Mensajes 1995


EL CREADOR DEL INFINITO UNIVERSO ES MI DIOS

 

Sin acudir a mi descendencia de los primeros israelitas cristianos que llegaron a Mallorca, poco tiempo después de la muerte de nuestro Rabí, el obrero carpintero Jesús de Nazareth el Cristo, ni acudir a las sencillas enseñanzas de Cristo, que han llegado hasta mí de forma oral de padres a hijos, ni acudir a mis propias experiencias espirituales, pero sí razonando, veo y comprendo que alguien o algo ha hecho posible mi existencia, ya que yo no me he creado a mí mismo, no  puedo negar pues a mi Creador. Me engendraron mis padres y mis padres por sus padres y así hasta llegar a los primeros seres humanos, que alguien los creó o se crearon así mismo, pero tanto de una manera como de otra, tengo pues mi Creador que me ha creado y no puedo pues negar a mi Creador y al ver otros seres creados, plantas, animales, el Sol, la Luna, las estrellas, etc., veo algo del infinito Universo y veo más y mejor la grandeza de mi Creador. Y si yo llamo Dios a mi creador estoy en mi derecha, pero lo están también otros seres humanos en nuestro mundo, y también están en su derecha los que niegan a su Creador, o sea, los llamados ateos, que no sabemos si lo son de los dioses muertos de todas las religiones, pues yo mismo soy ateo de dichos dioses, pero yo lo tengo muy claro, no puedo negar a mi Creador, mi Dios. Y teniendo las idea claras de que he sido creado, puedo ahora acudir a las sencillas enseñanzas de Cristo, que han llegado hasta mí y seguramente a muchos otros seres humanos en nuestro mundo, Cristo nos habla de Justicia, Amor, Paz, Bondad, Armonía, etc. y veo que todo esto es de Dios, pues pertenece a mi Creador, ya que la llamada justicia humana no tiene la Justicia de Dios, ya que la humanidad está dividida en ricos y pobres, explotados y explotadores, unos que se enriquecen a costa del trabajo de los otros y vemos que el egoísmo, envidia, maldad, etc. domina la mente de muchos seres humanos, comprendo que la idea básica sobre nuestro Creador para mucha gente es nula. Pero yo tengo el derecho y el deber de expresar libremente mis ideas, como lo tiene todo ser humano en este mundo. Y Cristo nos da la idea clara de la única y verdadera Religión de Dios, la Universal, que no tiene nada que ver con las religiones organizadas por los hombres. Cuando Cristo dice: “Donde están dos o tres reunidos en mi nombre, allí estoy yo”, y “Cuando oras, rezas, etc., tienes que hacerlo en secreto, en ti mismo” y  esto yo lo veo muy normal, yo mismo que he sido creado, dirigirme en oración a mi Creador, a mi Dios. Y no me avergüenzo de ello, ni siento ningún temor cuando a mi Creador lo llamo Dios y me siento muy contento de ser cristiano de Cristo, soy pues apóstol de Cristo y sacerdote de Dios en mi propia vida y nadie puede negarme este derecho, como tampoco yo puedo negarlo a los demás seres humanos. Ánimos amigos pobres del mundo, buscad a Cristo en vuestra propia vida, en vuestro corazón y podréis pertenecer a la única Iglesia Pobre, la de Cristo. Así sea. Amén. (Enero).

 

 

¿POR QUÉ LA HUMANIDAD ESTÁ DIVIDIDA EN RICOS Y POBRES?

 

Los primeros seres humanos que habitaron en nuestro mundo eran todos pobres y tenían que buscarse la comida, esto era trabajar para comer, pero dejando la historia primitiva y acudir a la historia más cercana y llegando a la actualidad, trataremos de contestar a la pregunta con que empieza este mensaje, ¿por qué la humanidad está dividida en ricos y pobres?, y podemos contestar que es porque unos seres humanos se hacen ricos a costa del trabajo de otros seres humanos y esta explotación, o sea, la ley del más fuerte, está legalizada y apoyada por los gobiernos, por los militares y por los sacerdotes de todas las religiones en nuestro mundo, y con esta explotación el hambre, las guerras, etc. y una humanidad dividida en ricos y pobres, se habla de cultura, de educación, etc. y se dice o se quiere hacer creer a los pobres que esto es civilización. Y claro está que todo este engaño, esta injusticia social, a veces produce revoluciones sangrientas, pero aquí en este mensaje nos referimos a todas las religiones del mundo y en particular a las religiones que se fundan en la Biblia, el judaísmo, el catolicismo, el protestantismo, etc., que tienen por base los mandamientos de Dios y entre éstos están: “No matarás, No robarás, Ama a tu prójimo como a ti mismo, etc.” y el obrero carpintero Jesús de Nazareth, el Cristo, dice que los dos principales mandamientos de Dios son, “Ama a Dios sobre todas las cosas y Ama a tu prójimo como a ti mismo”. No hacer caso de estos mandamientos es burlarse de Dios y del prójimo. Y nosotros los obreros y obreras que formamos la Iglesia Pobre, la única Iglesia que fundó nuestro Rabí Jesús de Nazareth, preguntamos a los sacerdotes que se fundan en la Biblia, ¿con qué derecho tratan de monopolizar a Dios?, si los únicos que podemos hablar de Dios somos todos los pobres del mundo. Todos los pobres del mundo, hombres y mujeres, que buscan al Espíritu de Dios en si mismo, que los cristianos llamamos Cristo, si tienen pues a Cristo en su propia vida, se convierten en verdaderos apóstoles de Cristo y sacerdotes de Dios y si el rico se hace pobre puede también hacer lo mismo, o sea, buscar a Cristo en sí mismo. La humanidad está dividida en ricos y pobres por falta de Luz, o sea, falta de Cristo, por esto las tinieblas oscurecen la mente de millones de seres humanos que les domina el egoísmo, la maldad, ambición, envidia, etc. y por consecuencia hay explotación, hambre, guerras, etc., pero a través de la historia humana siempre hay una Luz que alumbra el camino. Y nosotros los obreros y obreras que formamos la Iglesia Pobre, tenemos las ideas claras y aconsejamos a todos los pobres del mundo que busquen a Cristo en sí mismo, que procuren no traer mucho hijos al mundo, basta ya de aumentar el número de pobres, que todos se den de baja de la religión de los ricos, llámese como se llame, en una palabra, seamos todos apóstoles de Cristo y sacerdotes de Dios. Así sea. (Enero).

 

 

HACERSE RICO A COSTA DEL PRÓJIMO ES PECADO

 

Amigos, éste mensaje es para aclarar un poco mas las cosas; basándonos en la Biblia, en la Torá, o sea en el llamado antiguo Testamento, están los mandamientos de Dios, y en el llamado nuevo Testamento, Cristo dice, por boca del obrero carpintero Jesús de Nazareth: “Los dos principales mandamientos son, ama a Dios sobre todas las cosas, y ama a tu prójimo como a ti mismo; no hay mandamiento mayor que éstos”. Sin acudir a todas las religiones del mundo y citar aqui solamente las que se fundan en la Biblia, el judaísmo, el catolicismo y el protestantismo, etc., ya es suficiente para que nosotros, los obreros y obreras que formamos la Iglesia Pobre, la que fundó el obrero carpintero Jesús de Nazareth, digamos con propiedad que las organizaciones religiosas llamadas religiones, que se fundan en la Biblia, no son pues la Religión de Dios; el judaísmo que espera al Mesías, y el catolicismo, protestantismo, etc., que dicen que ya tienen al Mesías, pero éstas llamadas religiones están compuestas de ricos y pobres, o sea, unos creyentes que se hacen ricos a costa del trabajo de otros creyentes de la misma religión, y esto sin contar las guerras que organizan los ricos, y todo esto con el apoyo y visto bueno de sus sacerdotes, y a esto le llaman civilización. Pero Dios dice, “no robarás”, y enriquecerse a costa del trabajo del prójimo, es burlarse de Dios y del prójimo, o sea, todo esto es pecado mortal. Y aquí, en éste mensaje citamos y empleamos la palabra “pecado”, porque católicos y protestantes la emplean mucho para cosas mucho menos importantes, olvidándose por completo de los mandamientos de Dios. En éste caso podemos entender y decir que los ateos son mas sinceros que los que dicen que creen en Dios, pero se burlan de Dios. El creyente católico, protestante, etc., que sea comerciante, empresario, etc., que tiene obreros que trabajan para él y se queda con los beneficios, o sea, el dinero que produce dicho trabajo, y no lo reparte entre todos, o crea nuevos puestos de trabajo, está pues robando, ya que la Ley de Dios dice, “Ama a tu prójimo como a ti mismo”, “No robarás”, “No matarás”, etc.; se podrá decir que se cumple la ley humana, pero el creyente en Dios que se hace rico a costa del trabajo del prójimo, se burla de Dios y del prójimo. Y lo triste es ver como éstos creyentes tienen el visto bueno, el apoyo de sus sacerdotes, católicos, protestantes, etc., y esto sin contar las demás religiones del mundo, pero aquí nos referimos solamente a los que se auto-titulan cristianos, pero que al no cumplir la Ley de Dios, en una palabra, al no seguir de verdad a Cristo, al no tenerle en si mismo, no se es cristiano. Hacerse rico a costa el trabajo del prójimo, o armar guerras, apoyarlas, etc., es pecado mortal. Y nosotros, los obreros y obreras que formamos la única Iglesia Pobre, la de Cristo, tenemos el derecho y el deber de aconsejar a unos y a otros que busquen a Cristo en sí mismo. Ánimos amigos. Así sea. Amén. (Febrero).

 

 

LA MISIÓN DE LA IGLESIA POBRE

 

La misión de los obreros y obreras que formamos la Iglesia Pobre es la de evangelizar a la religión de los ricos, sacerdotes y creyentes católicos, protestantes, etc., para que acudan de verdad a Cristo y que lo busquen en su propia vida, teniendo muy presente el sermón de la montaña, del obrero carpintero Jesús de Nazareth, el Cristo. Practicando y predicando las sencillas enseñanzas de Cristo, somos los pobres Bienaventurados y el reino de Dios es nuestro pero esto también está al alcance de los ricos si se hacen pobres y siguen a Cristo, esto es el verdadero evangelio de Cristo, no hay otro, muy claramente lo dice Cristo: “No se puede servir a Dios y al dinero”, por lo tanto el verdadero cristiano es pobre, pacífico, bondadoso, de limpio corazón, justo, etc., y claro está, no puede ser militar, sacerdote a sueldo, de seminario, etc., o sea, el ser humano que quiere ser cristiano no puede ser rico ya que nadie puede hacerse rico si no es a costa del trabajo del prójimo. Pero no basta ser pobre, ya que hay pobres que quieren ser ricos, tengamos pues las ideas claras, lo primero es buscar a Cristo en sí mismo, en la propia vida, y podremos predicarlo a los demás siendo de verdad cristianos de Cristo. En otros mensajes ya hemos dicho que no es lo mismo ser católico del Papa, protestante de Lutero, que cristiano de Cristo, el mensaje de Cristo es que todo ser humano tiene que hacer un verdadero cambio de vida, tiene que procurar vivir en y con Dios y cuando el Espíritu de Dios, que los cristianos llamamos Cristo, nos guía y nos alumbra el camino de la vida, somos apóstoles de Cristo y nuestra misión es  predicar el evangelio a los demás, sean ricos o pobres, sacerdotes o creyentes, etc., no tratamos de juzgar a nadie, ni buscamos socios, pero sí ayudar al prójimo para que encuentre a Cristo. Y pedimos a los católicos y protestantes, y demás religiones del mundo, que comprendan que no criticamos a nadie, en lo humano el médico no odia al enfermo, trata de curarle, Cristo es el único médico del espíritu y nosotros los que formamos la Iglesia Pobre, experimentamos la gran mejoría teniendo a Cristo y con alegría y seguridad en nuestra salud espiritual, aconsejamos a los demás seres humanos que busquen a Cristo. Nuestra misión es clara y sencilla, nos buscamos creyentes que nos sigan a nosotros, pero sí a Cristo, nosotros lo resumimos así, “La Iglesia verdadera en cada casa obrera y Cristo en el corazón”, esto es todo. Cristo dice: “Bienaventurados los de limpio corazón”, esto es tener bondad, no tener odio, maldad, envidia, egoísmo, etc., y vivir la vida sin ensuciarla, esto es ser verdadero cristiano de Cristo. No se trata pues de creer o no creer en Dios, de practicar ritos, ceremonias, etc., se trata de vivir siempre en y con Cristo, con Dios, tratad de tener cada uno a Cristo en sí mismo. Nuestra misión es practicar y predicar el sencillo evangelio de Cristo y decir a los demás que hagan lo mismo. Así sea. (Febrero).

