirle. Pero nosotros los pobres y algunos siendo
descendientes de los primeros cristianos israelitas que vinieron a Mallorca,
muy poco tiempo después de la muerte de Jesús de Nazareth, el Cristo, y que nos
llegaron sus sencillas enseñanzas de forma oral de padres a hijos, somos los
verdaderos apóstoles de Cristo, sacerdotes de Dios. Ahora bien, no tratamos de
excluir, de separar a nadie, ha sido el catolicismo y el protestantismo que se
separaron, se alejaron de la verdadera Iglesia de Cristo. Pero nosotros, la
Iglesia de Cristo, hacemos un fraternal llamamiento al clero católico y
protestante, para que acudan de verdad a Cristo, que vivan en y con Cristo, y
aconsejen a sus seguidores que hagan lo mismo, y así unos y otros podrán
pertenecer a nuestra Iglesia pobre la de Cristo. Tened presente lo que dice
Cristo, “No se puede servir a Dios y al
dinero”, y, “Bienaventurados vosotros
los pobres, porque vuestro es el reino de Dios”. Y no olvidéis nunca que
Jesús de Nazareth el Cristo, trabajaba de carpintero y dijo, “Aprended de mí”. Nosotros, la Iglesia
pobre de Cristo, en Mallorca y en otras partes del mundo, pedimos a Dios que
perdone y tenga pues misericordia del catolicismo y del llamado protestantismo,
sobre todo de su jerarquía, clero, etc, que en su triste y amarga historia han
errado tanto fuera del verdadero camino de Dios. Nuestro lema es: “La Iglesia verdadera en cada casa obrera, y
Cristo en el corazón”, esto es todo, ánimos y adelante amigos, acudid de
verdad a Cristo, su verdadera Iglesia os espera. (Noviembre).