 

 

MENSAJE AL SÍNODO CATÓLICO DE MALLORCA

 

Este mensaje es para el sínodo católico de Mallorca, y nosotros, los obreros y obreras que formamos la Iglesia Pobre, nos alegramos de la intención católica de renovarse, de tratar de entender y predicar a Cristo y según la prensa local, los católicos dicen lo siguiente: “Teniendo en cuenta, expuso Teodoro Úbeda, que las nuevas realidades sociales y culturales configuran un hombre distinto, hay que buscar los medios y los métodos más adecuados para llegar al pensamiento y al corazón del hombre que espera y desea el Evangelio muchas veces sin darse cuenta de ello”. Pero vuestra organización está compuesta de ricos y pobres, o sea, unos creyentes que se hacen ricos a costa del trabajo de otros creyentes, y Cristo dice que los dos principales mandamientos de Dios son: “Ama a Dios sobre todas las cosas y ama al prójimo como a ti mismo”. Hacerse rico, pues, a costa del trabajo del prójimo, es burlarse de Dios y del prójimo, y lo peor es que son creyentes que se hacen ricos a costa del trabajo de otros creyentes, y pasa lo mismo en el protestantismo. Comprendemos que vuestra tarea es muy grande y difícil, pero no es imposible, tenéis que volver al cristianismo primitivo, practicar y predicar la pobreza con Cristo, sacerdotes y creyentes, tenéis que buscar a Cristo cada uno en sí mismo, en su propia vida, vivir, pues, en y con Cristo, con Dios. Este es el único y verdadero evangelio de Cristo, y cuando el ser humano, hombre o mujer, lo vive, se convierte en verdadero apóstol de Cristo y sacerdote de Dios, y para esto no necesita estudios de ninguna clase, de seminario, etc., ya que el Amor de Dios no es algo para estudiar o predicar, es para vivir y no olvidéis que Cristo es Vida, Paz, Luz, Bondad, etc.. Nos alegra que os interese renovaros, avanzar en el verdadero camino de Cristo. Los obreros y obreras que formamos la Iglesia Pobre, oramos, rezamos por vosotros y os alentamos y aconsejamos a que de verdad busquéis a Cristo, ya que es la única solución a todos los graves problemas de la humanidad, pero también tened muy presente que Dios dice, “No matarás”, no podéis, pues, colaborar en ninguna clase de militarismo, ya que esto sólo produce guerras, buscad a Cristo y tendréis la Luz de Cristo, y claro está, que cuando hay Luz se ven las cosas muy claras. Pedimos a Dios que vuestro sínodo sea positivo y no sea una triste comedia más, en vuestra triste historia, y que sea un verdadero renacer y búsqueda sincera de todos vosotros a Cristo, al Dios del infinito Universo. Y si queréis, podéis contar con nosotros para daros ideas personalmente, y por favor, no veáis en esto vanidad, orgullo, etc., ya que es el resultado de una vida, en y con Cristo, no somos una secta más, no buscamos socios, etc., somos el cristianismo, la Iglesia Pobre, o sea, el verdadero cristianismo, tan desconocido en el mundo. Ánimos pues, amigos y adelante, un fraternal saludo de nosotros y nuestra bendición apostólica. Así sea. Amén. (Febrero).

 

 

EN LA IGLESIA DE CRISTO NO HAY RICOS

 

En éste mensaje nos referimos solamente al llamado cristianismo católico, protestante, etc., por la sencilla razón de que nosotros los obreros y obreras que formamos la Iglesia Pobre, la que fundó el obrero carpintero Jesús de Nazareth, el Cristo, no estamos ni podemos estar compuestos de ricos y pobres, o sea, unos creyentes que se hacen ricos a costa de otros creyentes, y esto con el visto bueno de los sacerdotes de éstas organizaciones llamadas las religiones, no son pues la Iglesia de Cristo. Y Jesús de Nazareth dice muy claramente que los dos principales mandamientos de Dios son: “Ama a Dios sobre todas las cosas, y ama a tu prójimo como a ti mismo”; hacerse pues rico a costa del trabajo del prójimo, y encima auto-titularse cristiano, es burlarse de Dios y del prójimo, y de esto se callan los sacerdotes católicos y los protestantes, y se hacen cómplices de ésta injusticia social, como también de la otra barbaridad como son las guerras. Ya hemos dicho en otros mensajes que no basta ser pobre para ser cristiano de Cristo, es necesario vivir en y con Cristo, con Dios, es pues vivir una auténtica vida de oración y trabajar para comer, pero esto en la propia casa, en la vida diaria, pero no encerrándose en conventos, monasterios, etc.; los cristianos lo resumimos así, “La iglesia verdadera en cada casa obrera y Cristo en el corazón”. Pero comprendemos muy bien que hay católicos que tienen fe en alguna imagen de Jesús, de santos, etc., y nosotros respetamos a éstas personas, pero sabemos por propia experiencia, que el cristianismo no necesita imágenes, porque vive en y con Cristo, con Dios. No es el cristianismo de Cristo solamente un asunto social, ni hablar de ricos y pobres, de la explotación, etc., es pensando y tener por base la Justicia de Dios, que no tiene nada que ver con la llamada justicia de los hombres, o sea, los cristianos hemos entendido muy bien el evangelio de Cristo, y al predicar y practicar el cristianismo de Cristo, podemos decir con propiedad, que en la Iglesia de Cristo no hay ricos, y muy claro lo dice Jesús de Nazareth: “No se puede servir a Dios y al dinero”. Los obreros y obreras que formamos la Iglesia Pobre, somos apóstoles de Cristo y sacerdotes de Dios, pero esto está al alcance de toda la humanidad; si el ser humano busca en sí mismo al Espíritu Universal de Dios, que los cristianos llamamos Cristo. Pero esto no se consigue con estudios teológicos de seminario, en libros, etc., ya que buscar a Dios es algo muy personal, es la experiencia espiritual propia, y no lo que digan los demás. Es el espíritu del ser humano que tiene que buscar a Dios, volver al Padre Dios, nuestro Creador, es el gran retorno del hijo pródigo de que nos habla la Biblia. Ánimos amigos católicos, protestantes, etc., buscad de verdad a Cristo si queréis ser cristianos y pertenecer a la única y verdadera Iglesia que fundó el obrero carpintero Jesús de Nazareth, el Cristo, la Iglesia Pobre. Ánimos pues y adelante. Así sea. Amén. (Marzo).

 

 

DIOS Y CREYENTES CONTRA CREYENTES

 

En todas las religiones del mundo vemos lo mismo, o sea, creyentes ricos y creyentes pobres en la misma religión, están pues estas religiones compuestas de ricos y pobres, explotados y explotadores, así pues están donde el triste espectáculo de que unos creyentes se hacen ricos a costa del trabajo de otros creyentes, con el apoyo o visto bueno de los sacerdotes y esto en todas las religiones del mundo. Y cuando se hacen guerras son creyentes de diferentes religiones que se matan y en otras ocasiones se matan los creyentes de la misma religión, y esto siempre y en todos los casos con la bendición de los sacerdotes. En España mismo hemos tenido la triste experiencia de sufrir guerra civil, matándose españoles contra españoles y en lo religioso eran creyentes contra creyentes, de la misma religión, o sea, la católica, aunque uno de los dos bando se declaraba ateo. Ahora bien, aquí nos referimos a las religiones que se fundan en la Biblia, el judaísmo, catolicismo, protestantismo, etc., y en el llamado antiguo y nuevo testamento de la Biblia, encontramos los mandamientos de Dios, “No matarás, no robarás, honra a tus padres, ama a tu prójimo como a ti mismo, etc.”, pero estas organizaciones religiosas se olvidan de los mandamientos de Dios, los pisotean y así se burlan de Dios y del prójimo. Y los creyentes se explotan unos a otros, unos se hacen ricos a costa del trabajo de otros, o se matan en las guerras que los creyentes ricos organizan y todo esto con el apoyo y visto bueno de los sacerdotes que se fundan en la Biblia. Nosotros, los obreros y obreras, que formamos la Iglesia Pobre, la única que fundó el obrero carpintero Jesús de Nazareth, el Cristo, tenemos el derecho y el deber de aconsejar a los sacerdotes, judíos, católicos, protestantes, etc. que al no cumplir los mandamientos de Dios, dejen de hablar de Dios y se dediquen a otras cosas. Pero si quieren ser sacerdotes de verdad obedezcan a Dios y digan a sus creyentes que hagan lo mismo, todos. La Religión de Dios es Universal, es clara y sencilla, Jesús de Nazareth dice: “Los mandamientos de Dios se resumen en dos, Ama a Dios sobre todas las cosas y Ama a tu prójimo como a ti mismo”, y Jesús dice que no hay mandamiento mayor que estos, esto es todo. Nuestro Rabí, Jesús de Nazareth, no organizó una nueva religión, simplemente nos recuerda la única y verdadera Religión de Dios, el evangelio es la buena noticia que nos da Cristo, por boca de Jesús de Nazareth, es poder acudir a Dios de forma directa en uno mismo, sin intermediarios de ninguna clase y claro está, cumpliendo los mandamientos de Dios. Trabajar para comer, pero no para hacerse rico y llevar una vida de oración, de bondad, de armonía y tener la Iglesia en casa y Cristo en el corazón, y predicarlo a los demás para que hagan lo mismo. Esto es ser creyente de la única Religión de Dios, o sea, la Iglesia Pobre, y todo ser humano que la practique se convierte en un verdadero apóstol de Cristo y sacerdote de Dios. Ánimos amigos. Así sea. Amén. (Marzo).

 

 

TODOS SOMOS VERDADEROS SANTUARIOS DE DIOS

 

Todos los seres humanos hombres y mujeres que vivimos en este mundo que llamamos Tierra, somos santuario, o templo de Dios, todos somos profetas, apóstoles, sacerdotes de Dios, todos pues somos dioses en potencia, pero muchos millones de seres humanos lo ignoran, no lo saben y pierden el tiempo en cosas materiales de la vida. Y el resultado es negativo, es triste, es egoísmo, odio, maldad, vicios de toda clase, injusticia social, guerras, hambre, etc. y una humanidad dividida en ricos y pobres, o sea, unos que se hacen ricos a costa del trabajo de otros, muchos partidos políticos, ejércitos  y muchas religiones, resumiendo todo esto vemos un caos total, una verdadera confusión y le llaman civilización. Pero también está la parte positiva, ya que hay muchos seres humanos, hombres y mujeres, que buscan una solución, un camino de paz y de luz, para su atormentado espíritu y lo buscan en las religiones, grupos llamados esotéricos, en los santuarios, templos, monasterios, conventos, etc., que hay en todo el mundo, ignorando por completo que Dios está en uno mismo, ya que alguien o algo ha hecho posible nuestra existencia, no es tontería pues llamarle Dios. Y todo ser humano que entienda esto es porque lo practica, es pues un verdadero profeta y en el caso cristiano es un apóstol de Cristo, sacerdote de Dios y podemos decir y aconsejar a los demás seres humanos, que no pierdan el tiempo en buscar por el mundo lo que tienen tan cerca, Dios en sí mismo. El verdadero santuario o Templo de Dios está en uno mismo y cualquier lugar en nuestro mundo sirve para estar con Dios, ya que todo ser humano que lleve en sí mismo al Espíritu de Dios, que los cristianos llamamos Cristo, lo tiene en sí mismo. Y muy claro está que donde sea que se encuentre el ser humano que lleva en sí mismo a Dios, allí hay en acción Paz, Bondad, Amor, Armonía, Justicia, etc.. Sobran pues todas las religiones del mundo, sobran los santuarios, templos, monasterios, conventos, etc., construidos por los hombres y después visitados y habitados por seres humanos que dicen que buscan la Paz de Dios. Y todo esto es más negativo que positivo. No olvidemos nunca que los primeros seres humanos que buscaron a Dios, no podían acudir a santuarios, templos, monasterios, etc., tampoco a las religiones por la sencilla razón de que no existía nada de todo esto. Encontrar a Dios en sí mismo, en la propia vida, es el verdadero y único templo en este mundo, es el Santuario de Dios, aparte del gran Templo que es el infinito Universo. Y todo ser humano, hombre o mujer, que tenga en sí mismo a Dios, pertenece a la Religión Universal de Dios, y adora a Dios, “En Verdad y Espíritu”, como nos dice Cristo por boca del obrero carpintero Jesús de Nazareth. Esto es el verdadero evangelio de Cristo, buscad el reino de Dios, que está en uno mismo y no en religiones o lugares en este mundo. Y los ricos deben saber lo que dice Cristo, “No se puede a servir a Dios y al dinero”. Ánimos pues, pobres del mundo, buscad a Cristo en el verdadero Santuario, en vosotros mismo. Amén. (Abril).

 

 

DIOS NO HACE NI DICE TONTERÍAS

 

El infinito Universo con sus mundos, Soles ,estrellas, etc., con un número también infinito creado por Dios, no ha sido creado por adorno, para alegrar nuestra vida, mirando al cielo, el Universo no es por ejemplo, un gran palacio para ser habitada una sola y pequeña habitación, con gente dentro, como sería nuestro mundo. Y los sacerdotes de la religión judía con tantos reparos en pronunciar el nombre de Dios y lo ridiculizan diciendo que Dios dirigía la construcción del Templo, hasta en los detalles de adornos, cortinas, etc., esto se puede leer en la Biblia, Éxodo-25, capítulo entero. Y el catolicismo hace Dios al obrero carpintero Jesús de Nazareth y le hacen decir que si los seres humanos no son evangelizados y bautizados por los sacerdotes católicos, no se salvarán y más o menos dicen lo mismo los protestantes, o sea, sus pastores y todos hacen decir a Jesús de Nazareth lo siguiente, “Y le preguntaron también los soldados, ¿y nosotros qué haremos?  y Jesús les dijo, no hagáis extorsión a nadie, etc. y contentaros con vuestra paga”, Lucas 3-14. Y ahora si hacemos actuales estas palabras, sería más o menos así, “No discutáis las ordenes de vuestros jefes, conducid bien los tanques, aviones de combate, etc., y claro está, también centenares con vuestra paga y no temáis por vuestra vida, para esto están los sacerdotes en los cuarteles, barcos de guerra, etc., para daros el visto bueno para ir al cielo”. Y bromas a parte, vemos dos cosas en todo esto, por parte de los sacerdotes que se fundan en la Biblia, o una gran pillería, o una gran ignorancia, pero sí que está muy claro que la única y verdadera Iglesia de Cristo, en nuestro mundo, es nuestra Iglesia Pobre, formada por obreros y obreras en todo el mundo, que viven la vida en y con Dios, somos pues los verdaderos apóstoles de Cristo y sacerdotes de Dios. No ridiculizamos a Dios, no nos burlamos de sus mandamientos y adoramos a Dios en su gran Templo que es el infinito Universo y al vivir la vida que Dios nos da, procuramos vivir la vida sin ensuciarla, convirtiendo en un particular templo nuestro propio corazón. Y viendo la humanidad dividida en ricos y pobres, unos que se hacen ricos a costa del trabajo de otros, y en particular los que se fundan en la Biblia, viendo que unos creyentes se hacen ricos a costa del trabajo de otros creyentes, con el visto bueno de los sacerdotes del judaísmo, catolicismo, protestantismo, etc., la cosa ya no puede estar más clara, no se trata de hacer una crítica porque sí, los que formamos loa Iglesia Pobre tenemos el derecho y el deber de decir a los sacerdotes y sus creyentes que, Dios no hace ni dice tonterías, Dios es Sabiduría, Amor, Paz, Bondad, Justicia, Armonía, etc. es el Creador y Recreador del infinito Universo y no es el dios ridículo y muerto de todas las religiones de nuestro mundo que llamamos Tierra. La Iglesia Pobre aconseja a todos que sin tener a Cristo, o sea, el Espíritu de Dios en sí mismo, que no hablen de Dios, que no digan tonterías y tomen en serio a nuestro Creador que llamamos Dios. Así sea. Ánimos amigos. Amén. (Abril).

 

 

HAY EN EL UNIVERSO UNA ÚNICA VERDAD

 

Muchas personas en el mundo se preguntan, ¿quién tiene toda la Verdad?, políticos, religiosos, filósofos, científicos, astrónomos, astrólogos, espiritistas, etc., todos presentan sus razones, sus teorías y las presentan como la única Verdad y claro está, que todos tenemos derecho a dar o exponer nuestras ideas, o sea, nuestra verdad particular que dista mucho de ser la Verdad del infinito Universo, por lo tanto de nosotros mismos. En la misma naturaleza hay una sola Verdad, en todo el mundo nuestro que llamamos Tierra, el fuego quema, la comida calma el hambre, el agua calma la sed, etc.. Los seres humanos, los animales, etc. necesitamos respirar para vivir y todos nacemos y morimos, en fin, que la vida, la muerte, el infinito Universo con sus soles, mundos, etc. todo es matemático, todo es una sola Verdad. Pero el espíritu del ser humano si avanza, crece espiritualmente, entiende las cosas de la vida humana, del Universo mismo, etc. de forma única, comprende muy bien el Amor de Dios y en plan sencillo podemos llamar bondad, y cuando se llega a la cima de la montaña espiritual, todos los que están arriba ven lo mismo. Y claro está, que cualquier ser humano, hombre o mujer, blanco o negro, etc. y en cualquier lugar del mundo, todos estos seres humanos con el espíritu avanzado dicen lo mismo, será, claro está, con diferentes palabras, pero con la única Verdad Universal. Y en el mundo se habla de diferentes culturas, religiones, civilizaciones, etc. de la humanidad, que no son más que pequeñas verdades humanas, pero no quiere decir que hay que rechazarlas, pero sí que ya es hora de superarlas; basta ya de las muletas para poder andar por la vida, andemos nosotros mismo buscando la Verdad y no dejemos que nadie nos entorpezca el camino, con filosofías raras, políticas, religiosas, etc. o con aquello, nadie tiene toda la Verdad, ya que el ser humano que dice esto, solamente se basa en las ideas humanas y desconoce el avance espiritual. La bondad no es una idea, es algo que se vive y los seres humanos que viven la bondad, viven lo mismo, esto es la Verdad, no es pues una idea que se llama cultura, es una experiencia espiritual, y esta experiencia es la misma en todo el infinito Universo; pero no se trata de compasión, sentimentalismo, etc. la bondad es el Amor de Dios que se manifiesta a través del espíritu del ser humano, es sabiduría de Dios y es igual en todas partes, esto es pues la Verdad. Todos los profetas del mundo a través de la historia humana, han dicho siempre lo mismo, Amor de Dios, Justicia de Dios, etc. o sea, la bondad y el obrero carpintero Jesús de Nazareth el Cristo, nos trae la buena nueva, o sea, el sencillo pero único evangelio, el Amor de Dios, la Paz de Dios, el reino de Dios, en uno mismo, en cada ser humano y esto es la iglesia primitiva de Cristo, la que practicamos y predicamos los obreros y obreras que formamos la Iglesia Pobre, el único cristianismo en nuestro mundo; la Verdad de Dios, que está siempre al alcance de toda la humanidad. Amén. (Mayo).

 

 

TODOS PODEMOS SER SACERDOTES DE DIOS

 

Todos los seres humanos, hombres y mujeres, podemos ser sacerdotes de Dios, ya que alguien o algo ha hecho posible nuestra existencia, como también la existencia del infinito Universo, llamara pues Dios a nuestro Creador no es ninguna tontería, el atraso, la tontería está en lo que han hecho algunos hombres a través de la historia de la humanidad, presentarse al mundo como sacerdotes de Dios, frente a los demás seres humanos y querer ser intermediarios entre Dios y los hombres, y claro está, de este Dios que no han visto jamás. Todos tenemos el derecho de poder buscar a Dios y ser nuestro propio sacerdote, o sea, buscar la Luz de Dios para poder ver las cosas claras. Hace miles de años que la humanidad está dividida en ricos y pobres, explotados y explotadores, o sea, unos que se hacen ricos a costa del trabajo de otros, el capitalismo es pues una especie de trinidad diabólica compuesta de gente rica, militares y sacerdotes, y a través de la historia humana, siempre van juntos explotando a los pobres, y matándolos en la guerras que organizan los ricos y los sacerdotes de todas la religiones del mundo colaboran con ellos, en esta injusticia o barbaridad social. Pero siempre y a través de la historia de la humanidad, vemos algunos hombres y mujeres que buscan a Dios en sí mismo, y nos hablan de Dios de forma muy diferente de lo que dicen los sacerdotes, de todas la religiones del mundo, a estos seres humanos se les conoce como profetas, Mesías, etc. y aquí en este mensaje nos referimos en particular al obrero carpintero Jesús de Nazareth, el Cristo,  por ser yo uno más de la Iglesia Pobre. Y Cristo dice, “No se puede servir a Dios y al dinero”, y “El reino de Dios es de los pobres”, además Jesús de Nazareth nos dice: “Aprended de mí”, Jesús era un pobre, era un obrero, no era un sacerdote a sueldo, no era un militar, no era empresario, comerciante, etc., no era pues un hombre rico, era un obrero que trabajaba de carpintero. Nosotros los obreros y obreras que formamos la Iglesia Pobre, la que fundó Cristo, tenemos las ideas claras, y aconsejamos a todos lo pobres del mundo que procuren no tener muchos hijos, que no aumenten más la pobreza en el mundo, basta ya de paro obrero, de dar más soldados para las guerras que organizan los ricos, pero los pobres deben darse de baja de la religión de los ricos, llámese como se llame, que no hagan el servicio militar, etc., y sobre todo que aparten de su mente toda clase de egoísmo. Los obreros y obreras que formamos la Iglesia Pobre sabemos por propia experiencia, que el ser humano cuando vive en y con Cristo, con Dios, se convierte en un verdadero apóstol de Cristo y sacerdote de Dios, y estos es tan sencillo que no necesita ninguna clase de estudio humano, ya que es una búsqueda de Dios en sí mismo, la oración y la meditación nos conduce al encuentro con Dios. La Iglesia Pobre dice a la iglesia rica, tienes poder y dinero como nunca se ha visto, pero la Iglesia Pobre tenemos a Cristo. Amén. (Mayo).

 

 

TODOS SOMOS HABITANTES DEL UNIVERSO

 

Sí amigos, todos somos habitantes, o sea, ciudadanos del infinito Universo, Dios es Espíritu y nosotros estamos creados a su imagen, somos pues todos espíritu, empleando cuerpos físicos para nuestra propia educación, evolución, etc. y Dios desde la eternidad, crea y recrea Soles, mundos, estrellas, etc. para servirnos de escuela de la vida, Universal, somos pues todos miembros en potencia de la verdadera y única Religión de Dios. Y claro está, que no todos estamos en el mismo avance espiritual, pero al final todos llegamos a la meta, o retorno a Dios, pero mientras tanto habitamos en mundos diferentes, con cuerpos físicos diferentes y empleamos métodos también diferentes, por ejemplo, aquí en este mundo que llamamos Tierra, empleamos la llamada sabiduría humana, ciencia, cultura, religiones, etc. dividiendo la Tierra en países o naciones, etc., militarismo, la humanidad dividida en ricos y pobres, etc. pero todo esto en este mundo, y en otros mundos del infinito universo, demuestran el gran atraso, o sea, la ignorancia de la mayoría de los espíritus recién alumnos o parvularios de la escuela Universal. Pero los estudiantes más avanzados ayudan, o tratan de ayudar a los menos avanzados, pero no siempre se les hace caso, estos son los llamados Hermanos Mayores, que en nuestro mundo Tierra tenemos buena prueba de ello, pero no siempre son conocidos por la gente, a veces son amigos, vecinos, incluso de la misma familia propia, a veces la llamada sociedad desprecia a estos Hermanos Mayores, porque la gran mayoría de esta sociedad, solamente ve o se fija en lo exterior del ser humano, o sea, la llamada civilización, cultura, sabiduría humana, etc. , mira lo mental, pero no ve lo espiritual. Y está muy claro el por qué, durante tantos siglos, sea la humanidad en nuestro mundo, un total fracaso, a pesar de tantos avances técnicos, científicos, etc. por la sencilla razón de que el infinito Universo no está creado simplemente para un avance o progreso material, ya que l o material, el cuerpo físico, etc. son como herramientas de trabajo para el espíritu, pero hay muchos espíritus que ya no necesitan muchas de estas herramientas, para ser ciudadanos del infinito Universo. Es muy triste ver como muchos seres humanos en nuestro mundo Tierra, pierden el tiempo en acumular cosas materiales, por ejemplo, dinero, tierras, casas, etc. y al mismo tiempo tienen creencias en Dios, cielo, etc. y otros en no creer en Dios y fomentan  a sostener una humanidad dividida en ricos y pobres, explotados y explotadores y matándose en guerras, etc. pero esto también está o sucede en otros mundos, tan atrasados como el nuestro, en el infinito Universo. Pero hay un número infinito de mundos, pero hay también un número infinito de mundos muy avanzados, espiritualmente claro está, que ya no necesitan cuerpo físico, sus habitaciones son los llamados cielos, o sea, “habitaciones en la casa del Padre”, como muy bien nos dice Cristo por boca del obrero carpintero Jesús de Nazareth, y también dice: “Las palabras que os hablo son Verdad y Espíritu, la carne nada aprovecha”. Esto es el evangelio de Cristo, la Iglesia Pobre. Amén. (Junio).

 

 

MARÍA LA MADRE DE JESÚS Y LOS RICOS

 

El catolicismo al referirse a la madre del obrero carpintero Jesús de Nazareth, el Cristo, la llama Madre de Dios, Virgen María, dándole muchos nombres, por ejemplo, Virgen de Lluc, Virgen de Montserrat, Pilar, Fátima, Lourdes, etc., pero nunca la llaman Virgen pobre, la Madre de Dios de los pobres, etc. y el clero católico procura siempre presentar a María como algo celestial, un ser más allá de lo humano. En las llamadas apariciones de María no hay nada, ni se dice nada sobre la pobreza de María. Nosotros, los obreros y obreras que formamos la Iglesia Pobre, tenemos el derecho y el deber de presentar a María tal como era en Nazareth de Galilea, de Israel, María estaba casada con un obrero carpintero y uno de sus hijos llamado Jesús trabajaba de carpintero con su padre José. Aquí vamos a copiar lo que nos dice un evangelista, lo copiamos del llamado nuevo testamento, traducción católica, “Dijo María, mi alma magnifica al Señor y salta de júbilo mi espíritu en Dios, mi Salvador, porque ha mirado la humildad de su sierva, por eso todas las generaciones me llamarán Bienaventurada, porque ha hecho en mí maravillas el Poderoso, cuyo nombre es santo, su misericordia es de generación en generación, sobre los que le temen. Despliega el poder de su brazo y dispersa a los que se engríen, con los pensamientos en su corazón. Derriba a los poderosos de sus tronos y ensalzó a los humildes. A los hambrientos los llenó de bienes y a los ricos los despidió vacíos, etc.”, Lucas 1-46 al 55. Aquí vemos a María, una simple obrera, una mujer pobre, es normal, pues, que diga estas cosas. Sin entrar en polémica sobre su virginidad, aparición del ángel, etc., vemos claramente una fiel creyente judía, y teniendo las ideas muy claras en lo social en su tiempo, sobre ricos y pobres y que por desgracia hace miles de años que la humanidad está dividida en explotados y explotadores, o sea, unos que se hacen ricos a costa del trabajo de otros, de esta forma vemos a un lado los ricos, los militares y los sacerdotes de todas las religiones, siempre juntos a través de la historia humana, al otro lado están los esclavos, los obreros, o sea, los pobres. Pero los obreros y obreras que formamos la Iglesia Pobre, somos libres porque tenemos a Cristo en nuestra propia vida. Y María, madre de Jesús de Nazareth, estaba y está con nosotros, sencillamente porque era y es pobre y su Dios es nuestro Dios, María dice: “Salta de júbilo mi espíritu en Dios mi Salvador”. Y nosotros también podemos decir lo mismo, al tener a Cristo, o sea, el Espíritu de Dios, nuestro Salvador en nuestra propia vida, en nosotros mismo y María es una fiel creyente en Dios, en la única y verdadera Religión de Dios, que no está organizada por los hombres. La Iglesia Pobre es la Religión de Dios, ya que no tratamos de organizar nada más que nuestra propia vida con Cristo, esto es el evangelio de Cristo, que a través de la historia humana, está dando Dios al mundo. Pero con su Espíritu en el ser humano, o sea, Cristo. Amén. (Junio).

 

 

¿QUÉ ES SER CRISTIANO DE CRISTO?

 

En la historia humana encontramos hombres y mujeres que trataron de encontrar a Dios, o sea, encontrar a nuestro Creador, ya que alguien o algo ha hecho posible nuestra existencia, pero dando diferentes nombres al Creador y Recreador del infinito Universo, y claro está, que estos seres humanos no tenían más libro que la propia naturaleza, el Sol, las estrellas, etc. y su propio espíritu, mente, etc., creciendo en sí mismo, en su propia vida. A estos seres humanos los llamamos profetas, pero aquí en este mensaje nos referimos al Cristo y al obrero carpintero Jesús de Nazareth, que lo llevaba en sí mismo, y claro está que al decir Cristo, entendemos por tal, el Espíritu de Dios y si acudimos a lo que está escrito en la Biblia, en el llamado antiguo y nuevo testamento, comprenderemos muy bien en que se basan las religiones, judía y la católica, protestante, etc., o sea, en la letra muerta. Pero  el cristiano de Cristo no se basa en la letra, pero sí en las propias experiencias espirituales, el cristiano es el que tiene a Cristo en sí mismo, en su propia vida, no se basa en creencias, ritos, dogmas, etc. ya que viven en y con Dios. Las actividades de cada día del cristiano son sencillas, oración y trabajo y procurar tener siempre las ideas claras sobre la vida, procurar no traer muchos hijos al mundo para no aumentar el número de pobres, de obreros en paro y de soldados para las guerras que organizan los ricos. El cristiano es pacífico y se aparta de todo lo que sea militar, el cristiano no busca hacerse rico, trabaja simplemente para poder comer, vestirse, etc., el cristiano no es el que practica ceremonias de una religión, el cristiano es el que vive en y con Dios, y claro está, que no es cristiano el que solamente cree en Cristo. Y nosotros con este mensaje aconsejamos a los católicos, protestantes, etc., sacerdotes y creyentes que si les falta Cristo en sí mismo, no se auto-titulen cristianos y que comprenda ya de una vez, que no es lo mismo creer que ser. El verdadero cristianismo lo forman los cristianos, hombres y mujeres, gente pobre pero que tiene a Cristo y se puede comprender muy bien que el verdadero cristianismo nunca ha producido nada negativo, como por ejemplo las organizaciones religiosas, catolicismo, protestantismo, etc., por ejemplo las cruzadas, guerras, grandes negocios, la inquisición, y todo en nombre de Dios, burlándose así de Dios y de su Espíritu que llamamos Cristo. Los cristianos de Cristo no necesitamos templos, sacerdotes a sueldo, etc., basta la propia casa en que se vive, nada pues de sacerdotes con estudios, ya que el verdadero y único “Maestro” es Cristo, que guía y enseña el camino de Dios al cristiano y a todo ser humano que lo busque en sí mismo, aunque sea con nombre diferente. Y amigos, ésta es la misión de los obreros y obreras que formamos la Iglesia Pobre, practicar y predicar a Cristo, y este mensaje es para dar idea clara de lo que es ser cristiano de Cristo. Así sea. Amén. (Julio).

 

 

LA VERDAD SOBRE JESÚS DE NAZARETH

 

Me llamo Cayetano Martí Valls, nacido en Inca, Mallorca, hace muchos años que resido en Palma, soy un obrero yesero ya jubilado, en la actualidad tengo 75 años de edad; empecé a trabajar a la edad de nueve años, no fui pues a la escuela  más que unas pocas semanas, no tengo pues estudios. En mi familia solo somos dos hermanos, mi hermano se llama José, yo estoy casado y tenemos una sola hija, también casada y tienen una niña de cinco años, soy pues abuelo.

Pero toda mi vida ha sido siempre estar en contacto con Dios de forma directa, a través de su Espíritu que llamamos Cristo, el "Maestro". Y ahora, con otros obreros y obreras, hemos hecho posible el renacer de la Iglesia primitiva, la Iglesia Pobre que fundó el obrero carpintero Jesús de Nazareth en Israel hace casi dos mil años.

Es ahora pues el momento de dar a conocer al mundo, la verdad sobre Jesús de Nazareth, que además de la enseñanza de Jesús, que de forma oral de padres a hijos ha llegado a nuestra familia, tengo mis propias experiencias espirituales, la oración, la meditación, y mis viajes astrales que practico de forma consciente, o sea, a voluntad desde mi infancia. Conozco algunas de mis reencarnaciones y una en particular de hace dos mil años de la cual guardo un grato recuerdo, y que ahora estoy reviviendo algo parecido de aquellos días.

Amigo lector, esto es como un cuento de hadas, "Era una vez un joven llamado Juan, etc." No deseo que me crean solo por simpatía, es más, yo aconsejo a los historiadores, teólogos, etc., que traten de estudiar todo esto antes de dar su opinión; y que todos comprendan que éste mensaje, es único en la historia del llamado cristianismo católico y protestante, por la sencilla razón de que éstas organizaciones religiosas, desconocen por completo lo que es el verdadero cristianismo de Cristo.

Empecemos pues así:

"Poco tiempo después de la muerte del obrero carpintero Jesús de Nazareth el Cristo, llegaron a Mallorca algunos israelitas, la mayoría eran creyentes de la religión judía de Moisés, pero había unos pocos seguidores del rabí Jesús de Nazareth, y sus sencillas enseñanzas pasaron de padres a hijos de forma oral, llegando hasta mi propia familia, ya que somos descendientes de aquellos israelitas, hoy conocidos con el mote de "chuetas", originado por la inquisición católica, que vino a Mallorca después de la llamada conquista  por el Rey Jaime I, obligando por la fuerza a todos los habitantes de la isla, ha ser bautizados en la iglesia católica, y los que se negaron o resistieron, fueron muertos. Y los que quedaron con vida fueron católicos por fuera, pero la mayoría seguían en secreto la religión propia que habían traído nuestros antepasados de Israel; unos la de Moisés y otros, las enseñanzas de Jesús de Nazareth.

Y ahora, después de casi dos mil años, doy a conocer la vida y predicación del rabí Jesús de Nazareth, según nuestra tradición oral, y mis propias experiencias espirituales; Jesús de Nazareth, o el "Buen Jesús", como le hemos llamado siempre de forma cariñosa en nuestra familia, nació en Nazareth, un pequeño pueblo de Galilea de Israel, hace unos dos mil años; toda su vida trabajó de carpintero con su padre José, pero en la pequeña carpintería no había trabajo para todos, pues Jesús tenía otros hermanos, y muchas veces no tenían trabajo de carpintería y se dedicaban a la guarda de ovejas de algún vecino; pero Jesús era el rabí de la casa. Jesús era admirado y respetado por todos, hasta por el mismo rabí que dirigía la pequeña sinagoga del pueblo, y en muchas ocasiones le pedía consejo o alguna aclaración sobre algún punto de la Torá, o sea, Ley de Dios, y Jesús le aclaraba las cosas.

Jesús era un rabí, o sea, un maestro para el pueblo, que ya empezaba a ver en Jesús un profeta, y poco a poco gentes de otros pueblos acudían a Jesús, y algunos amigos suyos, gente pobre, pescadores, pastores, etc., le seguían cuando Jesús visitaba otros pueblos para predicar; pero empezó a llamar la atención de los poderosos sacerdotes que dominaban y dirigían las mentes y espíritu de todo el pueblo de Israel. Al principio vieron en Jesús un fiel seguidor de la Ley de Dios, traída por Moisés; Jesús era pues un buen judío. Pero los sacerdotes empezaron a ver que Jesús de Nazareth defendía siempre a los de su clase, los pobres, y esto no convenía a los sacerdotes, ni tampoco a los romanos que habían invadido Israel.

Jesús predicaba la paz, la justicia, el amor al prójimo practicado y no solamente predicado; Jesús repetía siempre que los dos principales mandamientos de Dios, son éstos, "ama a Dios sobre todas las cosas y al prójimo como a ti mismo". Y claro está, que el que ama al prójimo como a sí mismo, no puede hacerse rico a costa de su trabajo; Jesús trabajaba y predicaba, pero ya en secreto amaba a una mujer, María de Magdala, conocida hoy como María Magdalena, poco recomendable por su vida bastante libre se rumoreaba si tenía algún hijo en secreto, pero Jesús se decidió y le propuso casarse con ella, pero Magdalena no quería hacer daño a Jesús y se negaba, pero al final se casaron, pero con opiniones contrarias de familiares y amigos; y tuvieron un hijo, y le pusieron el nombre de Juan.

Ya mucha gente en Israel conocía a Jesús, el rabí carpintero; sus dichos y hechos eran discutidos por unos, y alabados por otros, y en algunas ocasiones curaba a los enfermos; y sus palabras eran luminosas y llenas de esperanza para los pobres, por eso ya muchos se preguntaban si Jesús era el Mesías, tan esperado por el pueblo de Israel. Pero muy pocos comprendían que el hombre llamado Jesús, llevaba en sí mismo el Espíritu de Dios, que mucho tiempo después se le conoció con el nombre de Cristo, y que dicho Cristo ha estado siempre presente en toda la historia humana, y que lo tiene en sí mismo todo ser humano que lo busca de verdad. Esto es el Mesías que unos en vano lo esperan, fuera de sí mismo; y otros dicen que ya lo tienen, basándose en sus propias creencias, pero todos se equivocan al faltarles en ellos mismos las experiencias espirituales.

Jesús de Nazareth fue un profeta más a través de la historia humana, pero fue el único que predicó que todo ser humano puede dirigirse a Dios de forma directa, sin intermediarios de ninguna clase; y claro está que esto va en contra de los intereses de los sacerdotes de todas las religiones del mundo. Jesús de Nazareth nació, vivió y murió como los demás seres humanos, nada pues de la virginidad de su madre María; nada de la resurrección de su cuerpo físico, ya que Cristo por boca de Jesús, siempre se refirió a las cosas del espíritu en sus predicaciones; y esto se comprende fácilmente si se tiene presente que, todos los seres humanos estamos hechos a imagen de Dios, pero el Creador y Recreador del infinito Universo, que llamamos Dios, es Espíritu, nuestra imagen y semejanza es espiritual; las cosas materiales, cuerpos físicos, etc., todo se trasforma, y solamente es el espíritu, que como Dios mismo es eterno.

Entendiendo éstas cosas es fácil entender lo siguiente:

Jesús de Nazareth era mas bien feo, nariz muy abultada, bajito, algo encorvado y cojeaba un poco, pero su mirada era penetrante y cariñosa, la gente le escuchaba con agrado y le seguía; y es que la bondad en el ser humano es el Amor de Dios personificado, ayer, hoy, siempre atrae la bondad y convence, ésto es el verdadero y único evangelio.

Pero la gente en Israel con dinero y con poder religioso y político, no estaba de acuerdo con Jesús, y se buscó la forma de poder condenarlo, y lo crucificaron. Murió Jesús el hombre, que seguramente reencarnó en otras vidas, para ayudar a otros seres humanos, pero el Cristo, Espíritu de Dios, vive y está siempre presente; y los descendientes de aquellos israelitas cristianos que llegaron a Mallorca, lo sabemos por propia experiencia; Cristo vive en nosotros, y en todo ser humano que lo busque de verdad en su propia vida; Cristo dice, "cumple los mandamientos de Dios; ama a Dios sobre todas las cosas; ama a tu prójimo como a ti mismo; lo que no quieras para tí, no lo quieras para los demás; procura siempre hacer el bien; nunca te olvides de Dios; el reino de Dios es de los pobres; lo que se siembra se recoge; procura tener siempre tu corazón limpio, sé pacífico, bondadoso y no temas nada, yo siempre estoy contigo".

Y nuestros padres y abuelos siempre nos decían: “procurad siempre estar con Dios y mandad a paseo a los sacerdotes de todas las religiones, pero no odiéis a nadie; buscad siempre la paz, la concordia, vale más comer pan con aceite en armonía en la casa, que buenas comidas en discordia y odio; estemos siempre todos en armonía con nuestro "Buen Jesús", y no olvidemos nunca que el egoísmo es la mala bestia, y el negocio es negativo, es malo, porque consiste en comprar barato y vender más caro, y no solamente los productos, lo que es peor el salario de los obreros, nadie se hace rico trabajando honradamente, pero sí a costa del trabajo de los demás, burlándose de Dios y del prójimo, ya que Dios Dice "Ama a tu prójimo como a ti mismo"; si un empresario, comerciante, etc., reparte los beneficios que produce el trabajo de sus obreros, entre todos, o crea nuevos puestos de trabajo, éste está bastante cerca de la verdad de Dios, es ya un cristiano de verdad".

Los cristianos no entendemos al llamado cristianismo católico y protestante, tan complicado y cambiado y compuesto de ricos y pobres, explotados y explotadores, unos creyentes que se hacen ricos a costa de otros creyentes, con el silencio, la complicidad de los sacerdotes de ambos lados. Y claro está que éstas organizaciones religiosas, no tienen nada que ver con las sencillas enseñanzas del obrero carpintero Jesús de Nazareth, el Cristo; y claro está que nosotros comprendemos que el cristianismo no es solamente una cosa social, es oración y trabajo, así, de ésta forma, "La iglesia verdadera en cada casa obrera, y Cristo en el corazón", esto es todo amigos. Amén. (Julio).

 

 

COBRAR PARA PREDICAR NO ES CRISTIANO

 

Las organizaciones religiosas, el catolicismo, protestantismo, etc., con sacerdotes, pastores, etc., con estudio de seminario, sueldo, etc., no tienen nada que ver con nuestra Iglesia Pobre, que fundó el obrero carpintero Jesús de Nazareth el Cristo; y estos sacerdotes con su jerarquía, componen la iglesia rica, y claro está, no son la Iglesia de Cristo. Comprendemos que en estas organizaciones religiosas hay personas que tratan de vivir una vida cristiana, pero al no salir de la iglesia rica, su ejemplo es más negativo que positivo; por ejemplo Francisco de Asís, Catalina Tomás, Jorge Fox, etc., buscaron a Cristo en sí mismos, y formaron parte de nuestra Iglesia Pobre, la de Cristo. Pero el catolicismo con su Vaticano, Papa, cardenales, obispos, etc., que nos arrebataron el cristianismo, no es la Iglesia Pobre de Cristo, ni el protestantismo salido del catolicismo, ya que unos y otros tienen sus creyentes ricos y pobres, o sea, unos que se hacen ricos a costa del trabajo de otros, burlándose así de Dios y del prójimo, además de consentir y apoyar guerras, etc., y todo en nombre de Dios. Pero la Iglesia Pobre, la única Iglesia de Cristo, compuesta de obreros y obreras, somos todos apóstoles de Cristo y sacerdotes de Dios, y damos la idea clara de que las organizaciones religiosas, el catolicismo, protestantismo, etc., no son cristianas, ya que sus dirigentes, sacerdotes, pastores, etc., dicen que están con los pobres pero ellos mismos no son pobres, y por mucho que hablen o prediquen sobre Cristo, no son pues cristianos. Y esta gente no comprende o no quieren comprender, la Verdad de Cristo, ya que Jesús de Nazareth nos dice, "Aprended de mi" , y Jesús de Nazareth era pobre, trabajaba de carpintero, por lo tanto el verdadero cristiano trabaja para comer, no se hace rico, y predica con propiedad el evangelio de Cristo, por la sencilla razón de que lo practica, lo vive; nosotros lo resumimos así: "la iglesia verdadera en cada casa obrera y Cristo en el corazón", esto es todo. Todas las religiones del mundo predican sobre Dios, más o menos lo mismo, pero aquí nos referimos a las organizaciones religiosas que se auto-titulan cristianas, catolicismo, protestantismo, etc., y no tratamos de ofender a nadie, pero la Iglesia Pobre, la única Iglesia de Cristo, no admitimos que la iglesia rica sea cristiana, y aconsejamos a sus sacerdotes y creyentes, que no se auto-titulen cristianos, sin tener a Cristo en sí mismo. Y que los sacerdotes católicos y protestantes con su jerarquía, comprendan ya de una vez, que nadie es cristiano sin tener a Cristo en si mismo, en su propia vida. Y amigos sacerdotes, católicos y protestantes, a la hora de citar versículos de la Biblia, para defender vuestros intereses, ¿por qué no acudís a lo que dice Jesús de Nazareth?, que dice, "aprended de mi", y Jesús de Nazareth era pobre, era un obrero que trabajaba de carpintero, practicaba y predicaba el evangelio, o sea, el verdadero camino de Dios. Ánimos amigos y adelante, buscad a Cristo. Así sea. Amen. (Julio).

 

 

UN BREVE ESTUDIO SOBRE CRISTO

 

Los obreros y obreras que formamos la Iglesia Pobre, tenemos el derecho y el deber de dar la idea clara sobre algo que los dirigentes científicos, sacerdotes, etc. no se ponen de acuerdo, o sea, el ser humano y su espíritu, pero unos y otros con sus teorías científicas y religiosas están en la oscuridad y no entienden nada, por faltarles la propia experiencia espiritual. Pero ya el obrero carpintero Jesús de Nazareth, el Cristo, –entendiendo por Cristo el Espíritu Universal de Dios–, nos dice, "Yo soy la Verdad y la Vida", pero no dice que la sangre sea la vida del ser dejando a parte los otros seres que tienen vida, los animales, plantas, etc., ateniéndonos pues solamente al ser humano, podemos preguntar a los científicos lo siguiente; si a un ser humano se le hace una transfusión de sangre, porque ha perdido mucha sangre en una enfermedad, accidente, etc. para que no muera, ¿por qué no se hace lo mismo con un ser humano muerto para que pueda vivir de nuevo?. No se trata de entrar en polémica, es cuestión de aclarar las cosas, los científicos con la llamada ciencia, no encuentran el espíritu en el cuerpo humano y los teólogos de todas las religiones hablan de espíritu como cosa muy conocida, pero en general lo desconocen y dicen que Dios aplica a los espíritus premios y castigos pero eterno, por ejemplo el catolicismo, protestantismo, etc. hablan del cielo, del infierno, etc. pero estos teólogos, sacerdotes, obispos, etc. desconocen por completo la grandiosidad de Dios, por esto hay religiones que hablan de la reencarnación, para ver de aclarar las cosas, pero el catolicismo, protestantismo, etc. no admiten la reencarnación. Ahora bien, alguien o algo ha hecho posible nuestra existencia y la del Infinito Universo y al Creador lo llamamos Dios; se dice que Dios es Espíritu y que estamos hechos a su imagen y semejanza, pero Dios es Espíritu, Luz, Vida, Universal, somos pues los seres humanos espíritus, y ahora es cuando podemos entender mejor la Biblia, cuando dice que alguien ha muerto, "El cuerpo vuelve a la tierra y el espíritu vuelve a Dios", somos pues todos hijos de Dios, Él es nuestro Padre y Creador. Los científicos nunca podrán encontrar dentro del cuerpo humano el espíritu que le da la vida y los sacerdotes de todas las religiones del mundo no son ni pueden ser intermediarios entre el Creador y lo creado, o sea, entre Dios y los seres humanos, por ser también los sacerdotes seres humanos creados por Dios. Y todo espíritu en el ser humano que busque en si mismo al Espíritu de Dios, que los cristianos llamamos el Cristo, y vive en y con Cristo, en y con Dios, se convierte en un verdadero apóstol de Cristo y sacerdote de Dios. Esto es el sencillo y único evangelio de Cristo, o sea, buscar el Espíritu Universal de Dios en uno mismo, sin intermediarios de ninguna clase, esto es lo que practicamos y predicamos los obreros y obreras que formamos la Iglesia Pobre, la de Cristo. Amen. (Julio).

 

 

MENSAJE APOSTÓLICO DE LA IGLESIA POBRE

 

En otros mensajes ya hemos dicho que nuestra familia somos descendientes de los primeros israelitas cristianos que llegaron a Mallorca, poco tiempo después de la muerte de nuestro Rabí, el obrero carpintero Jesús de Nazareth, el Cristo, y sus sencillas enseñanzas han llegado hasta nosotros de forma oral de padres a hijos, pero también hay otros descendientes que seguían la religión de Moisés y ahora todos somos conocidos con el mote de “chuetas”. Pero nosotros, los cristianos, siendo obreros y junto con otros obreros descendientes o no, somos la única sinagoga o Iglesia Pobre, la que fundó Jesús de Nazareth en Israel hace casi dos mil años, somos pues la Iglesia de Cristo, pero todos los pobres del mundo, hombres y mujeres si siguen a Cristo, el Espíritu Universal de Dios, forman parte de nuestra Iglesia Pobre. La organización religiosa conocida como Iglesia católica y el protestantismo de Lutero son la Iglesia rica, que se apropió  nuestro cristianismo de Roma y así nació el Vaticano, Papas, etc., pero estas organizaciones religiosas, catolicismo, protestantismo, etc., no son cristianas, ya que están compuestas de ricos y pobres, o sea, explotados y explotadores, unos creyentes que se hacen ricos a costa del trabajo de otros creyentes y además de esta injusticia social, los ricos arman las guerras, etc. y los sacerdotes católicos y protestantes, etc. les apoyan y son cómplices y claro está, que todo esto no es la Iglesia Pobre, la de Cristo en el mundo. Los mandamientos de Dios que Moisés dio al pueblo judío y al mundo entero, Jesús de Nazareth nos dice que los dos principales mandamientos son “Ama a Dios sobre todas las cosas” y “Ama a tu prójimo como a ti mismo”, Jesús nos dice que no hay mandamiento mayor que éstos, está claro pues que hacerse rico a costa del trabajo del prójimo, organizar guerras, etc. es burlarse de Dios y del prójimo. Nosotros, los obreros y obreras que formamos la Iglesia Pobre, siendo apóstoles de Cristo y sacerdotes de Dios, no tratamos de juzgar a nadie, pero tenemos el derecho y el deber de aclarar las cosas y así ayudar a los católicos, protestantes, etc. para que vean el engaño y que no están en la única y verdadera Iglesia de Cristo, la Iglesia Pobre. Comprendemos que seguramente hay personas de buena fe en estas organizaciones religiosas que tratan de verdad seguir a Cristo, pero es en sí mismo donde lo encontrarán y no en la religión organizada por los hombres. La Religión de Dios es Universal y en este mundo la componen todos los pobres, pero los que cumplen de verdad los mandamientos de Dios y también los ricos si se hacen pobres  y cumplen los mandamientos de Dios. Y este es el único y verdadero evangelio de Cristo, acudir a Dios, nuestro Creador y Padre, de forma directa, en sí mismo, en la propia vida, sin intermediarios de ninguna clase. Este es nuestro mensaje apostólico que damos a toda la humanidad como apóstoles de Cristo y sacerdotes de Dios. Pero esto está al alcance de toda la humanidad. Buscad a Cristo. Así sea. Amén. (Agosto).

 

 

LA CRISIS QUE DURA DESDE HACE SIGLOS

 

En la actualidad se habla de crisis, pero hace muchos siglos que la mayor parte de la humanidad sufre las consecuencias de la crisis, los pobres. Ya en tiempos de los faraones de Egipto y después en Israel, Europa, América, China, etc., vemos siempre una humanidad dividida en ricos y pobres, o sea, explotados y explotadores, unos que se enriquecen a costa del trabajo de otros y con la complicidad de los sacerdotes de todas las religiones, el militarismo, etc. y le llaman a todo esto civilización, cultura, etc. y en la actualidad democracia, etc. y algunas veces han habido revoluciones, dictaduras, etc., pero siempre es también igual, siguen los ricos y los pobres formando la humanidad dividida y mientras unos viven bien, los otros sufren la crisis, el paro obrero, el hambre, las guerras, etc.. Pero nosotros, los obreros y obreras que formamos la Iglesia Pobre, la de Cristo, nos basamos en las sencillas enseñanzas de Cristo, ya que Él es Luz y cuando hay Luz se ven las cosas claras; no se trata pues de revoluciones armadas, es cuestión de que los obreros y obreras, pobres del mundo, pensemos con la cabeza, como vulgarmente se dice; por ejemplo, procurar no traer muchos hijos al mundo para no aumentar el número de pobres, de soldados para las guerras que organizan los ricos, etc., en una palabra, basta ya de carne de cañón y mano de obra barata. Y después hay que procurar buscar la guía y la Verdad del obrero carpintero Jesús de Nazareth, el Cristo, y tener siempre presente sus enseñanzas, "No se puede servir a Dios y al dinero", "Sed prudentes como serpientes y sencillos como palomas", "Bienaventurados vosotros los pobres, porque vuestro es el reino de Dios", "Aprended de mi", "Toma tu cruz y sígueme". Comprendemos muy bien que se trata de ser buenos pero no tontos, la oración a Dios es la base, pero al margen de todas las religiones organizadas y darse de baja de la que uno practique, ya que vemos que los ricos, los militares y los sacerdotes de todas las religiones van siempre unidos, explotando a los pobres, alimentando la injusticia social con la hipócrita y vergonzosa llamada limosna o lo que llaman ayuda social. Ya hemos dicho en otras ocasiones que los seres humanos, y peor si son creyentes de una religión determinada, si se enriquecen a costa del trabajo del prójimo se burlan de Dios y del prójimo, ya que Dios dice, "Ama a tu prójimo como a ti mismo", hablar pues de crisis par parte de los gobiernos y decir que todos debemos colaborar para salir de la crisis, es burlarse de la gente. Los que lo estropean todo que lo arreglen, no carguen el peso sobre las espaldas de los pobres, que somos los únicos que padecemos siempre la crisis a través de toda la historia humana. Ánimos pues amigos obreros y obreras, los pobres del mundo, procurad ser como nosotros Iglesia Pobre, buscad a Cristo en vosotros mismos y comprended que el nombre que deis a Cristo es lo de menos ya que es el Espíritu Universal de Dios. Ánimos amigos. Así sea. Amen. (Agosto).

 

 

DIOS ES EL ORIGEN DE LA VIDA

 

Dios es el origen de toda clase de vida del infinito Universo, y claro está, no me refiero a los dioses muertos o inventados por las religiones humanas; Dios es el Espíritu o mente Universal, podemos decir que el infinito Universo es una idea de Dios, pero una idea con in infinito cuerpo físico, o sea, material, resumiendo, es una idea materializada. Buscar pues el origen de la vida con instrumentos físicos, como hacen los científicos en nuestro mundo, es algo infantil, es perder el tiempo, ya que nadie ha visto jamás una idea en el cerebro humano, y claro está, que nadie puede negar la existencia de las ideas, pues cuando hacemos algo, o simplemente hablamos, es porque antes lo hemos pensado; y parece mentira que una cosa tan sencilla, no la comprendan los científicos, los estudiosos que se declaran ateos, etc., y pueda comprenderla y explicarla un obrero yesero ya jubilado, yo mismo y  hacerlo aquí en Palma de Mallorca, sin copiarlo de ningún libro, ni haber salido de la isla para que alguna persona me enseñara todo esto. Y si los científicos contestan a este mensaje, con lo ya repetido en muchas ocasiones, que el Universo empezó por casualidad con una gran explosión, estamos en lo mismo; ya que el infinito Universo con millones de millones de mundos, Soles, etc., todo vive y se mueve de forma matemática y con seres humanos, o con otros nombres en otros mundos que tienen un cerebro y piensan por sí  mismo, no se puede rechazar la idea antes de la acción, nosotros de forma muy sencilla, a la idea Universal la llamamos Dios, o sea,  el origen de la vida del infinito Universo, y sus varias formas de vida del mismo Universo. Y claro está, que si existimos es porque algo o alguien ha hecho posible nuestra existencia, hemos sido creados, no podemos pues negar a nuestro Creador; pero una idea no es algo físico, es mente, creer que Dios es Espíritu y nosotros también, no es pues una cosa tonta, un disparate, además hay seres humanos que han dicho, Dios es Espíritu, y los seres humanos estamos hechos a su imagen y semejanza. Decir que el infinito Universo empezó con una gran explosión no es lógico ni razonable, pues tendríamos una idea, un Dios dormido sin vida desde la eternidad y en un momento dado entra en acción; pero si pensamos que desde la eternidad se suceden grandes explosiones, grandes cambios y siguiendo siempre la vida, ya estaremos muy cerca de la Verdad de Dios y de lo que es el origen de la vida. Esto es pues amigos, tener las ideas claras de un obrero más de la Iglesia Pobre. Y claro está, que podemos comprender muy bien al obrero carpintero Jesús de Nazareth, que llevaba en sí mismo al Cristo, predicando y enseñando la Religión Universal de Dios; nosotros, los obreros y obreras que formamos la Iglesia Pobre de Cristo, no tenemos nada que ver con el catolicismo ni con el protestantismo, que no tienen nada que ver con Cristo. (Septiembre).

 

 

DIOS Y LOS RICOS Y POBRES DEL MUNDO

 

Todas las religiones del mundo se basan en sus libros sagrados, todos dicen lo mismo del amor a Dios y al prójimo, etc.. Pero aquí, en este mensaje, nos referimos a las religiones que se basan en la Biblia, judaísmo, catolicismo y protestantismo, todos se auto-titulan cristianos, menos el judaísmo. Podemos leer en la Biblia lo siguiente, “No matarás, no robarás”, Éxodo capítulo 20 y “Amarás a tu prójimo como a ti mismo”, Levítico 19-18. Todo esto está en el llamado antiguo testamento y en el nuevo está lo siguiente, “Amarás a Dios sobre todas las cosas y al prójimo como a ti mismo, no hay otro mandamiento mayor que estos”, Marcos 12-28 al 33. “En esto se conocerá que sois mis discípulos, si tuviereis amor los unos a los otros”, Juan 13-35. “Dios es Amor, el que vive en Amor vive en Dios y Dios vive en él”, Primera Juan 4-16. Estos versículos de la Biblia son suficientes para comprender la Justicia de Dios. Está claro que tanto el judaísmo como el llamado cristianismo católico y protestante, no practican la Ley de Dios ya que sus sacerdotes consienten que sus creyentes se exploten unos a otros y se maten en las guerras organizadas por los ricos, para enriquecerse más a costa de la vida de los pobres. Y la llamada civilización, cultura, religión, etc., son un gran engaño social, que produce revoluciones sangrientas de los pobres contra los ricos y tenemos como ejemplo el comunismo; pero si no limitamos al llamado cristianismo católico y protestante, vemos que unos creyentes se hacen ricos a costa del trabajo de otros creyentes, o sea, que en lugar de amar al prójimo, lo explotan burlándose así de Dios y del prójimo y los sacerdotes se callan, haciéndose cómplices de esta brutal y asquerosa blasfemia contra Dios, de estas organizaciones religiosas. Pero cuando Cristo dice, “No se puede servir a Dios y al dinero”, Mateo 6-24. Y “Bienaventurados vosotros los pobres porque vuestro es el reino de Dios”, Lucas 6-20, nos aclara muy bien que nosotros los obreros y obreras que formamos la Iglesia Pobre, somos la única y verdadera Iglesia de Cristo. Pero si tenemos a Cristo en el corazón, en nuestra propia vida, nos convierte en apóstoles y sacerdotes de Dios. No confundir pues las cosas, no es lo mismo la Religión de Dios que las religiones organizadas por los hombres; la Religión de Dios es Justicia, Paz, Amor, Bondad, etc. y las religiones de los hombres son confusión, fanatismo, maldad, injusticias, guerras, etc. y todo esto es porque no tienen a Dios. Y claro está, que nosotros, la Iglesia Pobre no necesitamos templos, ni sacerdotes con estudios de seminario y a sueldo, ya que resumimos así la Religión de Dios, “La Iglesia verdadera en cada casa obrera y Cristo en el corazón” y esto es la sencilla Iglesia que fundó el obrero carpintero Jesús de Nazareth, el Cristo. Tener pues a Cristo, el Espíritu Universal de Dios en sí mismo, en la propia vida, es lo más necesario para toda la humanidad si queremos un mundo de Justicia, Paz y Armonía. Así sea. (Septiembre).

 

 

YO A MI CREADOR LE LLAMO DIOS

 

Una cosa es cierta, yo no me he creado a mí mismo, alguien o algo ha hecho posible mi existencia, y claro está, que puedo pensar lo mismo de los demás seres humanos, animales, plantas, etc. y del infinito Universo, llamar Dios a mí Creador lo veo normal, se le puede dar otro nombre, yo le llamo Dios, ya se que me han traído al mundo mis padres, pero a los primeros seres humanos alguien los creó y si los primeros o el primero se creó a sí mismo, estamos en lo mismo, alguien o algo se creó a sí mismo y creó el infinito Universo, soles, mundos, etc., y seres humanos, animales, plantas, etc., no puedo pues negar a mi Creador que llamo Dios y creo que nadie puede negarlo. Y al pensar todo esto me doy cuenta que yo soy algo, que llamamos ser humano, persona, espíritu, etc. y otra vez nos encontramos que sólo cambia el nombre, pero lo cierto es que yo soy algo que no envejece, es mi cuerpo físico que cambia, pero yo soy el mismo, pero teniendo un cerebro para pensar, veo que tengo algo que llamamos memoria y puedo recordar cosas pasadas, pero también hay algunas veces que veo en mi mente cosas del futuro, a esto no puedo llamarlo memoria, entonces tengo que razonar, pensar, que mi Creador que llamo Dios, sabe el pasado, el presente y el futuro, y lo veo muy normal ya que Dios es el Creador de todo. Ahora bien, razonando y meditando todo esto, veo que en mi mente hay ideas que bien puedo llamar ideas positivas y también ideas negativas, lo que llamamos el bien y el mal, por ejemplo, el egoísmo es del mal ya que conduce al ser humano a enriquecerse a costa del trabajo de otros, organizar guerras, etc., mientras que el amor de Dios es del bien, es la bondad, todo esto me hace razonar así, esta vida que Dios me da puedo vivirla como persona, como ser humano, vivir la vida sin ensuciarla, o vivir y portarme peor que los animales. Supongamos que yo soy un empresario, comerciante, etc., y tengo obreros que trabajan para mí, si el negocio va bien y yo me quedo con los beneficios, o sea, la riqueza que produce el trabajo, yo me haré rico, pero los obreros que trabajan para mí no se harán ricos, y esto se producirá por mi egoísmo y por tener unas leyes hechas por los hombres, que permiten esta injusticia social, apoyado todo esto por los sacerdotes de todas las religiones del mundo. Pero todo esto no es civilización, no es cultura, no es religión, etc. y si yo me comporto así no soy una persona humana, soy simplemente un animal, egoísta, completamente falto de lo que llamamos buenos sentimientos. Ahora ya puedo muy bien referirme aquí al obrero carpintero Jesús de Nazareth, el Cristo, y decir como digo siempre que Jesús es un ejemplo para imitar, y Cristo para mí es el único “Maestro”, soy pues un creyente más de la Religión de Dios, y practico y predico el evangelio de Cristo, soy pues, apóstol de Cristo y sacerdote de Dios en su Iglesia Pobre, y esto puede serlo todo ser humano que busque a Dios en sí mismo. Ánimos amigos. Amén. (Octubre).

 

 

JESÚS DE NAZARETH ERA POBRE

 

El obrero carpintero Jesús de Nazareth, por ser un trabajador era pues un pobre, no era un sacerdote, un militar, ni comerciante, empresario, etc., en un palabra no era rico, y dijo: “Aprended de mí”, “No se puede servir a Dios y al dinero”, “El reino de Dios es de los pobres”, y el profeta Sofonías dijo: “Un pueblo pobre espera en Dios”. Y Jesús de Nazareth con algunos de sus amigos pobres fundó la pequeña sinagoga pobre, mucho tiempo después ya se decía que Jesús de Nazareth llevaba en sí mismo el Espíritu Universal de Dios, llamados por algunos el Cristo, por esto se empezó a llamar cristianos a los seguidores de Jesús de Nazareth y su Iglesia en lugar de sinagoga. Por esto algunos de los “chuetas”, o sea, descendientes de los primeros israelitas seguidores de Jesús de Nazareth y que llegaron a Mallorca poco tiempo después de la muerte de Jesús, nos enseñaban de forma oral, de padres a hijos, las sencillas enseñanzas de nuestro Rabí, Jesús de Nazareth, y muy bien podemos llamar a Jesús de Nazareth el Cristo, y nosotros cristianos, está bien pues, decir Iglesia Pobre. Y nos alegra mucho ver que la palabra pobre es considerada de valor espiritual, en el diccionario por ejemplo, se puede leer lo siguiente: “Pobre (entre otras cosas se dice) él que reúne las cualidades de la humildad cristiana”, diccionario enciclopédico Grijalbo, esto ya es bastante para nosotros. Tengamos siempre presente que todos los obreros y obreras del mundo son pobres, sin trabajar no comen y si están en paro forzoso tienen que cobrar algo del gobierno, de lo contrario se morirían de hambre o tendrían que robar para comer. La humanidad está dividida en ricos y pobres, ya es hora de que todos los pobres del mundo comprendan que no hay que aumentar más el número de pobres, no hay que traer tantos hijos pobres al mundo, es más humano abortar que traer al mundo más pobres, para que los ricos dispongan siempre de mano de obra barata, fábricas de armas en marcha, más soldados para las guerras que organizan los ricos, etc.. Hay que comprender todo esto y ser buenos pero no tontos. Y esto lo tenemos muy claro los obreros y obreras que formamos la Iglesia Pobre, la que fundó el obrero carpintero Jesús de Nazareth, que llevaba en sí mismo al Cristo, que es la Luz, y cuando hay Luz se ven las cosas claras. Todas las religiones del mundo, y en particular el catolicismo, protestantismo, etc., son sectas ricas, que apoyan a los ricos, pero no tienen nada que ver con Cristo, ya que ningún ser humano rico puede ser cristiano. Pero hay que comprender que no basta ser pobre para ser cristiano, además de ser pobre hay que buscar en sí mismo al Cristo y al vivir en y con Cristo, con Dios, el pobre, sea hombre o mujer, se convierte en verdadero apóstol de Cristo y sacerdote de Dios, esto es ser cristiano, y claro está que el rico si se hace pobre puede hacer lo mismo, y todo esto se consigue con oración y trabajar para comer, o sea, un verdadero diálogo con Dios en uno mismo y trabajar para comer. Ánimos amigos. Amén. (Octubre).

 

 

AYUDA SOCIAL PERO TAMBIÉN PREVENIR CON CRISTO

 

La llamada “ayuda social”, “ayuda humanitaria”, no es más que la eterna y vergonzosa limosna que se hace a los pobre; comedores, asilos, hospitales, pensiones para la vejez, actos culturales a beneficio de tal obra o institución caritativa, etc., tomando parte siempre las religiones, los partidos políticos, etc. y claro está, tratan de ayudar, de curar a los alcohólicos, drogados, etc. y la gran mayoría de las personas que ayudan, lo hacen de buena fe y muchos sin cobrar nada, o sea, de forma desinteresada. Pero nosotros, los obreros y obreras, que formamos la única iglesia de Cristo en este mundo, o sea, la Iglesia Pobre, tenemos el derecho y el deber de aclarar las cosas del llamado cristianismo católico y protestante, etc., que no tiene nada que ver con Cristo. La ayuda a los  pobres está bien, pero dicha ayuda estará mucho mejor y más eficaz cuando sea definitiva, o sea, prevenir; aconsejamos a los sacerdotes de todas las religiones del mundo, a los sindicatos obreros, partidos políticos, etc., que prediquen y propaguen este mensaje y si se niegan o lo pasan por alto, allá ellos, ya que lo importante es que este mensaje llegue a todos los pobres del mundo. Obreros y obreras de todo el mundo, no traigáis muchos hijos al mundo, no aumentéis el número de pobres, de obreros en paro, de soldados para las guerras que organizan los ricos, basta ya de mano de obra barata, de explotación, basta ya de engaño y tened siempre muy presente que es mejor y más humano el aborto, que traer hijos al mundo para que unos cuantos puedan hacerse ricos a costa de su trabajo y a costa de sus vidas en las guerras. Cuando se tiene en sí mismo al Espíritu Universal de Dios, que los cristianos llamamos Cristo, vemos las cosas claras porque Cristo es la Luz; el cristiano de Cristo es pacífico, se niega a hacer el servicio militar, no vota a nadie, se da de baja de la religión, llámese como se llame, trabaja para comer y practica y predica el cristianismo de Cristo, o sea, oración y trabajo; el cristiano no se hace rico por la sencilla razón de que nadie se hace rico sin explotar al prójimo, se hace rico a costa del trabajo del prójimo, pero el cristiano  tiene muy presente el mandamiento de Dios y que Cristo nos lo recuerda, “Ama a tu prójimo como a ti mismo”. Está bien, pues, la ayuda social, pero mientras tanto hay que ver y prevenir la gran injusticia social y esto solamente se ve y se vive cuando se tiene a Cristo en sí mismo, o sea, los ricos, los militares y los sacerdotes de todas las religiones en nuestro mundo, van juntos y forman una especie de trinidad diabólica que a través de muchos siglos, explota, mata, destruye, etc., a los pobres y lo que construyen los pobres, casas, pueblos, ciudades, etc., con guerras, golpes de estado, dictaduras, etc. y aquí tenemos la gran secta destructiva que muy poca gente ve y mucha gente se fija, y solamente ve las sectas pequeñas. Buscad a Cristo. Así sea. Amén. (Noviembre).

 

 

CARTA ABIERTA AL PAPA CATÓLICO

 

Me llamo Cayetano Martí Valls, nacido en Inca, Mallorca, soy un obrero yesero ya jubilado y no tengo estudios ; pues empecé a trabajar a la edad de 9 años de aprendiz de herrero, hasta la edad de 14 años, que empecé de yesero hasta mi jubilación. Soy descendiente de los primeros  israelitas cristianos que llegaron a Mallorca muy poco tiempo después de la muerte de nuestro Rabí, el obrero carpintero Jesús de Nazareth el Cristo, y sus sencillas enseñanzas han llegado hasta mí, de forma oral de padres a hijos. Esto ocurrió en unas pocas familias, ya que la mayoría de los israelitas llegados a Mallorca seguían la religión de Moisés. Yo soy uno de los pocos descendientes de los que quedaron vivos después de la matanza hecha por la inquisición católica y con la llamada “conquista”, por el rey Jaime I. Pero esta carta mensaje, es para ti como jefe de la organización católica, para darte idea clara de nuestro cristianismo, conservado por unos pocos descendientes, conocidos en Mallorca con el mote de “chuetas”, somos pues con otros amigos, chuetas o no, la Iglesia Pobre, en la actualidad el único cristianismo en el mundo. Y claro está, que la organización católica que tu diriges o presides no es el cristianismo de Cristo, porque es una organización compuesta de ricos y pobres, o sea, unos creyentes que se hacen ricos a costa del trabajo de otros creyentes, burlándose así de Dios y del prójimo, pues Dios dice, “Ama a tu prójimo como a ti mismo” y los sacerdotes se callan y tampoco dicen nada de las guerras que organizan los ricos, está pues muy claro que el catolicismo no es cristianismo. Pero tampoco es cristiano el protestantismo de Lutero, ya que actúan igual que el catolicismo. Y amigo, comprendemos que tanto en el catolicismo como en el protestantismo hay hombres y mujeres que encontraron a Cristo, en sí mismo, en su propia vida, pero estas personas pertenecen a la Religión Universal de Dios, la Iglesia Pobre. Ánimo amigo Papa católico, como puedes ver no nos metemos en tonterías, como esto de, tu eres Pedro, el jefe, etc. ya que hay algo mucho más serio, más importante, repitiendo lo que dijo el apóstol Pablo a unos supuesto seguidores de Cristo, ¿y tu como jefe del catolicismo y tus seguidores, habéis recibido el espíritu santo?, el catolicismo y el protestantismo, como organización demostráis claramente que no. Así pues nosotros, los obreros y obreras que formamos la Iglesia Pobre, os aconsejamos a todos que busquéis a Cristo, cada uno en sí mismo, en su propia vida y formaréis parte con nosotros en la única Religión de Dios, o sea, la Iglesia Pobre. Amigo Papa o jefe católico, nosotros tenemos las ideas muy claras, comprendemos que no basta con ser pobre para ser cristiano, ya que sin Cristo en sí mismo, en la propia vida, nadie es cristiano, por pobre que sea o por muchos estudios o dinero que tenga. Ánimos amigos, todos, buscad a Cristo. Así sea. Amén. (Noviembre).

 

 

LA DEMOCRACIA SIN DIOS NO SIRVE

 

Pero nos referimos al Dios Creador del infinito Universo, no a los dioses muertos de todas la religiones en nuestro mundo; la Democracia sin Dios no sirve, como tampoco las dictaduras. Y nosotros los obreros y obreras que formamos la Iglesia Pobre, la que fundó el obrero carpintero Jesús de Nazareth, el Cristo, tenemos las ideas clara sobre Dios, Justicia, Paz, Bondad, Armonía, etc., entendemos que estas cosas son de Dios y son buenas para toda la humanidad; pero el odio, egoísmo, envidia, maldad, guerras, etc., son cosas malas para toda la humanidad. Y a través de la historia de la humanidad, vemos que en muchas ocasiones, los pobres han hecho revoluciones contra los ricos, implantando dictaduras obreras; pero también hay dictaduras militares, etc., pero el capitalismo dice y pregona la idea de que lo mejor es la Democracia., Pero sin acudir a la historia, vemos en la actualidad lo que es la Democracia, por ejemplo España, Inglaterra, Norte América, etc., donde domina el capitalismo y lo disfrazan o adornan con partidos políticos, elecciones generales, muchas religiones, etc. y nos dicen que el pueblo manda, pero después de las elecciones gane quien gane, todo sigue igual, no cambia nada. Nos quieren hacer ver que ricos y pobres, o sea, explotados y explotadores, todos podemos vivir en paz y armonía, con la llamada Democracia y esto además de ser un gran engaño, es una burla a Dios y al pueblo pobre, o sea, todos los obreros y obreras del mundo. ¿Cómo se puede vivir en paz y armonía si unos se hacen ricos a costa del trabajo de otros?, millones de obreros y obreras que trabajan en el mundo, con su trabajo se produce riqueza que se la quedan unos cuantos, esto es el capitalismo, lo que llaman Democracia. Y lo triste es ver como el militarismo y los sacerdotes de todas las religiones del mundo, apoyan esta injusticia social, mejor dicho, barbaridad humana y  muchos seres humanos se convierten o se portan peor que animales devorándose unos a otros, la prueba está en lo siguiente: paro obrero, hambre, vicios y sobre todo las guerras. Mientras tanto unos viven cómodamente y rodeados de riquezas materiales, producto del trabajo, sudor, lágrimas y muerte de los pobres del mundo. Por lo tanto la Democracia sin Dios no sirve de nada, es más negativa que positiva; y al nacer todos los seres humanos, nacen pobres, es natural pues ser pobre; se dice que en la Democracia hay libertad, que el ser humano es libre, esto es otro engaño ya que dicha libertad consiste en poder hacerse ricos a costa del trabajo de otros y claro está, que si todos somos ricos, todos moriremos de hambre, pero si todos los seres humanos que puedan trabajar trabajan, habrá comida para todos. Ser pobre y trabajar para comer es natural, es pues cristiano; pero vivir sin trabajar y hacerse rico a costa del trabajo de otros, es explotar, engañar, robar, etc. y esto es la Democracia sin Dios. Los obreros y obreras que formamos la Iglesia Pobre lo tenemos muy claro, no votar, no hacer el servicio militar, no traer muchos hijos al mundo y darse de baja de la religión de los ricos, llámese como se llame. Así sea. (Diciembre).

 

 

LA VIDA DEL ESPÍRITU DEL SER HUMANO ES CRISTO

 

El Espíritu de Dios, que los cristianos llamamos Cristo, dice por boca del obrero carpintero Jesús de Nazareth: “Yo soy la verdad y la Vida”, Juan 14-6. Y siendo el Espíritu que dice esto, entendemos muy bien que además de ser la Vida del infinito Universo, soles, mundos, estrellas, etc., como también los seres que viven en ellos, es al mismo tiempo la Vida de todo ser espiritual, es pues la “Verdad y la Vida” del espíritu de todos los seres  humanos en nuestro mundo. Y claro está que entendemos muy bien que “la Verdad y la Vida”, que es Cristo, no es una simple verdad humana, que es muy relativa, ni es tampoco la vida física en el ser humano, la Verdad de Cristo es la Verdad Universal, o sea, es la Verdad de Dios, y la Vida de Cristo es la Vida para el espíritu de cada ser humano, por esto el espíritu sin Cristo no tiene Vida, está dormido, simbólicamente está muerto, pero si el espíritu del ser humano busca en si mismo a Cristo y vive en y con Cristo, con Dios, ya ha despertado, ha resucitado y nunca podrá morir ya que el espíritu ya tiene la Vida eterna que es Cristo. Y claro está, que las ceremonias religiosas, dogmas, ritos, etc. no sirven para encontrar a Dios, es en sí mismo, es con la íntima oración a Dios, es un verdadero diálogo con Dios y quien nos facilita el camino es solamente Cristo. La Vida espiritual es una verdadera comunión con Dios, pero la llamada comunión católica, protestantes, etc. que solamente son ceremonias, ritos, o sea, la hostia, el pan y el vino, etc., todo esto no tiene nada que ver con la auténtica comunión con Dios y que solamente se realiza cuando el Cristo está en y con el espíritu del ser humano. Y claro está que al tener a Cristo en sí mismo, se tiene la Verdad, la Vida, la Luz, etc. y ya se sabe que cuando hay Luz se ven las cosas claras, por esto los obreros y obreras que formamos la Iglesia Pobre,  tenemos las ideas claras. Y sabemos por propia experiencia que no basta ser pobre y decir que se forma parte de la Iglesia Pobre, pues si le falta Cristo, no es cristiano ya que ser cristiano no es un asunto religioso, de creencias, etc., ser cristiano es estar en y con Cristo, o sea, es vivir en y con Dios. Pero vivir cristianamente es trabajar para comer, pero no dedicarse al llamado negocio para hacerse rico a costa del prójimo; ya Dios dice, “Ama a tu prójimo como a ti mismo” y al no cumplir el mandamiento de Dios, es burlarse de Dios y del prójimo, el cristiano trabaja para comer y vive una vida de oración a Dios, convirtiendo su propia casa en una verdadera Iglesia de Cristo. Esto es el verdadero y único evangelio de Cristo, buscar a Dios en sí mismo, sin intermediarios de ninguna clase y de esta forma el espíritu que tiene en sí mismo a Cristo, se convierte en un verdadero apóstol de Cristo y sacerdote de Dios y con propiedad puede predicar, aconsejar a los demás que hagan lo mismo. Aconsejamos a todos los seres humanos que busquen a Cristo. Así sea. Amén. (Diciembre).

 

 

LOS PROFETAS,  LOS SACERDOTES Y CREYENTES

 

En toda la historia de la humanidad vemos siempre lo mismo, primero aparecen en el mundo unos seres humanos, hombres y mujeres que encontraron a Dios en sí mismo, y son conocidos como profetas, Mesías, etc., después vienen intermediarios, o intérpretes de las experiencias de los profetas y se escribieron libros sobre estas cosas, presentándolos al mundo como libros sagrados, como palabra de Dios. Y los seguidores de los sacerdotes son conocidos como creyentes, seguidores de tal o cual religión, etc., pero todas estas organizaciones llamadas religiones, desde su principio están siempre compuestas de ricos y pobre, o sea, unos creyentes que se hacen ricos a costa del trabajo de otros creyentes, por la sencilla razón de que sólo tienen en su vida, creencias, dogmas y practican ritos, etc., que les enseñan los sacerdotes que solamente tienen estudios de seminario, pero tanto a los sacerdotes como a los creyentes les falta lo más importante, les falta la propia experiencia espiritual, por esto la gran mayoría tiene la mente llena de egoísmo, por esto vemos tantas religiones y millones de creyentes, pero sin Dios. Y seguro que en todas las religiones hay personas que de verdad buscan a Dios, que tratan de buscar a Dios de forma directa, como los profetas de todos los tiempos, pero lo buscan en sí mismo y no a través de la religión que practican, dando la idea clara de que los sacerdotes de seminario y sueldo mensual sobran y entorpecen el camino a los seres humanos que buscan a Dios. Nosotros, los obreros y obreras que formamos la Iglesia Pobre, tenemos todo esto muy claro, el obrero carpintero Jesús de Nazareth llevaba en sí mismo al Cristo, o sea, el Espíritu Universal de Dios, unos lo tienen como profeta, Mesías, hijo de Dios, etc., pero para nosotros, los obreros que formamos la Iglesia Pobre que fundó Jesús de Nazareth hace casi dos mil años en Israel, es el Mesías, es un vivo ejemplo a seguir, ya que nos enseña el camino de forma directa para encontrar a Dios, comprendemos muy bien que sin Cristo en uno mismo, en la propia vida, no hay cristianismo. Tenemos la idea muy clara de que los primeros seres humanos en el mundo que tuvieron experiencias espirituales y que encontraron a Dios, fue todo en sí mismo, no podía ser de otra forma, por la sencilla razón de que no existían  religiones, por lo tanto no había sacerdotes intermediarios. Y Cristo dice: “Yo soy el Camino, la Verdad, la Vida, la Luz, la Paz, etc.”, vayamos pues, a Cristo de forma directa y no sigamos a seres humanos que no conocen a Cristo y solamente tienen estudios de seminario. Y cuando nos referimos a Cristo, es el Espíritu Universal de Dios, pero cualquier ser humano, si busca al Cristo en sí mismo, en su propia vida, se convierte en un verdadero apóstol de Cristo y sacerdote de Dios, y claro está, no tiene nada que hacer en la religión que practica. Esto es el evangelio de Cristo y esto es lo que practicamos y predicamos la Iglesia Pobre. Amén. (Diciembre).